Un blog de literatura y de Madrid, de exposiciones y lugares especiales, de librerias, libros y let

jueves, 28 de junio de 2012

Un relato de Rocío Díaz y La Real Academia Española



Las clases prácticas son individuales

 Este año veraneo en el salón de mi casa, chaval, chapando inglés con Miss Elizabeth. Acojonante. Lo flipas, tío. Eso sí que es coronar un ochomil chaval, y no eso tan cansado de subir las montañas esas mazo de altas. Que no estoy vacilando, que te lo estoy diciendo en serio. Mientras mi madre hace sudokus y mi padre lee sus manga yo pienso pasar el verano de okupa del salón de mi casa. De gracietas nada, que te lo estoy diciendo de verdad. Tú no tienes ni idea chaval de la demanda habitacional de mi casa. La demanda habitacional en esa casa, que es la mía, se concentra en el salón. Ahí está la minicadena, la televisión, ¡el aire acondicionado! chaval. ¿Y quién va a estar en el salón de mi casa todas las tardes de este verano? El menda, chaval. ¿Es o no acojonante? De friki nada. Yo paso de estar ahí en la piscina tirado como todos los años, horas y horas, pasando calor, o bañándome en esa piscina helada, hablando “de o con” las mismas tías de la Urba de todos los veranos, de todos los años, de toda nuestra vida. Un peñazo. Sí, sí, no me mires así.

¿Por qué con quién voy a estar yo todas las tardes? Ahí la has dado, chaval, ahí la has dado, con Miss Elizabeth. ¿Y quién es Miss Elizabeth? Efectivamente “la ticher”. Pero dilo con propiedad “la teacher”. Eso es. Con propiedad. O lo que es lo mismo un pedazo de pibón de teacher, con su culamen, su canalillo... y lo que no es el canalillo. A eso le llamo yo una experiencia globalizante y no a eso que llaman por ahí... Déjate de las tías de la piscina, que no hay color... La “ticher” este verano va a ser mi autoprotección antisolar chaval. Sí, sí, blanco que me voy a quedar... De blanco nada, morado es lo que me voy a poner. Ya me lo dirás cuando te la presente. Porque una cosa te voy a decir, ella y yo vamos a empatizar a la primera, ya lo verás. Porque voy a desbordar espontaneidad y ganas de saber por todos los poros de este cuerpo masculinizante cien por cien...

¿Te imaginas? Yo ahí cada tarde, en gayumbos, porque tú me dirás con este calor... y ahí mismo, estirando el brazo nada más, el canalillo de la “ticher”... Qué fuerte. Qué fuerte. Eso es incentivación y lo demás tontería. Va a ser una experiencia intergeneracional alucinante. Estoy deseando empezar la semana que viene. Pero deseando.

Porque no te creas que ha sido fácil conseguir esto ¿eh? Que no ha sido nada fácil. Que conseguir que me pusieran en las notas que mi ingles es incapacitante para irme becado a Irlanda, cómo quería mi madre, me ha costado lo mío, chaval. Incapacitante para mi inculturación Irlandesa. Echalé, eso pusieron en las notas. Vamos que me defiendo con el espanglish, pero poco más. A mi madre casi le da algo. Ella que es irlandesa por vía paterna, que a su hijo le pongan eso, el peor insulto del mundo, chaval. ¡Pues claro que yo sé inglés, de sobra para haber sacado nota y todo! Bien lo sabe mi madre. Pero tío tú no has oído hablar últimamente a todo el mundo de la palabra “riesgo”: Riesgo de mercado, de crédito, de interés... Tío, pues aquí también había un riesgo, el riesgo de la ticher. Mazo de importante.

Yo valoré los pros y los contras, y me dije: Tienes que catear. Y menudo paradón le dí al ingles, de cabeza. A ver chaval, piensa un poco, que veo que te has perdido. Tú sabes como es la ticher ¿no? Apúntate tres buenas razones: Culamen, canalillo, experiencia globalizante, que digo globalizante, me atrevo a decir que solo con pensarlo es orgásmica la experiencia. ¿O no? Bueno, pues cuatro buenas razones. Y yo ahí en gayumbos a la distancia de un brazo de ese cuerpazo. Ahí. A la hora de la siesta. Tarde tras tarde. Día tras día. Tú me dirás, yo visualizaba eso en mi mente una y otra vez, y chaval ¿Que me decía? Efectivamente: Tienes que catear. Muy bien, eso me decía.

 Porque a ver piensa: Irlanda no se va a mover de su sitio, pero ¿la ticher? ¿Quién me aseguraba a mi que la ticher no se moviera? ¿Quién te dice a ti que al año que viene a la ticher el Instituto, con los recortes que hay, vaya y no la contrate? ¿Quién te dice que entonces no se vuelva a su London antes de darnos clase el curso que viene? ¿Eh chavalín? ¿Quién te lo asegura? ¿Era una ticher de riesgo o no lo era? Ese era mi argumentario, como dicen los políticos.

Pero... Ahí me tienes. ¿Quién va a tutorizar mi inglés este verano? ¿Quién va a pasarse día tras día en el salón las horas muertas en gayumbos con ella? ¿Qué? ¿Sigues pensando que soy friki? Sí, sí, llámalo “x”,  que yo lo llamo reorientación de mi spanglish.

Ya te pasaré la teoría con el usb, si quieres... Vamos, cómo tú lo veas. Porque claro las clases prácticas, chaval, son individuales. Las prácticas y las no prácticas, que cuando oyó mi madre lo que cobraba por hora la ticher... Eso sí que fue flipar. El “euroescepticismo” que llaman, chaval. Pero bueno esa ya es otra cuestión que tendrán que resolver los mayores ¿no? Que tu y yo, hoy por hoy, aún somos menores de edad. Nosotros, a lo nuestro:  la ticher.

©Rocío Díaz Gómez


Y este pequeño relato que me he inventado venía cuento de... Claro, todas esas palabras que están en negrita. ¿Qué tienen en común todas ellas?

No habíamos comentado aquí en el blog, que La Real Academia Española (RAE) ha actualizado en la red, por quinta vez desde su aparición en 2001,  la vigésima segunda edición impresa del Diccionario de la lengua española, que es la última publicada hasta ahora. 

En total, se han efectuado 1697 cambios, debatidos y aprobados desde septiembre de 2007 hasta diciembre de 2011.

1697 palabras nuevas, entre ellas una acepción de matrimonio entre parejas del mismo sexo y términos como "canalillo", "culamen", "okupa", "pepero", "sociata", "gayumbos", "manga", "paradón", "chatear", "blog", "usb", "sms", "euroescepticismo"...  y muchos más que podéis consultar en la página de la Real Academia. Entre ellas todas las que en mi relato están en negrita.

La 23ª edición del diccionario, se publicará en otoño de 2014 como cierre de la celebración del tercer centenario de la RAE, que comienza en 2013.


miércoles, 27 de junio de 2012

CLEOPATRA EN LA SECCIÓN DE BAÑO DE EL CORTE INGLÉS.- Almudena Guzmán




Este poema que es os dejo hoy, me lo leyó hace poco mi amigo Javier  http://www.javierdiazgil.blogspot.com.es/ 
de un libro de poemas que se había comprado de Almudena Guzman.

Me pareció de lo más acertado con estos días de junio. Me gustó un montón.

Ya veréis leedlo, no me digais, sobre todo las chicas que no está acertado... Auténtica poesía de lo cotidiano.

 

CLEOPATRA EN LA SECCIÓN DE BAÑO DE EL CORTE INGLÉS


Todos los veranos la misma historia.
        
La luz áspera del probador,
el biquini sobre la braga.
los pelos en las piernas.
        
Estás hecha un cuadro.
        
De Munch.



ALMUDENA GUZMÁN, Zonas comunes, Visor, Madrid, 2011, página 72.

martes, 26 de junio de 2012

Una viñeta dedicada a todos mis amigos poetas



Me ha llegado esta viñeta por la redes sociales y la verdad es que me ha gustado mucho.

Os la dejo aquí, dedicada a todos mis amigos poetas. Amigos y amigas ¡claro!

Aunque la prosa también hace volar, vaya si hace volar...

lunes, 25 de junio de 2012

"Los que rugen" Care Santos




“En el interior de las personas rugen los fantasmas”
Pilar Pedraza


Con esta cita se inicia el libro de relatos de Care Santos "Los que rugen". 

Efectivamente son trece relatos que en principio tratan de fantasmas. En principio, porque luego te das cuenta de que son mucho más profundos que un simple cuento de lo sobrenatural.

Se divide en dos partes: Ellos y Nosotros. Ellos, los fantasmas que viven en su otro mundo, al lado de nosotros, cerca de nosotros. Y Nosotros, porque todos tenemos dentro nuestros propios fantasmas.

Son varios los temas que se abordan: la soledad, el paso del tiempo, la pérdida, los recuerdos, lo inconcluso... Y además hay alguno que otro sobre el proceso de la escritura.

A mi me han gustado bastante. Creo que están bien escritos. Los argumentos son variopintos: el viaje de un periodista a un remoto lugar para retratar a los pájaros frailecillos concentrados allí para emigrar, o lo que es lo mismo el titulado "Círculo polar Ártico", uno de los que más me han gustado. Periodistas asesinados por la escritora a la que querían entrevistar, muertos que regresan de la tumba para conversar con los suyos, bebés que vuelven a la vida ya convertidos en adultos... 

Cuentos todos entre lo real y lo fantasmágorico.

"A veces ciertos comienzos nos parecen extraños, pero solo porque no comprendemos lo esencial: nada comienza nunca. La historia siempre continúa, nosotros solo somos una parte ínfima del gran argumento del mundo. Pura insignificancia."
Comunicación

"...El corazón siempre se delata. ¿No crees?
Estuve de acuerdo.
El corazón siempre se delata. El mío lo ha hecho algunas veces, más de lo que me habría gustado. ..."
Defensa y Ataque

Citas como éstas, o relatos como "Marcar un gol" me han gustado mucho, porque son emotivos, pero para nada lacrimógenos.

Es un libro de relatos que creo que está bien escrito. Donde en cada relato se ha cuidado tanto el argumento como la forma. Arrancan bien, te enganchan y terminan cerrando bien el argumento. Aunque en todos más que contar muchos detalles se ha sugerido bastante.  Son relatos profundos, absolutamente verosímiles, donde a veces crees que la autora te está hablando de sus propias vivencias, de tan sencillos están escritos, de tanto cómo transmiten.  Se leen rápido, son entretenidos, te sumerges en la historia en cuánto la comienzas y te impregnas de ese ambiente en muchos tan inquietante, tan conseguido.


Los que rugen
Care Santos (Páginas de Espuma)
170 Páginas – 15€




Care Santos nació en 1970 en Mataró (Barcelona). Empezó a escribir a los 8 años y desde siempre tuvo claro que no quería hacer otra cosa. A los 14 años ganó su primer concurso literario y a los 25 publicó su primer libro, una colección de relatos. Desde entonces, ha publicado siete novelas, seis libros de cuentos, dos libros de poesía y un gran número de novelas para jóvenes y niños. En literatura juvenil es una de las autoras más leídas de nuestro país, y su obra ha sido traducida al alemán, francés, italiano, portugués, rumano, polaco, sueco, noruego, holandés, hebreo, griego, lituano y coreano. Fue fundadora y presidenta durante ocho años de la Asociación Española de Jóvenes Escritores. En la actualidad, imparte talleres literarios, ejerce como crítica literaria en un periódico de alcance nacional -El Mundo- y dedica todo el tiempo que le queda a cuidar de sus tres hijos que, en palabras de la propia autora, son "sus mejores obras".

           Actualmente trabaja en su próxima novela, “El aire que respiras”, que se publicará en Planeta a principios del 2013.

sábado, 23 de junio de 2012

23 de junio. Fuegos. Eduardo Galeano





Junio
23


Fuegos


A la medianoche de hoy, rompen los fuegos.

El gentío se reúne alrededor de las altas hogueras.

Esta noche se limpian las casas y las almas. Se arrojan al fuego los trastos viejos y los deseos viejos, cosas y sentires gastados por el tiempo, para que lo nuevo nazca y encuentre lugar.

Desde el norte del mundo, esta costumbre se difundió por todas partes. Siempre fue una fiesta pagana. Siempre, hasta que la Iglesia Católica decidió que ésta sería la Noche de San Juan.


Eduardo Galeano
Los hijos de los Días

viernes, 22 de junio de 2012

Los nombres tan curiosos de las tiendas...



Tenemos la sección de los nombres de las tiendas un poco abandonada... ¿No? 
Esto no puedo ser ¿eh? 

Así que vamos a ponerle remedio.

No me digais que no era cuestión de fotografiar al restaurante de abajo "La cocina de mi vecina" ¿Se merecía o no la foto? y encima mirad en la foto de arriba que forma tan original de mostrar lo que nos ofrecía: Zumos de la fresca del sótano, Ensaladas del vegetariano del tercero... me gustó un montón. No tiene desperdicio.

Pues nada, si pasais por Malasaña en Madrid, no dejéis de entrar y tomaros algún tentempie aquí. Es pequeñito pero acogedor.



Y dentro de la sección de los parentescos, aquí os dejo también con otros dos restaurantes de Madrid cuyo nombre me hizo guiños:

El Bar Restaurante Abuelita Merche que está por la Guindalera.



Y La nieta Carmela, que está por La Latina.

Ya veis, de abuelas y nietas va hoy la cuestión, cómo no os las iba dejar aquí reseñadas...



jueves, 21 de junio de 2012

La curiosa historia de la palabra "Mamotreto"



Hoy os traigo otra de esas palabras que a mi me gustan: mamotreto.

¿Quién no ha dicho alguna vez "¿Y qué hago yo con este mamotreto?" para referirse a mil cosas?

¿Os habéis preguntado alguna vez de dónde viene esta peculiar palabra? 

Pues resulta que viene de la palabra "abuela". 

Ya... curioso ¿verdad? 

Pero claro no de nuestra palabra  "abuela", sino de la palabra griega con la acepción de abuela. Vamos para que me entendais, como la mayoría hemos estudiando algo de ingles, procedería de la misma raíz que abuela en inglés: "grandmother".

Os voy a dejar con un pequeño artículo donde lo explican muchísimo mejor que yo. Espero que os guste.

Mamotreto

Por Fernando A. Navarro

La polisemia no es, desde luego, un invento moderno. La palabra griega mamme, por ejemplo, podía tener hasta cuatro acepciones: ‘madre’, ‘mama’ (glándula mamaria), ‘comadrona’ y ‘abuela’. Todas ellas se explican fácilmente a partir de la madre: de hecho, las tres primeras incorporan también en español una alusión léxica a la ‘madre’. En cuanto a la abuela, no la incorpora ya en español, pero sí en muchos otros idiomas de nuestro entorno, donde la palabra para referirse a una abuela significa literalmente ‘gran madre’: grand-mère en francés; grandmother en inglés; Grossmutter en alemán.

Lo más curioso del caso es que este uso de mamme en el sentido de ‘abuela’, que se conserva aún en griego moderno, nos ha dejado en español una palabra que pocos sabrían relacionar con el griego.

Me estoy refiriendo a mamméthreptos (literalmente, ‘criado por su abuela’), que el latín tomó como mammothreptus para referirse a un niño que mama mucho tiempo. Posteriormente tomó el sentido de   ‘gordinflón‘ o ‘abultado’, único que conserva en español la palabra mamotreto,que evoca en nosotros la idea de un libro o cualquier otro objeto de mucho volumen y poca utilidad; algo así como un armatoste, vamos.