Un blog de literatura y de Madrid, de exposiciones y lugares especiales, de librerias, libros y let

martes, 19 de agosto de 2014

Lorca y agosto


Hoy he pasado caminando por delante de la Residencia de Estudiantes de la calle Pinar. No eran ni las ocho de la mañana de un día laborable de agosto. Qué tranquilidad se respiraba en ese rincón de Madrid, apenas llegaban los murmullos de los escasos coches que pasaban por la Castellana.

Y he pensado que quizás por donde yo pisaba, un día pisaron tantos otros que tuvieron la suerte de vivir en la Residencia de Estudiantes en aquellos años que la frecuentaban Buñuel, Dalí o Lorca... Qué suerte haber conocido aquella época de la Generación del 27, tan creativa, tan rica. 

Lo cierto es que me gusta mucho todo lo relacionado con aquella época, con la Generación del 27, con la Residencia, su historia y su ubicación en ese pedacito de Madrid. 

Pero... con la distancia y la ventaja que te da haber nacido tantos años después siento que yo no me puedo quejar. No debo. Poder disfrutar de mi ciudad en agosto, poder pasear por un Madrid fresco a esas horas de la mañana, sin apenas ruidos, es un lujo. Vivir en esta ciudad donde somos tantos y tan diferentes, pero aún así a veces hay cierta paz también. Vivir en el 2014, en este tiempo donde no importa cuáles son tus ideas políticas, ni tus preferencias sexuales. Vaya sí lo es. Un lujo.




"Qué miedo debió de pasar Federico la noche que lo mataron, decía Alberti con la resignación de lo inevitable. Él que ni siquiera se atrevía a cruzar la Gran Vía si no era del brazo de alguien. Siempre tuvo, Federico un temor reverencial, supersticioso, a la muerte. Temía morir ahogado, atropellado, despeñado, apuñalado, desangrado, enfermo y desahuciado. Temía la fuerte fatal e irreversible, la putrefacción y la nada. De ahí que intentara conjurarla con la macabra ceremonia de representar su propio velatorio. Se tumbaba en la cama con su mejor traje: los ojos cerrados, las manos de dedos largos, blancas como las de un médico, sobre el pecho, y describiía con todo lujo de detalles el atáud; el entierro, a hombros de sus allegados, por las calles llenas de baches de Granada; las lágrimas de sus deudos; el luto de sus compañeros: vecinos, admiradores; la congoja de los curiosos... Hay un cuadro de su amigo Dalí, Natura Morta, que representa a Lorca posando como un cadáver, y unas fotos de una de esas sesiones mortuorias que le hizo la hermana del pintor, Anna María, y que nunca quiso hacer públicas tras la muerte, la muerte verdadera del poeta.

Después se levantaba de repente, como un aparecido y se reía a carcajadas, los dientes blanquísimos, los ojos tristísimos velados de lo que sus amigos llamaban "intermitencias lánguidas". Esos momentos en que se ausentaba, se quedaba sin habla y sin música: la mirada vidriosa, perdida y triste.

La otra cara del poeta era la de los recitales, las canciones al piano. Nadie ni siquiera sus enemigos declarados, era inmune a su embrujo sentado al teclado, con un mechón de pelo caído sobre la frente despejada. Entonces no hacía ni frío ni calor, hacía solamente Federico. El de La Barraca y las Misiones pedagógicas, el amigo de Neruda, Buñuel y Prados, el Federico del viaje a NUeva York y a La Habana, el autor de éxito que saludaba desde la corbata de los escenarios de medio mundo, recogiendo aplausos y ramos de flores. Dibujó mucho, y pintó a la acuarela, nunca al óleo porque temía mancharse y que su madre, mamá, le regañara.

La tarde del 12 de julio de 1936 dejó en las oficinas de Cruz y Raya, la editorial que dirigía su amigo Bergamín, el manuscrito de Poeta en Nueva York, y una nota: "Querido Pepe, he estado a verte y creo que volveré mañana". Nunca lo hizo, la noche del 13 de julio estaba invitado a una cenaa la que no acudió. El resto de los comensales, entre los que se encontraba Luis Cernuda, estuvieron esperándole hasta que alguien llamó anunciando que acababa de dejarle en el tren, camino de Granada. Un mes más tarde, el 16 de agosto fue detenido. Después, no se sabe si la madrugada del día 18 o 19, fue conducido a un lugar en los alrededores de Víznar y, junto a un maestro de escuela y dos banderilleros, fusilado, sin ataúd, ni cortejo fúnebre, ni las manos sobre el pecho. Nunca se han conocido las circunstancias, ni qué miedos le asaltaron. Tenía treinta y ocho años, y la mirada triste."

Jesús Marchamalo
39 escritores y medio
Editorial Siruela

domingo, 17 de agosto de 2014

Agosto, angosto. Efemerides Literarias


Un 17 de agosto, pero de 1942, Irene Nemirovsky es gaseada en Auschwitz. Sus hijas vivieron escondidas durante la guerra y protegieron los manuscritos de su madre.

Un 16 de agosto, pero de 1949, Margaret Mitchell, la autora de Lo que el viento se llevó, es atropellada en Atlanta por un taxi mientras iba al cine. Muere horas después. 

Un 7 de agosto, de 1994, muere Rosa Chacel. Su madre, maestra, le brinda la formación elemental en casa a causa de su delicada salud.

Un 2 de agosto, de 1942, nace Isabel Allende.



Agosto, angosto...

Imagen: Mujer libro de Salvador Dalí

jueves, 14 de agosto de 2014

De "juernes..."





Cari ¡que es juernes! Y que sea juernes no es que sea guay es ¡lo siguiente! He mandado esta mañana un guasap a la people, contándoselo: “Tios k flipe ¡juernes ya!”  Es guachy cuando llega el juernes ¿Que no? Yo que sé, es el mejor día de la semana ¡Despertador, reloj de fichar: multiplicaos por 0! Aggg cómo me rayais... Porfa cari tenemos que salir, tenemos que salir ¡¡estoy superencantada de que sea juernes!!
En su dia ya le dedicamos una entrada a esta palabra "Juernes" del lenguaje coloquial, pero no está mal de vez en cuando recordar estas entradas...

miércoles, 13 de agosto de 2014

Una nueva entrega de "Los letreros de la calle"






 Me llamo Rocío Díaz y soy "palabronómana".

Pues sí, me he inventado el término. Pero vosotros me entendeis... Tengo debilidad por las palabras, las frases, los letreros curiosos que me atrapan a mi paso.

Hoy os traigo tres más de la calle. El primero es el de la foto de la cabecera de la entrada. "Se necesitan clientes. No es necesaria experiencia". No me digáis que no os hace sonreír... Lo pille en Úbeda, en un bar muy curioso decorado con fotos de conciertos de Joaquín Sabina y que, cómo no podía ser de otra forma, se llama "Calle Melancolía". Sí es el de la foto de aquí debajo.



En la siguiente foto os traigo un "Padre Nuesro Cervecero". Está en un bar cercano a mi vida cotidiana. ¿Y cómo no os lo iba a traer? Leedlo, es muy curioso: 

Barril nuestro que estás pinchado, santificado sea tu cabezal. Venga a nosotros tu espadín, por todos los bares y tabernas, danos nuestra jarra de cada día. Perdona nuestra efímera sobriedad como nosotros perdonamos a nuestros camareros. Líbranos de los abstemios. Amén"




Y la última foto que os traigo. Sí es una servilleta que nos habla contándonos las excelencias del local donde se halla:

"Casi no vas a utilizarme. Aquí está todo para chuparse los dedos".



Éstas últimas fotos las tomé en Madrid. 

Espero que os hayan gustado.

Me llamo Rocío Díaz y soy "letraherida". Éste término sí ¿verdad? éste es.

martes, 12 de agosto de 2014

Sagrario del Peral - Poeta - En voz alta




Hace un año, un diez de agosto de 2013 y de madrugada, naufragaba definitivamente mi compañera de letras y de tertulia Sagrario del Peral.

Seguro que junto a sus poetas malditos será más feliz.


 http://www.rociodiazgomez.blogspot.com.es/2011/11/sagrario-del-peral-fragmentada-con.html

http://www.rociodiazgomez.blogspot.com.es/2011/03/exposicion-poesariohuesos-y-literatura.html




Aún quedan locos. (Sagrario del Peral)

30 de junio de 2013 a la(s) 14:15

Ayer caminaba todavía, una posibilidad entre nosotros
hoy es tan tarde, quizás lo fue siempre.
Las aguas que nos unieron eran quimeras,
 flores de un día
como el deseo caprichoso, navega mientras el placer embriaga.

Después se olvida con la velocidad de otros dedos que acarician
los mismos lugares que buscábamos juntos
Necesito parar un tiempo que jamás se detiene
quiero seguir soñando y pensar que permaneces.

Despierto y la vulgaridad se hace paso
todo brilla menos
el reloj no me lleva a tu encuentro
la pesadilla me trae el periódico
desayuno la era del desamparo
Menos mal que aún quedan locos
que hablan de poesía y mueren por un verso.

domingo, 10 de agosto de 2014

Ana Delgado Cortés en el "Verguenza ajena"

Ana Delgado Cortés. Ya sé que esta foto está movida, pero me gusta...

Este jueves pasado, 7 de agosto, estuve en una jam sesion de poesía donde la artista invitada era la poeta Ana Delgado Cortés.

Lo pasé muy bien.

En primer lugar porque Ana Delgado Cortés nunca decepciona. Fue una lectura breve, una media hora, pero como siempre desgrano sus poemas tan bien escritos con una naturalidad desbordante. Saltaba de forma fluida de uno a otro haciendo un recorrido desde poemas más antiguos de sus primeros libros publicados hasta los inéditos dedicados a Sherezade. Qué bien escribe. Después de unos tres años "en la reserva" como ella mismo nos dijo, vuelve más sabia en ésto de inventar y recitar versos.


El hombre que me muerde
no muerde en mí la carne, el pecho, el labio,
El hombre que me muerde
muerde de mí el instante
y sólo permanezco por su boca.

Pág. 42
Poemas del amor sumiso - Ana Delgado Cortés

En segundo lugar descubrí "Verguenza Ajena", una librería que está en la calle Galileo (madrid- Argüelles) donde además puedes tomarte algo, picar, participar en algún que otro taller o tomar parte de una jam session de poesía como la de ayer, en la que además me reí un montón.



Y ello hay que agradecérselo al alma de esas jam session, Pepe Ramos, que lleva ya más de cuarenta semanas, sin faltar ni una, haciéndolas cada jueves y la verdad es que sabe como conducir la velada de forma super amena y entretenida. Primero hizo un recorrido por las noticias culturales de la semana, y luego ya fue presentado a los autores que previamente se habían apuntado para leer uno o dos poemas suyos. Cada uno que quiere leer dispone de cinco minutos exactos que se miden con un reloj despertador que hay en el rincón, lo podéis ver en las fotos. Habían colocado el despertador que sonaba desde luego marcando el tiempo estipulado, al lado de una fotografía de Alex Ángulo, el actor que desgraciadamente falleció este verano, en un accidente de coche.

Pepe Ramos en un momento de su presentación
En primer lugar salió a recitar Javier Díaz Gil, poeta y coordinador de nuestra tertulia Rascamán, luego salió la poeta Ana Galán, después también salió la poeta Laura Gómez Recas... y así iban saliendo cada vez que los nombraba Pepe Ramos, no sin antes, hacer una presentación de ellos totalmente disparatada y sobre todo muy, muy ingeniosa. 

Me tuve que ir antes de terminar la velada, pero desde luego el tiempo que estuve, lo pasé muy bien. Incluso en agosto, en Madrid se puede disfrutar de veladas poéticas diferentes, amenas, entretenidas como la del último jueves, 7 de agosto, en Vergüenza Ajena.

Javier Díaz Gil participando en la jam session de poesía

Ana Galán, participando en la jam session de poesía

viernes, 8 de agosto de 2014

La isla de los siete faros - Menorca


Faro de Sa Farola



Tenía la isla siete faros. Cuatro faros al norte y tres faros al sur. 

Altivos, se elevaban muchos metros por encima del mar, divisando a cuántos viajeros pretendían alcanzar la isla en busca de su misterio.

Llegaban los viajeros con sus viseras y sus cámaras de fotos queriendo atraparlos. Los imaginaban inertes e indiferentes a sus risas.

Pero ellos palpitaban silenciosos con la indolencia de quién vive siempre bajo el sol.  

Y mientras los viajeros triunfantes los nombraban dándo una invisible palmada a la pared cada vez que los visitaban, tachándolos de su lista, como si jugaran a pillarlos a todos... Ellos haciéndose guiños con sus luces disfrutaban de su propio juego, ese en el que camaleónicamente se ocultaban unos tras las rayas de los otros, despistándoles sin que se dieran ni cuenta. ¿Quién jugaba con quién?

Los viajeros, victoriosos y ya en sus casas, revelaban sus fotos buscando los siete faros. Pero las fotos solo les mostraban seis. Lisos y de rayas horizontales, de rayas verticales y hasta curvadas. Pero seis, solo seis. 

Ningún viajero puede entender de las historias entre las islas y sus faros. Viven a demasiadas millas de distancia, donde ya siempre sus álbumes de fotos mostrarán seis faros. 

Pero de cerca la isla tiene siete faros. Cuatro al norte y tres al sur que cuidan de su misterio.


Menorca junio 2014
Rocío Díaz Gómez


Faro de Punta Nati
Faro de Artrutx






Faro de Cavalleria





Faro de la Isla del Aire





Faro de Favaritx




  1. Faro de Punta Nati (Ciutadella): 42 metros sobre el nivel del mar y con un alcance de 16 millas.
  2. Faro de Cavalleria (Es Mercadal): 94 metros sobre el nivel del mar y con un alcance de 22 millas.
  3. Faro de Favàritx (Maó): 47 metros sobre el nivel del mar y con un alcance de 16 millas.
  4. Faro Punta San Carlos (Es Castell): 22 metros sobre el nivel del mar y con un alcance de  12 millas.
  5. Faro Illa de l’Aire (Sant Lluís): 53 metros sobre el nivel del mar y con un alcance de 18 millas.
  6. Faro de Cap d’Artrutx (Ciudadela): 45 metros sobre el nivel del mar y con un alcance de 19 millas.
  7. Faro de Sa Farola (Ciudadela): 21 metros sobre el nivel del mar y con un alcance de 14 millas.