Esta es una novela cuyo argumento nos habla de la historia de dos hermanas pequeñas que tienen un juego que las emociona y unos padres que confían, quizá excesivamente, en que ellas ya pueden cuidarse solas. Hasta que algo ocurre en sus vidas que hace que todo se trastoque dramáticamente.
Es una novela corta, unas doscientas páginas, pero las suficientes para que te revuelva mucho. No llevas muchas leídas cuando ya empiezas a pensar que "se masca la tragedia", es previsible desde muy pronto, aunque desvelarse, desvelarse exactamente lo que ocurre no será hasta muchísimo más adelante.
En general es una novela con mucho ritmo porque está divida en capítulos muy cortos encabezados por un título con una cifra pequeñita que indica la edad de la protagonista. De este modo al romperse tanto la cronología la historia brinca una y otra vez y consigue un mayor ritmo. Aún así un poco antes de la mitad decae un pelín, aunque bueno enseguida remontas y lo cierto es que la cuarta parte última se lee de un tirón.
Está ambientada en la isla de Lanzarote y sus volcanes. A mí eso me agrada mucho. Además la ambientación es perfecta. Y también el vocabulario está muy salpicado de localismos que ayudan muchísimo a esa atmosfera de isla canaria. Hay mucha riqueza en el lenguaje de esta novela.
Es una pequeña novela pero tremenda por los temas que toca: El drama familiar y como cada persona de una familia lo afronta. El alcoholismo. La infancia, la culpa.
Sinceramente a mí me habría gustado un poquito de más hondura en el argumento de la historia, he tenido la sensación de que revolotea un poco, no acaba de posarse y yo quería todas, todas las respuestas a mis preguntas. Pero esto es muy subjetivo, y sí que creo que, en general, llega al lector.
En cambio, he disfrutado mucho de la estructura de la novela, de su forma. Me ha parecido muy oportuno el fragmentar la historia y me ha parecido muy curioso el detalle de la edad como un numerito del bingo al mismo tiempo que una señal para hincar cronológicamente ese momento y situarnos en la lectura. También la novela tiene algunos dibujitos que van dando el toque visual infantil y curioso a la historia. Me ha gustado también el realismo mágico de "la herencia" que tiene esta familia. Y la ambientación me parece muy lograda, la isla, su volcán es un personaje más. A mí, que me gustan tanto las Islas Canarias, solo por eso lo cierto es que ya me había ganado.
He leído que es la primera novela de una joven autora y me ha parecido muy buen arranque en la literatura.






















