Un blog de literatura y de Madrid, de exposiciones y lugares especiales, de librerias, libros y let

miércoles, 22 de diciembre de 2010

Homenaje a Luis Rosales en el Teatro Español





Cómo el náufrago metódico que contase las olas que le bastan para morir;
Y las contase, y las volviese a contar, para evitar errores, hasta la última.
Hasta aquella que tiene la estatura de un niño y cubre la frente,
así he vivido yo con una vaga prudencia de caballo de cartón en el baño,
sabiendo que jamás me he equivocado en nada,
sino en las cosas que yo más quería.


Así comenzó el homenaje que tuvo lugar el lunes en el Teatro Español a Luis Rosales. Con su voz recitando este poema suyo, que a mí me gusta tanto. Y qué bien que estuvo este homenaje, qué emotivo.

Después del primer poema se iban alternando las canciones tocadas al piano por Rosa Torres-Pardo con las voces de un montón de actores recitando diversos poemas de este autor. La música de Isaac Albeniz, Chopin, Debussy, Manuel de Falla... se iba alternando con las voces de María Adanez, Raúl Arévalo, Manuel de Blas, Toni Cantó, Pedro Casablanc, Carme Conesa, José Coronado, Manuel Galiana, Mario Gas, Ariadna Gil, Ana Labordeta, Charo López, Carmen Machi, Itzíar Miranda, Ricardo Moya, Blanca Portillo, Gloria Muñoz, Santiago Ramos, Paco Valladares y Ana Villa.

Dos horas de duración entre canciones, poemas y la voz del poeta unas veces hablando y otras recitando. Genial. Estuvo genial. Te ponía la piel de gallina en algunas ocasiones. Qué bien recitaban todos y qué bien interpretada la música, qué bien se iban acoplando ambas.

Y lo mejor es que era entrada gratuita hasta completar aforo. Eso sí el teatro Español lleno hasta arriba, claro. Y entre el público más actores. Ramón Barea, Flotats, María Asquerino... Muchos.

 Fenomenal. Estuvo fenomenal.

Al final Mario Gas que ha dirigido el homenaje leyó en voz alta una carta de Luis García Montero sobre el poeta jugando con muchos versos de sus poemas preciosa. Y después subió al escenario el hijo de Rosales.

Cuando en el último momento todos los actores vestidos de oscuro vueltos hacia la pantalla donde estaba la imagen de Luis Rosales no dejaban de aplaudir, se te ponía hasta la piel de gallina...

Un lujo.



 Os dejo con un par de párrafos del artículo que El País dedica al evento:

Escritor, crítico literario y miembro de la Real Academia Española de la Lengua, Luis Rosales (1910-1992), al que tantas veces han homenajeado este año, tuvo ayer voz a través de esa veintena de actores y de grabaciones en las que impresionaba ver reflexionando al escritor sobre sus amigos, sobre la vida y sobre la muerte, en especial la de Federico García Lorca, que tanto le afectó, sobre el amor y el desamor...

Poemas extraídos de Canciones (como la que lleva por título Canción para los pusilánimes que no se atreven a creer en la libertad), Diario de una resurrección, La carta entera o La casa encendida, además de textos de su autobiografía y esa definición sencilla, casi humilde, que sirvió de cierre del recital: "Me llamo Luis Rosales, soy poeta y he nacido en Granada".

martes, 21 de diciembre de 2010

Beaumarchais en el Teatro Español



El sábado pasado fui a ver Beaumarchais al Teatro Español. Pero tengo que decir que en general no me encantó.

Pero vamos por partes.

Beaumarchais es una obra de teatro ambiciosa, pues nunca se había estrenado. Flotats se ha arriesgado a hacerlo y lo ha hecho con un montaje con audiovisual incluido para cambiar de decorado y época, y con un escenario desnudo sin apenas muebles, un par de sillas, una mesita, un sillón... Claro eso facilita muchísimo los cambios de escena, son muy ágiles, porque apenas hay nada que mover. Y desde luego Flotats en esta obra se ha acompañado de un montón de actores y entre ellos destaca un elenco de actores importantes (en total son treinta o treinta pocos actores) aunque tengan un papel corto como María Adanez, Carmen Conesa, Constantino Romero, Ramón Barea, Raúl Arévalo, Pedro Casablanc… que lo hacen muy bien.

Me gustó la actuación de Flotats, desde Arte no había vuelto a verle y merece la pena. En este caso además representa muy bien el carácter frívolo, burlón, astuto que debía tener en realidad Beaumarchais por lo que se cuenta de él.

También me gustaron mucho las actuaciones de Constantino Romero en su papel de Franklin, uno de las escenas más amenas es cuando tiene una conversación con Beaumarchais en dos idiomas diferentes con su nieto como traductor. También por supuesto destacaría las escenas de Raúl Arévalo, pues tiene dos papeles, aunque de ambas destacaría cuando representa al Caballero d`Eon, qué diálogo más ingenioso entre él y Beaumarchais jugando a la ambigüedad.

El vestuario también está muy bien, muy logrado.

Pero… se me hizo muy larga. Porque bien es verdad que es larga, dura dos horas, pero a mí además se me hizo larga. No me enganchaba del todo la obra. Además el final me chirría bastante. Yo creía que cómo había comenzado con Flotats interpretando a Sacha Guitry, el creador de esta obra y que nunca estrenó, en el año 1950, pues yo creía que al final de la obra volvería al año 1950 para cerrar. Sin embargo termina con una escena un tanto espiritual u onírica… algo espesa para mi gusto.

En fin… que supongo que habrá opiniones para todos los gustos. Yo destacaría la actuación de Flotats y de cómo ya he dicho algunos de los actores secundarios como Constantino Romero o Raúl Arévalo pero no acabó de atraparme. Y desde luego que me alegro de haber ido y de haber conocido la figura de Beaumarchais, que la verdad es que yo, ignorante, desconocía.

Y desde luego siempre merece la pena volver a ver el Teatro Español, que me gusta mucho y al que recuerdo con mucho cariño de las primeras obras de teatro que disfruté en él (Maribel y la extraña familia., Elisa está debajo de un almendro, Fuenteovejuna...) en mi época de estudiante de instituto.



Os copio aquí las biografías de Beaumarchais, y Sacha Guiltry:

Pierre Agustin Caron de Beaumarchais (1732-1799): relojero, inventor, músico, profesor de arpa, viajero, especulador financiero, agente secreto de la corona francesa, tranficante de armas… también  dramaturgo, padre de la primera sociedad de autores y compositores dramáticos (en 1777) y autor de El barbero de Sevilla y Las bodas de Fígaro, ambas llevadas a la ópera luego por Rossini y Mozart respectivamente.

Alexandre Guitry (1885-1957) era hijo de un actor, Lucien Guitry, admirado por el zar Alejandro III de Rusia, que apadrinó al niño y le dio su nombre y su diminutivo, Sacha. Empezó muy joven a montar sus propias obras e inundó París con ellas, literalmente, hasta el punto de que, en 1932, un grupo de dramaturgos y directores de escena trataron de limitar el número de obras de Guitry que se presentaban al año. En total, es autor de 140 obras y 30 películas. En 1950 escribe Beaumarchais y, además de contar alguno de los episodios más importantes de la vida del personaje, con la aparición en escena de Napoleón, Luis XV o Benjamin Franklin, quiere rendir cuentas ante todos aquellos que pusieron en tela de juicio su honor acusándole de colaborar con los nazis durante la ocupación de París. Fue incluso encarcelado 60 días, pero al final se demostró que todo era falso. También Beaumarchais pisó la cárcel y salió absuelto y restituido.


lunes, 20 de diciembre de 2010

Santos Yubero, exposición de fotografía


Está hasta el 16 de enero, os da tiempo, y yo creo que os gustará.

Os estoy hablando de la exposición de fotografías de Santos Yubero que hay en la sala de exposiciones de Alcalá 31. Eso es, en la misma calle de Alcalá, en la acera de la derecha, según subes hasta la puerta del Sol desde Cibeles.

Yo estuve ayer, y me gustó mucho. Haces un repaso, a traves de sus imágenes, a la historia de Madrid y a  la de España desde el año 1925 hasta 1975, porque la última foto es del día que murió Franco. Son 160 fotografías a cual más interesante y más curiosa. Y después hay un audiovisual en las que están todas y alguna que otra más. 

Santos Yubero fue un tipo más bien bajito que de alguna forma estuvo en casi todos los acontecimientos importantes de Madrid en años muy convulsos. Es una exposición de contrastes, hay tanto imágenes de las celebraciones de la República, como institucionales del régimen franquista, como dentro de las prisiones o de presos políticos. Estaba en todas partes dejando constancia de un lado y del otro. Fotos de mítines, de actos culturales en los que salen las primeras figuras literarias del momento, fotos de trabajadores del campo, de "productores" que se iban a trabajar a Alemania, de pobres, de dirigentes políticos, de anarquistas, de velatorios, de fiestas, de vedettes... de todo. ¿Cómo no iba a poner a su perro de nombre "foto"? Era inevitable.
Funeral por Jacinto Benavente. Camilo José Cela. Capilla ardiente de Concha Espina y Pio Baroja en una librería de viejo


Jardiel Poncela en una conferencia que dió para mujeres

Valle Inclán en el Ateneo

Los anarquistas condenados por atentar con el Fiscal General de la República, Eduardo Ortega y Gasset




Dónde: Sala Alcalá 31 (calle Alcalá, 31).
Cuándo: hasta el 16 de enero de 2011.
Horario: de martes a sábados de 11:00 h. a 20:30 h; domingos, festivos, 24 y 31 de diciembre: de 11:00 h. a 14:00 h; cerrado los lunes, 25 de diciembre, 1 y 6 de enero.
Precio: entrada gratuita.


Y ya si de paso reservais para comer en el restaurante "La vaca Verónica" yo creo que redondais el día. Es un restaurante de paredes amarillas, lleno de cuadros y adornos, muy acogedor. Con una dueña bajita de pelo blanco, pizpireta, que va recorriendo las mesas tomando nota y avisándote (lo que es un detalle) si te pasas pidiendo, y unos camareros muy amables. Ensalada, pastas, y carne. Y normal de precio. En la calle Moratín, 38.



Fotos diferentes de Madrid en los años 30


Bueno y ya  para terminar, si os apetece seguir leyendo sobre esta exposición os dejo con un artículo de Ruth Toledado de hace un par de meses que tenía guardado desde que lo leí porque me gustó mucho. Está bien, ya vereis...

RUTH TOLEDANO

Rompeolas de las Españas

RUTH TOLEDANO 29/10/2010
Así se refirió a Madrid el poeta Antonio Machado: "Madrid, Madrid, ¡qué bien tu nombre suena / rompeolas de todas las Españas! / La tierra se desgarra, el cielo truena, / tú sonríes con plomo en las entrañas". Lo cita el fotohistoriador Publio López Mondéjar en su prolija y apasionante introducción al catálogo de la exposición del fotógrafo Santos Yubero, que él ha comisariado y que se puede disfrutar en la sala de exposiciones Alcalá 31 de la Comunidad de Madrid. Machado escribió estos versos el 7 de noviembre de 1936, cuando sus amigos León Felipe y Rafael Alberti trataban de convencerlo para que abandonara la ciudad, dado el peligro que corrían su vida y su familia. Por esta última accederá finalmente a salir de Madrid, aunque tal movimiento fuera ya inútil para su propia vida, que durante dos tristes años más iría consumiéndose, hasta la extinción, por un periplo de exilios que concluyó en Colliure. Estos versos sobre Madrid encabezaron el artículo titulado Madrid, baluarte de nuestra guerra de independencia, que se publicó un año después en la revista Hora de España, donde el poeta celebraba la ciudad y su carácter al tiempo que se dolía por su destino.

Esa ciudad, Madrid, es la que Santos Yubero retrató, recorriendo con sus entonces precarias cámaras el largo periodo de su historia que va de 1925 a 1975, es decir, que comprende gran parte del convulso y crucial siglo XX español: desde la dictadura de Primo de Rivera hasta la muerte del dictador Franco, pasando por la dictablanda, la Segunda República, la Guerra Civil, el franquismo puro y duro de la posguerra, la tecnocracia, el desarrollismo y el tardofranquismo. Una ingente tarea que le permitieron sus, a la par, innegables e impresionantes talento y colaboracionismo: en sentido estricto, Santos Yubero colaboró con periódicos y revistas de muy distinto signo político; del mismo modo, ocupó la primera fila del fotoperiodismo franquista, vistiendo, literalmente, el uniforme de corte falangista que el Régimen impuso a los fotógrafos cuando Antonio Machado ya solo era una leyenda. Es, sin embargo, gracias a esa "sorprendente militancia", como la define López Mondéjar, que podemos volver ahora la vista al pasado. "Mi abuela siempre me decía que debemos conocer la historia para no repetir los errores", evoca Lucía Laín, comisaria adjunta de la exposición. Acaba de asistir, regocijada, a la siguiente escena: en la sala de Alcalá 31, inusualmente llena para la mañana de un día no festivo, se oyen las risas de dos ancianos que no se conocen entre sí y que, ante la foto de un grupo de civiles durante la guerra, discuten si se trata de "los tuyos o los míos". Una escena ante la que siento el alivio propio de las heridas ya cerradas y una cierta melancolía, la del dolor que puede provocar en sus víctimas el capricho del tiempo. "Mi madre siempre me decía que es mejor ser víctima que verdugo", recuerda Publio después, ante una cerveza que dora aún más el sol del otoño madrileño, "pero que conviene ser víctima lo menos posible".

Con el entusiasmo y la generosidad que le caracterizan, lo primero que cuenta Publio es el interés por conocer "su nueva ciudad" que la exposición ha despertado en los bedeles extranjeros de la sala, la pasión que han mostrado por conocer cómo han ido cambiando el paisaje y el paisanaje madrileños (incluidos esos lugares que ya no existen, como el Café Negresco o el Frontón Recoletos). Son un ecuatoriano, una rumana, no recuerdo: lo que ahora llamamos inmigrantes y el franquismo llamaba productores, cuando eran de aquí quienes huían de la miseria. Santos Yubero los fotografió también, abrazados a sus familias en los andenes, porque siguiendo su trayectoria profesional (aparte de los momentos que iluminan toda vida social y cotidiana: las actrices, los niños, las hazañas deportivas) se puede seguir también la trayectoria de la miseria española: la miseria social (cuando el fotógrafo nace en 1903, el 60% de la población era analfabeta); la miseria económica (esa indigente con sus hijos en la misma calle de Alcalá en la que estamos); la miseria política (la guerra y la dictadura como su máxima expresión); la miseria física (él mismo padeció tuberculosis); la miseria moral (su afición por la tauromaquia, que comenzó, como en muchos, con una fascinación por las falsas luces del toreo que esconde un afán de huida de la precariedad; en su caso, la de su vida en el barrio de Lavapiés, sin padre, al cuidado de una madre que trabajó duro en el restaurante Casa Lastra de la calle del Olivar). Un entusiasmo, el de Publio, que se torna en desgarro histórico ante el retrato de Gómez de la Serna (cuya mirada destila toda su íntima derrota: la derrota común) que Santos Yubero hizo al escritor cuando regresó en 1949 a España desde su voluntario exilio en Buenos Aires. Un entusiasmo que es pasión literaria ante ese Madrid de Galdós, Valle-Inclán, Azorín, Pío Baroja, Jardiel Poncela, Cansinos Assens, que Sagarra y Pla contrapusieron a la moderna Barcelona y César Vallejo consideró "la ciudad más original del continente". La que también se asfixió entre los muros de la cárcel de Yeserías, de la plaza de toros Monumental de Las Ventas o del palacio de El Pardo. Un entusiasmo que evitará el mayor temor de Publio López Mondéjar: que la obra de los grandes fotógrafos caiga en un descuidado olvido.

sábado, 18 de diciembre de 2010

Del guión de Princesas de Fernando León de Aranoa


Apartamento de Caye                                                                                         Int. Atardecer

Zulema le hace trenzas africanas en el pelo a Caye, que está sentada en su silla, frente a un espejo.

CAYE
Si quieres te pinto luego.

Zulema sonríe.

CAYE
Hice un curso del inem. De maquillaje para películas. Y otro de modelo. De pasarela, pero lo tuve que dejar porque no tenía equilibrio. (Mira a Zulema en el espejo). ¿Tú tienes equilibrio?

La chica se encoge de hombros.

ZULEMA
Normal.

CAYE
Yo es que nunca he tenido. De pequeña me caía todo el rato, hubo un dia que me caí siete veces. Mi madre me llenaba los bolsillos de arena, para que pesara más y no me cayera.

Zulema se ríe.

CAYE
Como las princesas. Que son tan sensibles que notan la rotación de la tierra, por eso se marean todo el rato ¿no lo sabías? A mí me pasa también, que noto cómo gira. (Lo piensa). Dicen que son tan sensibles que cuando están lejos de sus reinos se enferman. Y que hasta se pueden morir de tristeza. Menos mal que yo no soy princesa, porque ya estaría muerta.

ZULEMA
¿Notas que la tierra gira?

CAYE
De verdad. Cuando tengo la regla sobre todo, son como tirones pequeños. (Lo piensa) Así que claro. Como para caminar por una pasarela.

Se queda pensativa, un instante.

CAYE
Por eso me gustan tanto los equilibristas. Yo debería casarme con uno, para compensar ¿En tu país hay equilibristas?

ZULEMA
Diez millones.

Caye sonríe. Zulema termina con sus trencitas, le ahuela el pelo a Caye, mostrándoselo.

ZULEMA
Cómo te ves.

Caye se mira.

CAYE
¿Le gustará a Manuel? No es equilibrista, pero me gusta mucho, sabes. (Lo piensa) Igual es el .¿Te imaginas? El hombre de mi vida. El que me va a venir a buscar cada día a la salida del trabajo.

Lo piensa un instante.

CAYE
A mí me gustaría mucho ser la mujer de su vida, también. Aunque solo fuera por un día.

Zulema sonríe. Caye la mira.

CAYE
Te quiero pedir un favor, Zule, es muy importante para mí.

... Págs 56 y 57 del guión literario de la película PRINCESAS de FERNANDO LEÓN DE ARANOA.


Porque me gusta mucho escribir diálogos. Porque me gustan los guiones literarios. Porque me gustan los equilibristas. Porque emociona. Porque me gusta lo que escribe Fernando León de Aranoa. Porque sí.
Para que lo recordárais...

jueves, 16 de diciembre de 2010

Tres frases hechas de origen marinero: A palo seco, irse al garete y dar al traste



¿Vale que hoy aprendíamos?

Aunque supongo que muchos de vosotros ya lo sabréis.

El caso es que ayer en la tertulia una compañera trajo un poema salpicadito de expresiones marineras que han llegado hasta nuestro días. Entre ellas estaba la expresión "Irse al garete".

Es lo que ocurre con algunas expresiones que se vuelven tan, tan coloquiales que al final aunque las estamos utilizando constantemente vamos olvidando su origen. Como ocurre con estas tres de las que os voy a hablar hoy.

Irse al garete:

Consultamos el diccionario de la Real Academia Española de la Lengua:

garete.

(Quizá formación del fr. être égaré, andar extraviado).

ir, o irse, al ~.

1. locs. verbs. Mar. Dicho de una embarcación sin gobierno: Ser llevada por el viento o la corriente.

2. locs. verbs. Ir a la deriva, sin dirección o propósito fijo.

3. locs. verbs. coloqs. Fracasar o malograrse.


A palo seco:

a ~ seco.
1. loc. adv. Escuetamente, sin nada accesorio o complementario.

2. loc. adv. Sin comer ni beber.

3. loc. adv. Mar. Dicho de navegar una embarcación: Con la velas recogidas.



Dar al traste:

En el Vocabulario de refranes y frases proverbiales del maestro Correas se lee:

“Dar al traste, es perderse la nave por dar en roca o en navío; de aquí se toman muchas frases, verbigracia: dar con ello, o con todo, al traste.”

Según el lingüista Joan Corominas, tanto la palabra trasto como traste son una derivación del latín transtrum, ‘banco de remero’, término que luego se aplicaría a cualquier mueble viejo o a cada uno de los trastes de la guitarra por comparación con la serie de bancos de una galera. Así se entiende que un naufragio finaliza con la destrucción de la embarcación, bancos de remeros incluidos.

Antigua expresión marinera que significaba naufragar una embarcación.


martes, 14 de diciembre de 2010

Turismo Literario por Ray Loriga


Hace tiempo uno de mis hermanos me trajo un artículo del periódico porque pensaba que me gustaría leerlo. Y la verdad es que sí que me gustó.

Tenía pendiente hablar de ello, pero es de esas cosas que uno piensa  en un momento dado, pero vas relegando y relegando y relegando hasta que se queda al final de un montón de folios y libros y terminas por medio olvidarlo.

El fin de semana pasado estuve pasando un día en Segovia. Os cuento ésto porque pensé entrar a ver la fonda donde vivió Antonio Machado mientras estuvo allí. Pero la visita del Alcazar se alargó y al final no me dió tiempo. Aunque como podéis ver las fotos tuve que hacerlas... 



Por esas asociaciones curiosas y espontáneas que a veces hace la memoria recordé aquel artículo que me había traído mi hermano: Turismo Literario de Ray Loriga.

Y hoy lo he vuelto a releer. Me gusta, me siento muy identificada con lo que dice. Así que os lo traigo para que si os interesa le echeis un vistazo, sobre todo si cuando andais por ahí de viaje aprovechais para ver el cementario donde está enterrado Cortazar, la casa museo de Juan Ramón Jiménez... en fín para hacer esas cosillas que me gusta hacer a mí y que tan bien explica Ray Loriga.


Os lo dejo escaneado, pero por si acaso no lo veis muy bien, os copio algunos párrafos...

"Los escritores sentimos cierta curiosidad por las vidas de otros escritores, supongo que es natural que así sea. Un oficio, y sobre todo un oficio elegido, uno que no se cambiaría por otro, ni se abandonaría por un golpe de fortuna, termina por ser más que una forma de ganarse el pan y se convierte en la parte del león de la existencia. Conozco escritores que llevan esta curiosidad hasta extremos delirantes, pero son los menos, la mayoría, creo, nos limitamos a visitar ciertas tumbas y ciertas casas en ciertas ciudades o pueblos donde moraron en su día ciertos escritores... "
"...No soy de los que planean sus vaciones con un mapa de visitas literarias, pero de una manera no premeditada siempre acabo por tomar ese pequeño desvío que casualmente pasa por delante de aquellos lugares donde algunos escritores vivieron, o murieron, o por esos otros, los mares del sur o Transilvania que, en ocasiones sin siquiera conocerlos imaginaron.
Lo más curioso es que una vez allí, en ese bar, ese cementerio o esa casa, uno no sabe muy bien qué hacer ni a qué ha venido exactamente."

"...Admirar no nos acerca en absoluto al objeto de nuestra admiración, de la misma manera que por mucho que uno peque la nariz a los cristales de la pastelería no se aproxima en realidad ni un milímetro a la tarta de chocolate."

"No sé como será para otros colegas, pero en mi caso, el turismo literario, por más que quiera imaginarlo accidental, resulta siempre una experiencia agridulce. Soy consciente de que la escritura sucede en lugar diferente de aquel donde habitó este escritor o aquella escritora, pero me cuesta no detenerme delante de esas placas..."

"...Ignoro si algún día abandoraré esta mala costumbre de asomarme por las ventanas de los demás, de poner flores que nadie ha pedido sobre las tumbas, de beberme las copas de los muertos, puede que sí, pero si no lo consigo espero al menos que aquellos fantasmas que ya han sido molestado y esos otros a los que molestaré sin duda el próximo verano acepten esas líneas a modo de disculpa."

sábado, 11 de diciembre de 2010

¿Cine? Tres películas... Bon appétit, 18 comidas y The way



 
Pues hoy no vamos a hablar de literatura, para variar vamos a hablar de cine.



Bon Appétit: Me gustó mucho esta historia de sentimientos ambiguos, de amistad que parece amor, de amor que no lo es... Se iba a titular "Historias de amigos que se besan". Le cambiaron el título y yo creo que la fastidiaron un poco. Pero bueno por lo menos lo conservaron como subtítulo. Hombre no me gustá algún que otro cliché como el del casado con la chica... Pero me gustan mucho algunas de sus imágenes, de sus ciudades por la noche, sus escenas de cocina vertiginosas... Y sobre todo me encantó el final que tiene, me gustó mucho: es un regalo "en y para" la película.


18 comidas: 6 historias, 24 personajes, un día cualquiera. Me gustan las historias de muchos personajes cruzándose en un mismo tiempo cada cual con sus historias... Dos borrachos, un músico callejero, un chico que no hace más que cocinarle a la chica que no acaba de llegar, dos hombres que se quieren, una chica que quiere lo que otro no le quiere dar mientras un tercero piensa en ella... Tosar y Esperanza Pedreño... qué diálogo más bueno... Y en fín la eterna búsqueda de la felicidad por parte de todos y cada uno de nosotros.


The way: Sobre todo una película de paisajes, los paisajes del camino de Santiago. Supongo que al que ha sido peregrino le gustará. Y si no lo has sido, como yo, pues hasta te entrarán ganas de hacerlo. A mí me ha gustado la historia por lo que conlleva de complicidad, de amistad, esa posibilidad de ir por la vida solo con lo que llevas encima y te vas encontrando. ¿Una frase? la que le dice el hijo a su padre cuando se va a ir: 
"La vida no se escoge, se vive"


Son tres películas que desde luego pueden dar lugar a muchos comentarios.  Si buscas acción, intriga, terror, un subidón de adrenalina... Está claro: no vayas a verlas. Si quieres sentir... sí. A mí me han gustado, son de gente normal y corriente que siente y se enfrenta a  las circunstancias y a sus propios sentimientos como mejor puede y sabe... 

Tres películas tranquilas, sentimentales y en algunos momentos emotivas. La vida misma.