Un blog de literatura y de Madrid, de exposiciones y lugares especiales, de librerias, libros y let

domingo, 7 de abril de 2024

Recital de Aurora Luque en el Teatro de la Abadia

 



Era septiembre de 2023, y acabábamos de volver de la isla de Corfú, que me había encandilado con ese aire decadente, tan mediterráneo, tan griego. Con esos tonos albero en sus fachadas descascarilladas, esa calma en el ambiente, y ese azul rodeándote hasta donde alcanza la vista. Me encantó. Corfú no es espectacular, pero tiene un toque tan doméstico, tan plácido y abarcable que me gustó mucho. Y entonces vi que en el teatro de la Abadía seis meses después iba a recitar sus poemas Aurora Luque (1962, Premio Nacional de Poesía 2022) y conociendo su poesía tan cercana a los clásicos, al verano, al mar, y que una es débil, no me pude resistir. 

Seis meses han estado nuestras entradas esperándome en la cómoda y por fin llegó el día. 

Me relaja mucho su poesía, tan mediterránea y clásica. 

Dividió el recital en seis islas y fueron alternándose, recitando los poemas que había elegido para cada uno de esos apartados, tanto ella como la actriz y directora Toñi Martín que lee muy, muy bien. En el apartado de la música también se alternaban. Por un lado, estaba la cantautora Cristina Ronsenvinge con sus canciones dedicadas a Safo que pertenecían a su obra teatral del mismo nombre, en la que también intervino Aurora Luque. La poeta es traductora de poesía y doctora en Filología Clásica. Y al violín estuvo Joan López de Soria Homar que nos deleitó con tres composiciones propias, mientras se proyectaban dibujos de unos artistas.

Entre el público, que yo reconociera, el también poeta y nombrador Fernando Beltrán, y el director de teatro Juan Mayorga, y una sala José Luis Alonso del teatro de la Abadía llena de oídos atentos. 

Dos ataques de tos de este constipado eterno que tengo me lo hicieron pasar fatal, pero cómo lo disfruté. Fue resetearse por dentro, procurarse una dosis extraordinaria de belleza y calma para seguir adelante. Un lujo un miércoles cualquiera. 

El mismo teatro de la Abadía parece un oasis en medio de Chamberí. 



La siesta de Epicuro

Ojalá que los dioses
me abandonaran. Todos.
Despertarme, de pronto,
desprovista de mapas,
limpia de certidumbres
añosas, despojada
de falacias y fábulas,
desnuda de pronombres
y atuendos de palabras
-sobre todo.

Ojalá
que los dioses, corteses,
todos me abandonaran.


sábado, 30 de marzo de 2024

"El muro de Berlín. Un mundo dividido" en la Fundación Canal. Sala Castellana 214

 



La otra tarde estuve viendo la exposición "El muro de Berlín. Un mundo dividido" de la Fundación Canal. 

¡Menuda exposición! Es muy completa, muy instructiva, muy intensa.

Narra pormenorizadamente la historia del Muro de Berlín y dicen que se tarda de dos horas a dos horas y media, pero vamos yo estuve mucho más y os aseguro que la última parte ya la vi mucho más rápido porque era demasiado muro para una tarde. Comentábamos que esta exposición deberían dejar que pudieras ir a verla más de un día, porque es tan completa, tiene tanta información, es tan interesante y tan variada que al final se te va muchísimo tiempo y no se puede ver igual de pormenorizadamente al principio que cuando ya llevas varias partes. 

Es una lección de historia muy bien explicada y expuesta en múltiples objetos originales, más de trescientos, que vas encontrando; más la dosificada información y expuesta en todos los paneles y fotografías que puedes leer o ampliar, y a eso le añades los audios, los vídeos, los testimonios... 

Por supuesto está incluida la audioguía y da gusto con ella ir avanzando por toda la exposición a tu propio ritmo deteniéndote el tiempo que quieras y donde quieras. 

Me acordé mucho de mi último viaje a Berlín cuando veía muchas de las fotografías y los recorridos de los transportes de entonces y algunos lugares emblemáticos que todavía se pueden visitar de los alrededores de donde estaba el muro. 

Vale un dinero pero que yo creo que se amortiza. Muy recomendable. 

















jueves, 28 de marzo de 2024

"El realismo íntimo de Isabel Quintanilla" en el Museo Thyssen

 



Me encantó la exposición monográfica de la pintora realista Isabel Quintanilla que hay ahora en el Museo Thyssen. 

Casada con el escultor Francisco López y cuñada de Antonio López casado a su vez con la artista María Moreno, formaban junto a otros un grupo de amigos y artistas que se conoce como los Realistas. Desde que se conocieron estudiando permanecieron unidos durante décadas creando a la vez. 

La exposición la componen 104 obras divididas en seis ámbitos diferentes: Temprana declaración de intenciones, Pintura de proximidad, La emoción de la ausencia, Más que compañeras, Los paisajes que más quiso y Hortus conclusus: Naturaleza doméstica.

Toda la exposición me ha gustado mucho, pero si tuviera que elegir una parte sería la tercera, la titulada "La emoción de la ausencia" que me pareció la más íntima, la más acogedora con esos interiores de su casa y su colegio. A esta parte pertenecen los cuadros Atardecer en el estudio (1975), Habitación de costura (1974) El teléfono (1974) o Interior. Paco escribiendo (1995).

Sus cuadros son la memoria del paso del tiempo en nuestro país. Nuestras casas, nuestras mesas, nuestros objetos. La calidez de los cuartos de la costura, la sensación acogedora de las salas de estar, el cambio de la luz en los jardines.

Cuadros íntimos, a media luz y sumamente detallistas mostrando los típicos vasos de duralex, el bote de ajax, el aceite La Española. Los objetos con aquellas marcas que no olvidamos y que teníamos en todas las casas, todas las cocinas, y todas las familias. Su principal querencia era para los objetos más inmediatos, más cercanos, los que formaban parte de su vida y de la vida de sus seres queridos. Por eso en muchos cuadros siempre encontramos algún objeto mucho más personal como un pastillero o unos guantes. 

Desde los años 60 en Alemania logró su consideración como pintora, mientras que aquí pasó casi inadvertida. De hecho ella se quejaba de que para las mujeres del grupo, había sido mucho más difícil que para sus maridos. 

Ha tenido que ser rescatada en el siglo XXI para que podamos disfrutar de su obra. Es la primera vez que el museo Thyssen le dedica una exposición individual, para lo cual han ido investigando y localizando el centenar de obras que exponen ahora por colecciones privadas y otros museos.

Muy recomendable.









"No todo el mundo" de Marta Jiménez Serrano. Reseña Literaria

 



"Acaso el amor sea la capacidad de que la conversación siga siendo siempre interesante."

Y le ha tocado el turno a un libro de relatos, que por cierto he disfrutado mucho. Es el segundo libro de la autora Marta Jiménez Serrano, a quién yo no había leído, entono un mea culpa y pido perdón, y ahora creo que habrá que seguir haciéndolo, sí o sí.

"No todo el mundo" es un conjunto de catorce relatos de distinta longitud cuya temática gira en torno a las relaciones de pareja. 

"Cabe señalar que para encontrarse no solo hay que verse: hay que verse a la vez."

Son relatos cuyos personajes son muy diferentes, y tenemos de distintas edades, y clases sociales, los tenemos solteros, viudos o separados, los tenemos siendo compañeros de trabajo, de garitos, de las clases... Tenemos cuentos que hablan de los principios de las relaciones, otros de los finales, de las relaciones que te importan más, de las que menos, del deseo, de la complicidad, de la ternura, de dejarse llevar o no. De amor y de desamor.

"Le devolvió en un gesto furioso sus textos repletos de tachones diciéndoles que no explotaba su potencial, porque la voz del narrador esto, y la concepción temporal lo otro, y te falta conflicto. "Conflicto no me falta, te lo juro", pensó ella, según me dijo cuatro meses después, un día que comentábamos la efusividad de nuestro profesor. Blasco era implacable, echaba a los alumnos del taller si les encontraba una coma entre el sujeto y el predicado, motivo por el cual empezamos siendo catorce y en la tercera clase quedábamos ya solamente ocho. "Conflicto no me falta" pensó, pero solo sonrió irónicamente que es lo que hace con su tristeza. O lo que hacía entonces. "

Todos están ambientados en la actualidad y en distintos barrios de Madrid. Además se nota que a la autora le gusta nuestra ciudad y sus personajes han salido de distintas localizaciones fácilmente distinguibles. 

Por supuesto entre la variedad hay algunos con los que uno, como lector, va a conectar más y con otros menos. Algunos me han gustado mucho como el de "Filmin", el de "Un novio que tuve" o el de "Horny Asian teen". A alguno le habría quitado algunas páginas y a otros en cambio se las hubiera regalado muy gustosa. 

Lo que es cierto es que todos me han parecido muy bien escritos, muy creíbles, actuales, cotidianos, muy de verdad. 

El tono de los relatos es desenfadado pero muy correcto, tiene un punto de ironía y mucho de destreza con las palabras y las expresiones. Esconde un tono cómplice, no en vano son de relaciones humanas, en ocasiones casi juguetón, lo que se refleja en los juegos de palabras con los nombres propios: Elo y Elo, o con los distintos significados. 

Por otra parte, estructuralmente, son relatos muy bien construidos, con principios potentes y finales redondos. Os copio, a modo de ejemplo, el principio de un relato. Quizá sea de los más explícitos, pero también es una pequeña muestra de lo visuales que son:

"Macarena llevaba siempre una medalla redonda, una cadena fina y larga colgada del cuello que a David le resultaba fría al contacto con los huevos cuando ella le hacía una felación. Macarena se inclinaba y la medallita colgaba hasta impactar suavemente contra los testículos, donde se quedaba hasta que Macarena terminaba o, visto de otro modo, hasta que terminaba David." 

Están escritos con muchísimo ritmo, tienen distinto tono, distinto narrador, lenguaje, todo lógicamente al servicio de la historia que se cuenta.

"El miedo al amor es como el miedo a los gatos. A la sibilina imprecisión del silencio, a la felina predisposición al capricho..."

En fin. 

Que me ha parecido un libro de relatos muy bien escrito cuyas historias tienen un tono fresco, urbano, actual. Un libro de relatos muy recomendable.

viernes, 15 de marzo de 2024

Rosa Montero en el ciclo "Creadoras de historias" de la Mutua Madrileña. Un lujo

 


Llegó con su perrita Petra a un auditorio lleno de incondicionales de sus letras. 

El periodista José Manuel Calvo, que iba a conducir el diálogo, le dijo que Petra le iba a quitar el protagonismo. Pero Rosa Montero contestó que no, que era muy buena, que siempre la estaba dejando sola, y que iba a llegar un día que se iba a enfadar con ella. Así que se la había traído.

Y era verdad. Petra fue muy buena, no se movió de su regazo en toda la conferencia, no hizo ni un ruidito, y eso que Rosa Montero no dejó de hablar y contar, contar y hablar, haciéndonos sonreír, interesándonos, embelesándonos. 

Y nos contó sobre su vida y el periodismo y sus libros. Nos contó sobre la creación literaria en sus novelas. 

Un gustazo de conferencia.

"Quiero hacer cosas que calienten el corazón."


Fundación Mutua Madrileña. Ciclo de conversaciones "Creadoras de historias". Martes 12 de marzo.












jueves, 14 de marzo de 2024

"La mujer de la libreta roja" de Antoine Laurain. Reseña literaria

 


He terminado de leer "La mujer de la libreta roja" volando. 

Se trata de una de esas historias de "aquí va a pasar algo bonito" que tiene su parte original y lo mejor es que, en mi opinión, no llega a ser empalagosa con los sentimientos. 

Es una novela corta y amable, que cuenta la historia de un parisino Lauren Letellier. Un librero que una mañana cualquiera se encuentra un bolso malva de mujer abandonado en un cubo de basura. Dentro del bolso no encuentra nombre ni dirección de la dueña pero a base de mirar los objetos que contiene, y sobre todo tras leer lo escrito en una libreta roja donde la mujer iba anotando listas de sus pensamientos, da comienzo su búsqueda, decidido a devolvérselo. Al mismo tiempo la dueña del bolso, a quién el ladrón, al arrebatarle el bolso le ha dado tal golpe que le ha dejado en coma, está en un hospital ingresada ajena a todo. 

Estamos ante una historia ambientada en París, en la actualidad, y según lo vas leyendo respiras su ambiente elegante de cafés con su terracita, el atractivo innegable de sus preciosas librerías y edificios señoriales. La ambientación justa para sentir que haces una escapadita a la capital del país vecino. Está bastante lograda.

Yo lo he leído con mucha tranquilidad. Tiene un ritmo pausado pero fluido, los cortos avances en la trama logran que se mantenga la curiosidad por saber, según iba acercándose el librero a su misteriosa dueña del bolso, cómo al fin lograría llegar a ella. Ya casi al final tiene un punto de giro y es curioso ver cómo lo resuelven.

Una novela escrita con una prosa sencilla, con un narrador en tercera persona, donde además el autor ha ido intercalando los diálogos entre la prosa, creando una suerte de estilo indirecto al irlo contando.

No es una novela trascendental ni trepidante, es ligera, simplemente una lectura agradable, con encanto, que te deja un poso de bienestar al terminarla, lo que de vez en cuando viene muy bien para descansar entre lecturas más densas o sesudas. A mí me ha entretenido la historia de estos personajes típicamente parisinos, no son unos jóvenes atolondrados, son una pareja de unos cuarenta años y profesiones interesantes, bien perfilados en su madurez y experiencias, que viviendo esa historia curiosa consiguen transmitirte, que si fuera el día está tormentoso y feo, haces muy bien en arrebujarte entre las páginas de un libro para pasar un rato más grato. 

 

domingo, 10 de marzo de 2024

"El padre" en el Teatro Bellas Artes de Madrid

 


Tú sabías de que trataba la obra de teatro "El padre" que está representando José María Pou en el Teatro Bellas Artes de Madrid. 

Sabías que el argumento ahondaba en el avance demoledor de la demencia en la mente de un padre y el impacto de tal imparable progresión de esa enfermedad en la familia. 

Sabías que no iba a ser una obra agradable, imagínate, con semejante argumento... Pero querías ver a Pou en escena porque lo hace tan creíble... 

Y así fue: Pou borda un padre aquejado de demencia de forma natural, magistral.

Lo que no sabías es que la adaptación de la tragicomedia de Florian Zeller te iba a encantar, porque ese texto plagado de repeticiones en las escenas y los personajes, consigue casi meterte en la cabeza del protagonista, en ese bucle de tiempo y personas, esa repetición constante de frases y pérdidas, ese lío enorme, esa locura que va tomando peso y le está atrapando.

No sabías que te iba a parecer tan buena la interpretación de la hija, Cecilia Solaparen, que te ibas a creer tanto su impotencia, su tristeza, su cansancio.

Por no hablar de la escenografía, esos cambios sutiles de escenas con tan poco mobiliario, unas luces y unos personajes casi bailando una sutil coreografía para cambiar los muebles y los momentos. 

No sabías que, aunque el teatro Bellas Artes no es uno de tus preferidos, en la primera fila (hay una 0) del anfiteatro se ve tan bien. 

Conclusión: No sabías que te iba a encantar "El padre". No es amable, ni agradable. Solo es la vida misma. 




Reparto

José María Pou
Cecilia Solaparen
Elvira Cuadrupani
Jorge Kent
Alberto Iglesias
Lara Grube

Ficha artística

Título original: Le Père
Autoría: Florian Zeller
Traducción: Joan Sellent
Dirección: Josep Maria Mestres