Un blog de literatura y de Madrid, de exposiciones y lugares especiales, de librerias, libros y let

Mostrando las entradas para la consulta Librerías ordenadas por fecha. Ordenar por relevancia Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas para la consulta Librerías ordenadas por fecha. Ordenar por relevancia Mostrar todas las entradas

jueves, 14 de marzo de 2024

"La mujer de la libreta roja" de Antoine Laurain. Reseña literaria

 


He terminado de leer "La mujer de la libreta roja" volando. 

Se trata de una de esas historias de "aquí va a pasar algo bonito" que tiene su parte original y lo mejor es que, en mi opinión, no llega a ser empalagosa con los sentimientos. 

Es una novela corta y amable, que cuenta la historia de un parisino Lauren Letellier. Un librero que una mañana cualquiera se encuentra un bolso malva de mujer abandonado en un cubo de basura. Dentro del bolso no encuentra nombre ni dirección de la dueña pero a base de mirar los objetos que contiene, y sobre todo tras leer lo escrito en una libreta roja donde la mujer iba anotando listas de sus pensamientos, da comienzo su búsqueda, decidido a devolvérselo. Al mismo tiempo la dueña del bolso, a quién el ladrón, al arrebatarle el bolso le ha dado tal golpe que le ha dejado en coma, está en un hospital ingresada ajena a todo. 

Estamos ante una historia ambientada en París, en la actualidad, y según lo vas leyendo respiras su ambiente elegante de cafés con su terracita, el atractivo innegable de sus preciosas librerías y edificios señoriales. La ambientación justa para sentir que haces una escapadita a la capital del país vecino. Está bastante lograda.

Yo lo he leído con mucha tranquilidad. Tiene un ritmo pausado pero fluido, los cortos avances en la trama logran que se mantenga la curiosidad por saber, según iba acercándose el librero a su misteriosa dueña del bolso, cómo al fin lograría llegar a ella. Ya casi al final tiene un punto de giro y es curioso ver cómo lo resuelven.

Una novela escrita con una prosa sencilla, con un narrador en tercera persona, donde además el autor ha ido intercalando los diálogos entre la prosa, creando una suerte de estilo indirecto al irlo contando.

No es una novela trascendental ni trepidante, es ligera, simplemente una lectura agradable, con encanto, que te deja un poso de bienestar al terminarla, lo que de vez en cuando viene muy bien para descansar entre lecturas más densas o sesudas. A mí me ha entretenido la historia de estos personajes típicamente parisinos, no son unos jóvenes atolondrados, son una pareja de unos cuarenta años y profesiones interesantes, bien perfilados en su madurez y experiencias, que viviendo esa historia curiosa consiguen transmitirte, que si fuera el día está tormentoso y feo, haces muy bien en arrebujarte entre las páginas de un libro para pasar un rato más grato. 

 

viernes, 23 de febrero de 2024

"La historia de los vertebrados" de Mar García Puig

 



Acabo de terminar "La historia de los vertebrados" de Mar García Puig y me ha gustado bastante. 

"El 20 de diciembre de 2015 me convertí en madre y enloquecí".

Cuenta este libro justo lo que dice la frase anterior: la autora nos cuenta como enloqueció a raíz de haber sido madre de unos mellizos prematuros: Sara y David. Fue ser madre y comenzó la obsesión con la muerte, con el peligro constante de que pudiera ocurrirles algo, con cada manchita de la piel, con cada tos, con todo. Porque de pronto todo es susceptible de fragilidad, de vulnerabilidad, de lo peor. ¿Depresión post-parto, brote psicótico, locura?

La autora en ese momento vital también coincide con ser diputada por Barcelona en el Congreso por "En Comú Podem". Y ya la vida trata de ir conjugando la maternidad con la política, y además con la locura. 

"Cuando entré en el Congreso, tomé una decisión. en todas mis intervenciones hablaría de dos cosas, mujeres y libros. Porque género y literatura son tan transversales a todo lo que hago, y a lo que respiro, que no puedo sustraerme a ese imperativo. Un día debatimos una proposición no de ley acerca de salud mental, y me toca a mí fijar la posición de mi grupo en el pleno. Y ese día más que nunca sigo ese precepto, y saco porcentajes de mujeres castigadas con la locura, y versos de las que tuvieron la oportunidad de dejar constancia. Cuando acabo mi discurso, un diputado de implecable traje y corbata me afea mi voluntad de meter el feminismo en todo. "Esa manía tuya" me dice..."

La autora al ir contándonos su propia experiencia hace múltiples referencias a otras escritoras que han tratado literariamente el mismo tema de su locura u obsesiones como Sylvia Plath o Silvia Mistral o Anne Sexton y otras poetas y autoras. Puesto que entiende que abandonarse al lirismo y hablar desde él, quizá sea la única forma posible para comunicarse desde la vulnerabilidad que impera en ocasiones como ésta. 

"El psiquiata W.W. Godding, preocupado por el estigma de la locura, aconsejaba a las familias que no hospitalizaran a las mujeres que sufrieran de locura puerperal: "Aunque la recuperación sea rápida habrá estado loca, y esto nunca lo olvidarán sus amigos o sus hijos -escribió-; de ahora en adelante hay un cierto temor a lo que pueda ser en el futuro, un esqueleto en el armario, no mencionado pero siempre ahí.". Sé que ese libro que empiezo a imaginar será mi esqueleto en el armario, y probablemente el de mis hijos. Pero también pienso que de algún modo he contraído una deuda. Porque si tengo algo de fuerza para encarar este verano, ha sido gracias a la palabra impresa. Siento que tengo yo también el deber de alzar mi voz, aunque sea torpe."

La autora, no solo hace una autobiografía de su periplo vital durante ese tiempo, sino que elabora un exhaustivo ensayo de la historia de la salud mental de la mujer. No solo busca el desahogo de la palabra escrita, su consuelo, sino también el reflejar lo que ha supuesto el parto para muchas mujeres a lo largo de la historia de la maternidad. 

Es un ensayo donde hay mucha investigación detrás, mucha documentación. Hay medicina, arte, literatura, mitología, historia... Pero también hay esa parte de biografía que te lo hace menos teórico, más humano.

"Para mí Tomas era y es el hombre brillante, el de la percepción aguda, el ingenio siempre a punto, un poco intelectual en el que me habría instalado de por vida. 

Finalmente, ese día en que marcha a casa de su madre llegará, y un par de meses después, cuando ya haya encontrado piso, me avisará de que vendrá a llevarse una de las librerías y algunas cosas más. Yo me iré a un bar al lado de casa para no presenciar el derrumbe del hogar, de la familia nuclear, de lo que había querido ser y no pude conseguir. Pediré un café y mientras lo tome sentiré uno de los dolores más profundos que haya experimentado jamás..."

A mí me ha parecido una lectura muy interesante, muy rica tanto la prosa como el contenido. He subrayado muchísimos párrafos, los he releído después más despacio. Pero lo que me entristece es que no he sido capaz de retener toda la información, ni tan siquiera la cuarta parte. Una pena. Pero reconozco que he disfrutado mucho mientras lo leía, porque me estaba interesando bastante todo lo que me contaba a propósito de la salud mental. 

También me ha gustado mucho la portada y el título, me parecen de lo más atractivos y adecuados para el tema del libro. Son muy sugerentes ¿verdad?

 

sábado, 11 de noviembre de 2023

11 de noviembre. Día de las Librerías. Librerías del mundo

 

Cordes Sur Ciel


La cueva de Alí Babá 
donde brillan cuántos tesoros querría poseer.
El refugio y la calma cuando la vida pinta mal.
El maravilloso laberinto
donde no existe el momento ni la salida.

El grato lugar donde esperan mis otras vidas,
donde conoceré personajes 
con quienes habría deseado coincidir
en la vida real.

El mágico espacio
donde no existen los relojes,
ni las borrascas, ni el viento.
El negocio que yo montaría,
al que te invitaría a asociarte,
y en el que, además, te rogaría vivir.

Mi adicción confesable
mi querencia
donde pierdo la voluntad
y me traigo a casa
la eterna
salvación.


Hoy 11 de noviembre: Día de las librerías. 

Y para celebrarlo y que sirva de homenaje a mis refugios preferidos, aquí os traigo una selección de algunas con las que he tropezado en este verano. 

La azul cielo y preciosa de libros usados de Cordes sur Ciel, la abovedada de Burdeos a la que nunca entré, la azulona que estaba cerca del Instituto Cervantes. Qué elegantes son las librerías de Francia. La casita de Corfú donde compartimos con los amigos aquel café mientras el gato repanchigado dormitaba, la de los murales tan chulos y caros del Lago de Garda, el refugio lleno de fotos de Cortina de`Ampezzo, y en la que se alojó Napoleón de Bassano del Grapa...

Mágicos espacios donde no existen los relojes, ni las borrascas, ni el viento.


Burdeos


Burdeos





Corfú


Corfú


Cortina D`Ampezzo


Cortina D`Ampezzo







domingo, 6 de agosto de 2023

"Cordes sur ciel" en Francia

 



Hoy me acordé de Cordes sur ciel. Ojalá hubiera sido otoño este julio pasado mientras la paseábamos. Me acordé del pueblo que cambió su propio nombre.

Mis piernas todavía recuerdan cada adoquín de aquella empinada cuesta que subimos hasta alcanzar el centro de aquel pueblo medieval tan alto y tan laberíntico, tan de piedra, tan eterno. 

Se construyó para dar casa a los que se quedaron sin ella gracias a las guerras religiosas. Era el tiempo de los Cátaros. Hasta cuatro murallas tuvo alrededor para defenderse. Pero nunca la conquistaron. Así que terminada la cruzada solo le quedó mejorar y embellecerse con sus casonas góticas, su plaza del mercado porticada, sus florecientes negocios.

Era especial "Cordes sobre el cielo". Aunque al principio era "Cordes" a secas, vocablo que vendría de "Cordoa", una palabra occitana que se inspiraba en nuestra Córdoba. Querían una ciudad tan próspera, tan comerciante, como lo era la nuestra. Pero el pueblo en otoño se eleva sobre la niebla que cubre el valle, pareciendo enteramente que flota sobre las nubes. Ojalá hubiera sido otoño este julio pasado, con Cordes flotando... Y unos y otros empezaron a apellidarla así: "Cordes sur ciel". Hasta que en 1993 se hizo oficial el nombre completo.

Era especial aquel pueblo donde no existía la prisa. En "Cordes sur ciel" respirabas tranquilidad entre sus indolentes calles de piedra. Cerca de su mercado había una exposición de fotos de niños africanos, y en la empinada calle por la que ascendimos latía silenciosa una librería turquesa en la que tuve que demorarme para que formara parte de nuestra colección "La vuelta al mundo en 80 librerías".

Pero me faltó tiempo. Me faltó descubrirla mejor, patear sus callejones y rincones, admirar despacio las fachadas de sus casonas y sus miradores. Me faltó tiempo. Cordes sur ciel se merecía mucho más del que yo pude dedicarle, mucho más. 

Y echándolo ya de menos fui despidiéndome de aquel pueblo que cambió su nombre.












viernes, 11 de noviembre de 2022

Día de las Librerías 2022

 


Hoy, 11 de noviembre de 2022, es el Día de las Librerías. 

 Y como no tengo remedio cuando he salido de trabajar me he ido a celebrarlo a una de ellas y ya he salido de allí con mi botín de dos flamantes libros bajo el brazo. Estoy segura de que caminaba por la calle con una sonrisa que me daba tres vueltas a la cabeza.

Es uno de esos enormes y pequeños placeres de la vida: ir a una libreria y ver qué me puedo llevar. Se me pasa el tiempo y ni me entero allí dentro, saltando de sección en sección, leyendo en voz baja los títulos en los lomos, pensando "que me llevo, que me llevo", frotándome las manos con pura avaricia de cuento, porque me llevaría media tienda ¡qué digo media! la tienda entera acarrearía si pudiera.

A poco que lo pienso algunas de ellas están ligadas ya de por vida a acontecimientos importantes de mi paso por el mundo: Aquella Paradox que fue una de nuestras primeras salidas juntos, cuando empezábamos a caer por ese precipio peligroso por el que felizmente nos despeñamos, justo antes de decirle al mundo "Cerrado por amor".

Y aquella de Zaragoza donde me dieron aquel premio de relato. Cuando solo me presenté por si sonaba la flauta y nos íbamos a visitar a mis amigas las mañas y ¡va me lo dan! ¡Qué bueno!

O aquellas preciosas de más allá de las fronteras, y que no he podido dejar de conocer cuando viajé a esas ciudades: La mágica livraria Ler Devagar en Lisboa, la fantástica librería Lello de Oporto o la más antigua del mundo también en Lisboa.

Hay tantas que tengo entrelazadas a inolvidables viajes que hasta he perdido la cuenta. Pero me acuerdo de aquella mítica de San Francisco, la City Light Books, que visité con mis amigos. O aquellas que ya no existen seguro como la acogedora A Lura dos Livros de Tavira o esa pequeñita y maltrecha de Damasco. Sin embargo sobreviven en mi memoria a salvo del olvido, la especulación o las guerras. 

Son mi debilidad, no puedo dejar de pasar por ellas sin llevármelas, aunque solo sea en fotografía, sobre todo si tienen un nombre inolvidable, como me ocurrió con "La palabra escrita" de Eslovenia o "Le silence de la mer" en Vennes de Francia. Tengo que leerme ese libro. Por no hablar de las que, nada más descubiertas, te devuelven libros como "La Rayuela" de Berlín, donde además pasamos una estupenda y soleada mañana.

Cuántas habré visitado ya, cuántas fotografiado, incontables desde luego. 

¿Pero cómo no hacerlo si en ellas palpitan mil y unas historias? Te abren mil y una puertas por las que asomarte a vivir otras vidas. 

Son el modo más sencillo de escaparte, de viajar, de soñar. El mejor refugio. 

Son, qué le vamos a hacer, mi paraiso y mi perdición. 

11 de noviembre de 2022, Día de las Librerías.



Librería desaparecida Paradox en Alonso Martinez, Madrid

 

Este cartel estaba en la librería "Las tres rosas amarillas" de Madrid


Librería París. Entrega de premios de relatos. Año 2018
 



Librería Ler Devagar en Lisboa

Librería Lello Irmao de Oporto
 
 
 
Librería Bertrand en Lisboa
 
 
 
Librería City Light Books en San Francisco

 
Antigua Librería A Lura des Livros en Tavira (Portugal)




Librería La palabra escrita en Eslovenia



 
 Librería Le Silence de le Mer en Vennes
 
 
 

Librería La Rayuela en Berlín




sábado, 7 de mayo de 2022

El Madrid que duerme bajo nuestros pies II. Museo de la estación de metro de Gran Vía de Madrid

 


Dice mi blog que os debo una entrada. Que no tarde en hacerla o ya no tendrá mucho sentido. 

Dice mi blog que no sea perezosa, que me ponga a ello ahora mismo. 

 Dice que la idea era hacer dos entradas bajo el epígrafe. "El Madrid que duerme bajo nuestros pies". Una de ellas dedicada al Museo del Metro que está en la estación de Ópera, y otra entrada dedicada al Museo de la estación de Gran Vía. Que eso fue lo que dije y que ahora no tengo que echarme atrás.

 Ayer hicimos la primera:

 https://rociodiazgomez.blogspot.com/2022/05/el-madrid-que-duerme-bajo-nuestros-pies.html

Y hoy toca la segunda.

 Dice, dice, dice... los blogs se pueden poner muy insistentes.

 

 

Así que habrá que obedecer al blog y que se calle. ¿No?

Pues retomando la entrada anterior, decíamos que con las obras del metro salen a la luz vestigios del Madrid pretérito. Hace nada han estado remodelando la estación de metro de Madrid de la Gran Vía. Pertenece a la línea 1, la primera que inauguró Alfonso XIII, así que la verdad es que ya debía necesitarla.

El caso es que lo primero que hicieron fue volver a situar en su sitio original la réplica del templete exterior. Que la verdad, ha quedado bien chulo.

Pero lo que yo os quería contar es que cuando estuvieron con las obras de remodelación del acceso y vestíbulo, que se demoraron bastante, han dado con recuerdos del Madrid del pasado, un Madrid de calles estrechas donde había casas de hospedaje y tabernas, había librerías de viejo y casas de alterne. Un Madrid anterior a la Gran Vía y a la llegada del Metro. 

Todos los vestigios de aquel Madrid más los restos de la antigua estación de metro de Gran Via son los que se pueden visitar en este pequeño Museo gratuito, como todos los del Metro, que encontramos dentro de esta estación. 

Podemos ver un montón de botellas de la Casa de Astrearena que era una taberna que se construyó en el siglo XVIII, así como muchas monedas del año mil ochocientos y pico.

 


 


 Por otra parte se han encontrado muchos utensilios de una antigua botica de la calle Montera núm. 19 que data del 1731. En la parte de detras se reunía una tertulia que fue el embrión de la Real Casa de Medicina.



 

Y corriendo el tiempo, en el año 1917 se comienzan los trabajos de construcción de la línea 1 del metro de Madrid, que iba desde Cuatro Caminos hasta Sol, con un total de 8 estaciones que se podían recorrer en 10 minutos. 

Antonio Palacios fue el encargado del diseño y el proyecto. De Antonio Palacios, ya hemos hablado en el blog, de él tenemos por Madrid muchos edificios preciosos: El de Correos, el de Jornaleros de Maudes...

 

En este caso concreto, como el metro estaba tan profundo se instaló un ascensor al que se podía subir por 5 céntimos. En la parte de fuera se instalaron unos templetes de granito, hierro y cristal, semejantes a la réplica que ahora se puede admirar. Dentro, en el acceso, los vestíbulos y pasillos, como todo era más bien oscuro, se colocaron azulejos de color blanco, con una cenefa de color cobalto.

Y ahora, junto a los restos de siglos anteriores, también podemos ver restos de aquel primer metro: Parte del ascensor, los peldaños con la publicidad de entonces, o un escudo con el oso y el madroño pero colocados al revés.





 


Todos estos Museos del Metro, el del que hablamos en la anterior entrada de Ópera, éste de Gran Vía, el andén 0 de Chamberí, los vestíbulos o la Nave de Motores de Pacífico, son muy interesantes y son gratuitos. 

Si pasáis por allí, y no vais corriendo como vamos normalmente todos, acercaos, merecen la pena.


#metro

#Madrid