Un blog de literatura y de Madrid, de exposiciones y lugares especiales, de librerias, libros y let

martes, 8 de noviembre de 2011

Paloma Sánchez presentó su nuevo libro "Atleta que mira el paisaje"



El domingo Paloma Sánchez, poeta y compañera de nuestra tertulia Rascamán, presentó su nuevo poemario "Atleta que mira el paisaje" en La Madrilera, un teatrito pequeño donde parece mentira la de personas que pudimos caber...

Como siempre, Paloma consiguió que su recital de poesía se llenase de vida apoyándose en la música y en las voces de otros dos poetas, logrando un resultado eficaz que no tiene nada que envidiar a cualquier otro espectáculo.




Acompañándola en la palabra estuvieron Verónica Gil y Javier Diaz Gil. Ambos, actriz y poeta, no hace falta decir que también recitaron muy bien, alternando sus voces con la de Paloma, creando un juego de versos y tonos que intensificaban y multiplicaban el significado.



Todas mis figuras son robadas incluso tú
no eres más que el agua que se precipita
nuestras caderas golpean los tambores
en un paroxismo de borrachos

Te pierdo en un cruce de significados
El discurso es tan incomprensible como el mundo
mi aullido será juzgado por vosotros...

Paloma Sánchez
El amor (Atleta que mira el paisaje)

Fue una puesta en escena muy lograda, cuidada, elaborada, pero sin embargo sencilla y emotiva.
Paloma Sánchez recita reinterpretando sus versos con la voz y el cuerpo. Ahora sentada, ahora levántándose de la mesa, paseando por el escenario, llamando nuestra atención constantemente con su voz y sus gestos, se lleva al público a su terrero y logra trasmitir mucho más allá de las meras palabras.

También estuvieron acompañándola con la música: Alvaro Sánchez, Miguel Arnau, Alfonso San Miguel e Ignacio San Miguel. Éstos dos últimos son sus hijos. El repertorio, muy bien interpretado, incluyó canciones de Los Beatles, de George Michael, de John Denver... Daba gusto escucharles.




Me gustó mucho la verdad. Se notaba que le habían dedicado muchas energías.
También en las alturas la voz de Alejandra (no sé si llegaron a decirnos su apellido) iba haciendo la presentación de las distintas partes del poemario: La escritura, la música, el amor y el teatro. Recitando el verso del poeta Cereijo que encabezaba cada parte.




Mereció la pena. Paloma Sánchez va creciendo en las puestas en escena de sus poemarios. La música se acopla perfectamente con los versos y los hace más rotundos, más certeros.

Nunca es mi nombre cuando dices -te quiero-
cárcel llena de flores y de pájaros.
El vientre de la noche me contiene
la relativa desdicha en la que vivo
cada mes me fuerza a aullar la luna llena.
Me despido de ti todos los días.
Quiero declarar la pérdida en niebla
de lo que dibuja una identidad posible
en la quietud de las palabras de un poema.

...
Páloma Sánchez
La escritura (Atleta que mira el paisaje)




lunes, 7 de noviembre de 2011

Un nuevo blog ha nacido: "La revolución interior"


Autora de la foto: Ana Nieto Pardeiro


Tengo varias recomendaciones que haceros de algunas personas muy interesantes y allegadas a mí. Pero para no agobiarnos todos, vosotros y sobre todo yo, que soy la primera que se agobia, las dividiré en varias entradas.

La primera viene de la mano de la autora de la foto (Es chula ¿verdad?) que encabeza esta entrada: Ana Nieto Pardeiro. La foto se la he cogido prestada, qué mejor comienzo para hablar de una persona a quién conocí hace muchos años cuando estudiábamos aquello que se llamaba BUP y de dónde tan buenos amigos aún conservo. Una persona que tiene una sensibilidad especial para "mirar" a su alrededor y preguntarse por todo, buscando siempre "crecer".

Pues bien, Ana Nieto tiene un nuevo blog llamado "La revolución interior":




Un blog que ha nacido a partir de un programa de radio conducido por ella misma (http://desdetierrasminusculas.blogspot.com/), en la radio "Agora Sol" que surgió a raíz del movimiento 15M.

Siguendo el blog es mucho más fácil acceder el programa, porque en éste se irán colgando tanto las emisiones como algunos de sus textos y se podrán leer cuando se quiera.

¿Qué es y por qué "La revolución interior"? Pues voy a dejar que os lo explique ella misma:

"Es todo lo que podemos hacer para sentirnos mejor, más plenos, más realizados, más en paz con nosotros y con nuestro entorno. Es pensar que las cosas no se hacen solas, que hay que trabajarse cada día para ser un poquito mejor y mejorar también así el pequeño mundo que nos rodea. Es saber que es posible cambiar, que se pueden hacer muchas cosas que ni imaginamos, que no hay que conformarse con la infelicidad. En mi opinión, se trata de emprender el camino hacia el ser que uno es realmente, más allá de máscaras, imposiciones, y creencias limitadoras. No es una vía fácil, pero es muy vital y nos llevará a donde queremos ir.

Y precisamente por no ser fácil, necesita de una formación al respecto y todos los apoyos posibles, tratándose como se trata de nuestra salud; a estas alturas está bastante admitido cómo afectan nuestras emociones y pensamientos en la salud física, por lo que no cabría separar una cosa de la otra.

Pues una minúscula parte de esta tarea, que en mi opinión tendría que estar incluida en la educación pública, es la que me propongo con la Revolución Interior, este programa de radio cuya primera emisión fue el sábado 8 de octubre en Ágora Sol, la radio que surgió del 15M. La tarea es intentar difundir y apoyar esta revolución y aportar, gracias a los profesionales que colaboren con nosotros, toda la luz que se pueda para que deje de ser algo extraño e infranqueable."

Ana Nieto Pardeiro


Así que ya sabéis: ha nacido la "revolución interior":


¿No vais ni siquiera a escuchar de qué va ésto...? Para empezar hay una entrevista con Jose Luis Sampedro...


jueves, 3 de noviembre de 2011

"Atleta que mira el paisaje" poemario de Paloma Sánchez




Pues ya ha empezado el curso y ya empezamos con las lecturas de poemarios y prosas.

Paloma Sánchez, compañera de nuestra tertulia y original poeta, el proxímo domingo 6 de noviembre, a las 20:00 hr., presenta  su poemario: "Atleta que mira el paisaje".

¿Dónde?

Teatro la Madrilera,
c/ Don Felipe, 9 de Madrid
 (metro Tribunal y Noviciado),

Las puestas en escena de Paloma siempre son dignas de admiración. No solo ella vive sus versos al recitarlos sino que sabe cómo trasmitirte todo ese caudal de versos de forma que te empapas con su voz y los sientes con ella. Esta vez lo hace acompañada de otros dos poetas: Javier Díaz Gil y Violeta Gil con los que jugará entre versos y voces.

Y además estará acompañada en la música por Álvaro Sánchez, Miguel Arnau, Alfonso San Miguel, Ignacio San Miguel.

Así que ya sabéis, allí nos vemos...

lunes, 31 de octubre de 2011

Las esquelas, los eufemismos y la muerte en estos días "tan señalados"...



Coincidiendo con el Día de todos los santos y el de los difuntos, nosotros vamos a lo nuestro y ya que estamos aprovechamos para recordar "los eufemismos", tan usuales cuando hablamos de la muerte.

Recordamos primero que era aquello del eufemismo. Dice el diccionario de la Real Academia:

eufemismo.

(Del lat. euphemismus, y este del gr. εὐφημισμός).
1. m. Manifestación suave o decorosa de ideas cuya recta y franca expresión sería dura o malsonante.







   

Cuando hablamos de la muerte, solemos utilizar los eufemismos para suavizar un poco la cuestión. Os quería dejar con un fragmento de un estudio muy ameno sobre las esquelas con el que tropecé un poco por causalidad:



La muerte mensajera
Las esquelas de defunción como elemento informativo Dr. Bernardino M. Hernando
Profesor Titular de Periodismo
UCM


Os dejo con el fragmento que os comentaba sobre los eufemismos. A ver que os parece...





MORIR: SUS EUFEMISMOS Y PRECISIONES


En la inmensa mayoría de las esquelas se emplea, para indicar la muerte, el verbo "fallecer", que viene a ser el verbo oficial, el que las empresas funerarias tienen siempre a mano. "Fallecer", el anticuado "fallir", del latín fallere (engañar, quedar inadvertido, faltar...) es, al fin y al cabo, un eufemismo de morir. Y ya se sabe lo que se necesitan los eufemismos en estos trances de la muerte.

Con alguna frecuencia, el verbo fallecer va apoyado por un adverbio de modo o su equivalente modo adverbial que matiza el hecho de la muerte (cristianamente, en accidente,... Como el verbo "morir", mucho menos empleado, puede ir suavizado con algún adverbio (serenamente...). En algún caso el eufemismo de fallecer se vuelca sobre un disfemismo inesperado (víctima indefensa de un vil y brutal asesinato, brutalmente asesinada, vilmente asesinada...)

La necesidad de ubicar el fallecimiento para mejor información puede estar teñida de algún interés reivindicativo (... en el suceso del restaurante El Descanso (1985),... en el quirófano de cardiología del Hospital Clínico de...) o valorativo (Sexto Aniversario. José Manuel González-Valcárcel, doctor arquitecto... falleció en el Teatro Real de Madrid, llevando la dirección de la obra, el día 29 de enero de 1992. El País, 29-I-1998)

Las fuertes convicciones religiosas disponen de una amplia gama de eufemismos ( que lo son sin que ello suponga poner en duda tales convicciones): volvió al Padre, murió y resucitó, nació para morir –murió para vivir, se durmió en la paz del Señor, descansó en la paz del Señor, terminó su vida mortal, nos dejó para irse al cielo, el Padre Dios lo llamó a la vida, fue al encuentro del Padre...

En esquelas de sacerdotes y religiosos suele haber un cierto barroquismo teológico muy representativo de estilos eclesiales. La esquela del sacerdote, conocido escritor y teólogo, Carlos Castro Cubells, rezaba: ...nacido en Madrid el 22 de mayo de 1921. Sacerdote desde el 17 de mayo, Domingo de Pascua, de 1954 ha sido acogido en la unidad del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo el día 6 de junio de 1998 víspera de la Santísima Trinidad...

Los Padres Escolapios parecen tener un modelo de enunciados para sus sacerdotes en el que sólo cambian los años del difunto: Ha culminado la ofrenda de su vida a Dios, llegando a la casa del Padre a la edad de (...), después de dedicar su vida sacerdotal a la educación cristiana de la juventud, siguiendo el ejemplo de San José de Calasanz en las Escuelas Pías. Al menos, esta es la fórmula empleada en varias ocasiones (ABC, 30-VIII-1984; 23 –IX-1984...)

También hay seglares cuyos eufemismos religiosos tienen un cierto peso de barroquismo teológico: Laura Jiménez Abascal... nos ha regalado setenta y dos años magníficos de amor y bondad. Ha vivido en la fe de Cristo y ha fallecido el 2 de Abril en la confianza de volvernos a encontrar en la Casa del Señor. Su esposo... hijos (etc.) (ABC, 3-IV-2001)

Otros modos, inapropiados para convertirse en fórmulas, reflejan peculiaridades o circunstancias tanto de los difuntos como de los redactores de sus esquelas: murieron bajo la nieve en Candanchú (El País, 23-I-1985), Juan Antón, mago, ya no está con nosotros; Hace un año Teresa nos dejó; Requeté hasta su muerte y voluntario de la Cruzada milita junto a Cristo Rey (ABC, 29-II-1984; 27-IX-1985 y 30-IX-1995)

Entre los cientos de esquelas manejadas para este trabajo sólo hemos encontrado una que se refiera de modo directo y expreso a la enfermedad que, sin embargo, es causa de la mayoría de las muertes: Pepón Coromina Farreny ha fallecido de cáncer a los 41 años... (El País, 25-26-XII-1987).


Para finalizar por si os interesa todo el artículo os dejo con el vínculo:



Las tres fotos de esta entrada las hice este verano. La del principio de la entrada es de Croacia, y las dos últimas son de Sicilia. Me llamaban la atención. Aquí en España no sé si todavía en algunos pueblos se siguen poniendo las esquelas por la calle, desde luego en Madrid no se ven.








domingo, 30 de octubre de 2011

"El violonchelista de Sarajevo" de Steven Galloway




Yo no sabía que el Adagio de Albinoni no era de Albinoni, sino que es de un musicólogo italiano llamado Giazotto que lo compuso en 1945 a partir de un manuscrito de Albinoni que encontró en la s ruinas de  la Biblioteca de Dresde poco después de la Segunda Guerra mundial.

Y yo toda la vida pensando que el Adagio de Albinoni, era de Albinoni...

Cómo tampoco sabía que existió en el cerco de Sarajevo un violonchelista que durante 22 días (uno por cada muerto estaba homenajeando) salió jugándose la vida a tocar el Adagio de Albinoni al filo del crater donde el día anterior había caído una bomba matando a veintitantas personas, y muchas más fueron heridas, mientras estaban haciendo cola para comprar el pan.

Solo porque he aprendido estas dos cosas ya me ha merecido la pena leer "El violonchelista de Sarajevo".

Y éste también es el comienzo de la novela: cómo el violonchelista vee cae el obús y matar a todas esas personas, cómo inmediatamente resuelve a partir de ese día salir los 22 siguientes a tocar el "Adagio de Albinoni" para ellos. Esto fue verdad y éste hecho es del que parte esta novela tan emotiva. 

Pero el violonchelista no es el único protagonista, hay otros tres: Dragan, que intenta reunir el valor suficiente para cruzar un puente sobre el que tiran los francotiradores... Flecha, una francotiradora, que tiene que cuidar de la vida del violonchelista. Y por último Kenan, un pobre hombre, casado y con hijos que tiene que ir cada tres o cuatro días a una destilería, el único sitio del que se obtiene agua potable en la ciudad,  cargado con un montón de garrafas vacías, salvando trampas mortales, para traer agua para su familia y para una odiosa vecina a la cual no sabe ni por qué la soporta, ni ayuda.

 Estos son los cuatro personajes. Y el lugar es el cerco de Sarajevo, una ciudad sitiada por francotiradores que disparan a cualquier civil que salga a la calle. Una ciudad sitiada por la guerras, la falta de alimentos, agua o electricidad.

Hay que reconocer que el tema no solo es de lo más actual, apenas han pasado veinte años desde la guerra, sino que además está contado de forma sencilla, sin adornos, sin descripciones ni apenas diálogos.  Sigue la técnica del multiperspectivismo. Esta contado de forma directa y reflexiva por los tres personajes, ahondando en sus sentimientos y sus sensaciones, mientras lo están viviendo. Por momentos somos nosotros los que decidimos sí cruzamos o no la calle, si nos arriesgamos a que nos disparen, si corremos a buscar al que ya está herido, con el riesgo de que nos disparen también, o si decidimos quedarnos a ver cómo enseguida vienen y lo retiran ante nuestros ojos... como si no hubiera apenas pasado nada. Es nuestra ciudad, es nuestra vida ¿Por qué hemos llegado a ésto? se preguntan los protagonistas.

Es increíble, la verdad, lo que pasó en Sarajevo. Pero la novela, cruda y terrible, creo que consigue reflejar muy bien lo desolador, lo peligroso y lo triste que debió ser vivir aquello. El autor consigue con esa forma de contarlo, meterte dentro de esos personajes y conmoverte, sentir la agonía que debieron vivir los que tenían que sobrevivir cada día durante esos años sin saber cuánto duraría aquello...

No sé si es que yo ya estaba sensibilizada por el hecho de haber estado unos días antes allí. Supongo que también. Pero sea por eso o no, a mí me ha gustado leer sobre ello. Aunque reconozco que no es una lectura agradable, creo que es necesaria.

     



"Y así, hoy, como todos los días en la memoria reciente, el violonchelista se sienta junto a la ventana de su apartamento, en la segunda planta del edificio, y toca hasta que siente que la esperanza regresa. Raramente toca el Adagio. La mayoría de los días consigue sentir que la música le rejuvenece con la misma facilidad como si estuviese repostando gasolina con el coche. Pero otros no ocurre lo mismo. Si, tras varias horas, ve que la esperanza no regresa, hace una pausa para recomponerse, y luego él y su violonchelo rescatan pacientes el Adagio de Albinoni del arrasado museo de Dresden y lo trasladan a las calles de Sarajevo, horadadas por el mortero e infestadas de francotiradores. Para cuando las últimas notas se desvanecen, su esperanza está ya restablecida, pero cada vez le resulta más arduo recurrir al Adagio, aunque se vea obligado a hacerlo, porque sabe que su efecto es finito. Sólo queda una cantidad concreta de adagios en él, y no comentará la imprudencia de malgastar esta valiosa moneda de cambio."

 

El violonchelista de Sarajevo

Steven Galloway

Título original: The Cellist of Sarajevo
Editorial: El Aleph
Año publicación: 2008



 Estos son mis pies en Sarajevo, ante "La rosa de Sarajevo". Un homenaje a los que murieron sobre el asfalto con manchas rojas. Os copio como lo cuentan ellos: "La rosa de Sarajevo es un recuerdo, una cicatriz en el hormigón de las calles de Sarajevo como recuerdo de allí donde murió un civil por el disparo de un mortero. Los disparos de mortero al estallar contra el suelo crean un inusual patrón floral en la mayoría de las ocasiones, Sarajevo aguantó un asedio durante mucho tiempo y fue acribillada por miles de estos disparos.".


jueves, 27 de octubre de 2011

Mi último relato premiado...



Va a hacer un mes que fui a Valencia a recoger el 2º premio de relato corto del X Certamen de Narrativa Breve "Mujeres en el arte" que había convocado la concejalía de Bienestar Social del Ayuntamiento de Valencia.
Fue una entrega de premios que estuvo muy bien.
Hay que reconocer que el lugar era digno de ver y mucho más de vivir recibiendo un premio: elegante, señorial, distinguido. Primero llamaron a los autores que habían sido seleccionados para publicación y les fueron dando a todos un precioso ramo de flores y creo que algún ejemplar de la publicación que habían hecho con todos los relatos seleccionados. Y luego fuimos saliendo los premiados a leer nuestros relatos y a recoger nuestro premio.

La verdad es que el Ayuntamiento se portó muy bien con nosotros. Porque además de la dotación económica que conllevaba el premio, nos fuimos a casa cada uno con un diploma, un ramo de flores a cual más original, una camiseta, una libreta y un colgante además de un montoncito de ejemplares de la publicación que ya os comentaba con todos los relatos escogidos por el jurado.

¿Verdad que se portaron muy bien? Después nos sorprendieron con una actuación de una artista de las castañuelas que nos dejó a todos impresionados. Fue muy emocionante cuando al final todo el auditorio se puso a la vez en pie para aplaudirla. Qué diferentes son las entregas de premios... La verdad es que era la primera con una actuación de este tipo.





Después nos invitaron, como no podía ser de otra forma en Valencia, a horchata y fartones. Muy completo.


Estuvo muy bien. Volví a casa muy contenta con la experiencia.

Por eso os quería dejar con algun momento que otro de la entrega de premios y por supuesto con mi relato... Tenía que tener cómo máximo 90 líneas y el tema, ya sabéis, las mujeres en el arte...

Espero que os guste.


Los juegos de las niñas sabias



Cuentan que en algún lugar, a salvo del tiempo y el espacio, están jugando unas niñas.
 
A la pequeña Safo jugando al escondite siempre le toca contar. Pero no suma diez, ni treinta, no suma cuarenta ni cincuenta. Ella cuenta en endecasílabos, cuenta hasta once, y vuelve a comenzar. Safo tamborilea con sus dedos, inventa versos que algún día descubrirán escritos en papiros que nos la devolverán inmortal.
 
A la niña Isadora, en cambio, el mar la tiene hipnotizada. Le gusta jugar descalza en la arena, le gusta mirar las olas durante horas. Sola, y en silencio, con el pelo suelto y sus vestidos vaporosos de finas telas envolviéndola, juega Isadora durante horas a mover sus manos y sus pies siguiendo el vaivén de aquellas ondas...
 

La pequeña Frida, que no puede moverse de su cama, juega a vivir más que las demás. Juega a mezclar los colores, juega a despistar con la pintura un destino de animal eternamente herido.
 

Las tres niñas solitarias tampoco juegan al escondite. Solas con su padre en aquel páramo las niñas Brontë inventan mundos de fantasía al que escapar. Miopes e inteligentes, cultas y pobres las niñas quieren relatarlos, quieren transformarlos en palabras escritas, aunque “las mujeres no debieran hacerlo”.
 
Mientras tanto, la niña Camille juega con la arcilla. La niña coja pero bella, la niña de carácter fuerte y voluntad tenaz se recrea en esculpir con fuerza y sentimiento. Esculpe con pasión piezas delicadas pero impresionantes, bellas en sus rasgos, intensas en su profundidad.
 
¿Y la pequeña Alma? Alma ya es una niña artista que juega a componer música. Y lo hace muy bien. La niña Alma tiene el adorno del talento, pero además es muy guapa y pasional. Y cómo juega con la música, cómo compone, aún tan pequeña ella.
  
Pero cuentan que hay ocasiones en que los cuentos de hadas no terminan bien para las niñas que esconden una pasión. Las niñas que crecen y se convierten en mujeres queriendo bailar, queriendo componer música, queriendo escribir, queriendo esculpir. Queriendo alejarse de lo considerado “normal”, de lo establecido. Y llegará un día que esas niñas tendrán que defender lo que les apasiona. La poesía, la danza y la pintura. La literatura, la escultura y la música. La vida para con esas mujeres mostrará sus garras y colmillos. La vida tendrá una punta afilada llena de ponzoña que se les clavará donde más les hiera, donde a punto esté de acabar con ellas.
  
Y quizás Safo vivió con sus compañeras en un clima demasiado distendido y propicio a todos los comentarios. Safo mujer quizás entendía la vida de forma diferente... quizás más femenino, quizás solo femenino.
 

Y esa forma revolucionaria de bailar y de vivir, esos temas de las danzas, la muerte o el dolor, tan alejados de los clásicos de duendes y trasgos, a Isadora años después le haría cosechar abucheos y polémicas.
 

Y nunca podrá jugar a correr Frida Khalo, en un principio dolorida por la polio y después por un accidente salvaje y cruel. Pasará casi toda su vida en la cama, pintando y pintando, mientras la enfermedad y los dolores van ganándole terreno a sus ganas de vivir.
 

Y las hermanas Brontë jugaron a imaginar, a escribir historias. Pero hubieron de hacerlo con disfraces, con opacos seudónimos y  malas críticas.
 

Y a Camile Claudel la vida fue resquebrajándole su interior de escultora. Se esforzaba por ser reconocida, por vivir de su arte, pero una sociedad conservadora, un amor demasiado amargo, unas críticas despiadadas por su condición femenina, fueron enloqueciéndola poco a poco
 

Y demasiado pasional, la joven y brillante Alma se enamoró de aquel maduro Gustav Mahler. Por apoyarle a él dejó a un lado su talento, esa carrera que tanto prometía en la música. Y después de Gustav, llegaron otros, pero también se volcó en el talento de cada uno de ellos, olvidándose del propio.
 
 
Y cuentan, siempre cuentan que aquellas mujeres terminaron por penar su pasión.
 

  Hubo que dejar pasar el tiempo. Dejar que el poso de los años fuera transformando a la sociedad y su moral. Dejar que subiera a la superficie lo que realmente importa.
 
Porque Safo en su viciosa isla se recreó en su vocación y en la belleza.
 
Porque Isadora, mito y carácter, rompió con las tradiciones y revolucionó la danza.  
 
Porque la fuerza de voluntad de Frida y sus ganas de vivir las fue plasmando en cada uno de sus pequeños autorretratos surrealistas.
 
Porque las hermanas Brontë escribirían obras maestras de la literatura universal.
 
Porque finalmente Camile y Alma serían reconocidas por su escultura y su música, independientemente  de las de sus amados.
 
 Cuentan que en algún lugar, a salvo del tiempo y el espacio, siempre están jugando unas niñas. Niñas sabias a quiénes el arte rescató del olvido.
 
©Rocío Díaz Gómez