"Observaba las fotografías. Sabía que Vivian estaba enfadada porque él había decidido que no irían a la fiesta, pero, sencillamente, no era capaz. Al final, había llegado el momento y se había visto obligado a buscar la verdad. Tal vez hubiera debido hacerlo muchos años atrás. Había pasado todos aquellos años con esa sensación de angustia alrededor del cuello. Temía las preguntas, las respuestas y todo lo demás. Las decisiones que había tomado llegaron a conformar la clase de persona que era. Y lo que ahora veía en el espejo no le resultaba muy honorable. Optar por vivir la vida con una venda delante de los ojos rara vez era honorable. Al final, se obligó a quitársela y a actuar en función de lo que veía."
Buscaba una lectura que me atrapara, un misterio que me tuviera ahí ligeramente enganchandilla, tipo hamaca, para estos días de verano, y topé con el último libro de Camila Lackberg: "El nido del cuco". La undécima entrega de la serie de esta escritora sueca.
En su día, cuando comenzó la autora con estas novelas negras ambientadas en Fjällbacka, ese nombre impronunciable, ya me leí algunos de ellos. No recuerdo bien si llegué a leerme cuatro o cinco. Lo que pasa es que ella ha seguido escribiendo y escribiendo y yo no me los he ido leyendo todos, solo alguno de vez en cuando para no perderle la pista. Pero la verdad es que con estos libros de Camila Lackberg una siempre llega a tiempo. Así da gusto. Al reengancharme, he retomado la vida de Ericka, la escritora protagonista, y rápido me he puesto al día de cómo va su matrimonio con el policía Patrick y sus niños, así como también la vida de su hermana Anna, mientras resolvíamos el misterio que nos ocupaba.
En este caso, la novela arranca con un fotógrafo que está a punto de hacer una nueva exposición con solo 16 fotografías, pero donde espera sacar a la luz algo oscuro que lleva mucho tiempo escondido. Y rápidamente nos encontramos con su asesinato. Por otra parte se celebra una fiesta de bodas de oro de un matrimonio de importantes figuras de la cultura. Son un escritor renombrado y una importante editora y a dicha fiesta están invitados Ericka y Patrick. Mientras transcurre la fiesta ocurre el asesinato del fotógrafo, que forma parte del círculo de amigos de los homenajeados desde siempre. Este crimen pronto sabremos que está relacionado con otro ocurrido en los años ochenta.
Y ya no os cuento más.
Se abordan en esta novela grandes temas como el de la libertad sexual, la fobia al "diferente", la ambición, la culpa, la venganza. También el de la lealtad dentro del matrimonio o el amor así como la maternidad, sobre todo éste último en lo que se refiere a la vida de los protagonistas.
Es una novela entretenida, que apenas me ha llevado tiempo leer. Aunque tengo que confesar que, raro en mí porque no soy yo muy buena descifrando crímenes, en este caso me veía venir bastante del final. Afortunadamente no del todo, pero hay cosillas que sí que me han parecido bastante previsibles.
Me ha gustado advertir el por qué del título también, aunque no se diga en la novela. Pero claro una vez sabida la historia también es bastante evidente, hacía mucho tiempo que no pensaba en ese "peculiar" pájaro y sus prácticas.
En cualquier caso, la lectura de la novela ha cumplido su función. De vez en cuando, está bien volver a esta serie de novelas. Se leen muy bien, es fácil sumergirse en ellas, después de tantas entregas es un poco como volver a casa, y suponen una lectura entretenida con su dosis de intriga, para cuando uno necesita simplemente evasión, sin recalar en historias truculentas ni demasiado violentas.