Un blog de literatura y de Madrid, de exposiciones y lugares especiales, de librerias, libros y let

martes, 25 de junio de 2013

Aula Hospitalaria Montepríncipe


El otro día asistí como improvisada espectadora a una entrega de diplomas muy especial.

Por razones que no vienen al caso últimamente he estado frecuentando un hospital. Otro día hablaremos del paso del tiempo dentro de un hospital, cómo cambia nuestra percepción. Pero hoy os quería hablar de cómo desde la ventana de la habitación dónde estábamos pudimos asistir a la fiesta fin de curso del "Aula hospitalaria Montepríncipe". Porque se hizo, ya veis en las fotos, en el jardín de detrás del hospital y al aire libre

Decían que hacía un año que comenzaron a funcionar. Celebraban la entrega de diplomas a los niños que habían asistido durante este curso a esa escuela hospitalaria. Niños con cáncer. Niños que se levantaban a recoger su diploma con su cabecita tapada con alguna gorra o sombrero, o que incluso arrastraban los goteros tras ellos. Desde algunos que no tendrían un año hasta otros que estaban en bachillerato. Jo. Se te encogía el corazón.

Decía la presentadora que cada día era único porque cómo nunca sabían  cuántos alumnos iban a ser, pues esperaban a ver quiénes estaban y luego ya empezaban a dar clase. Durante los recreos visitaban a los niños que estaban en cama. Por supuesto se trata de normalizar su vida lo máximo posible. De que asistan al cole todos los días, al igual que van sus hermanos. Pusieron algunos vídeos de cómo transcurrían sus días. Y al final actuó un grupo de música bastante bueno que nos encantó. Era un grupo que tocaba blues y rock, y que comenzó el concierto con una versión de "Susanita tiene un ratón". Uno de mis hermanos bajó a verles más de cerca, y de paso hacer estas fotos, y le regalaron uno de sus discos y le dijeron que actúaban en "Clamores".

Mientras actuaban algunos niños se volvían con sus padres a sus habitaciones, pero otros, imagino que los que estaban mejorcitos, jugaban y saltaban con los monitores, perdiendo los sombreritos con la alegría del juego...

En fín, que fue una entrega de diplomas muy, muy especial. Qué asco de enfermedades. Qué bueno que existan éstas aulas hospitalarias.

 

domingo, 23 de junio de 2013

Se acaba el finde, se acaba el cuento...



Joan Margarit en el programa de Pepa Fernández



Nunca sientas piedad por lo que has sido
pues la piedad es demasiado efímera
no da tiempo a construir nada sobre ella...


"Se pierde la señal"
Margarit


Joan Margarit acaba de publicar en castellano su último poemario 'Se pierde la señal' (Visor Libros, 2013), una obra que define el propio autor como "autobiografía en verso" y de la que se desprende que "para ser feliz no hace falta esperanza". 

En 2008 recibió el Premio Nacional de Poesía por su obra 'La casa de Misericordia'.Pero tienen más de treinta obras publicadas, tanto en castellano como en catalán.

Dice Margarit en el Epílogo de este libro que “la poesía es una herramienta para gestionar el dolor y la felicidad”
 
Ha estado este sábado, 22 de junio de 2013, en el programa de Pepa Fernandez "No es un día cualquiera" presentándolo. Os copio el vínculo de la entrevista por si queréis echarle un vistazo. Ha estado muy bien. Os la recomiendo.

"La poesía hablando de lo mismo, siempre dice cosas nuevas",

http://www.rtve.es/alacarta/audios/no-es-un-dia-cualquiera/dia-cualquiera-joan-margarit-poesia-hablando-mismo-siempre-dice-cosas-nuevas/1890069/

miércoles, 19 de junio de 2013

Patricia Esteban Erles: "No hay nada como quedarse a solas..."

 
 
No hay nada como quedarse a solas
con una historia por contar.
Patricia Esteban Erlés




Patricia Esteban Erlés (Zaragoza, 1972) es Licenciada en Filología Hispánica por la Universidad de Zaragoza, ha publicado hasta el momento cuatro libros de cuentos. El primero de ellos, Manderley en venta (2008), obtuvo el Premio de Narración Breve de la Universidad de Zaragoza en 2007 y fue seleccionado en el V premio Setenil, como uno de los diez mejores libros de relatos editados en España en el año 2008. Su segundo libro, Abierto para fantoches (2008), ganó el XXII Premio de Narrativa Santa Isabel de Aragón, Reina de Portugal y ha sido elegido como lectura de la Guía de Verano del Seminario de Bibliotecas Escolares de Zaragoza 2009. En 2010 publica su tercer libro de cuentos, Azul ruso, en Editorial Páginas de Espuma, que también estuvo seleccionado como uno de los candidatos al premio Setenil. El último libro de cuentos que ha publicado se llama "Casa de Muñecas".

martes, 18 de junio de 2013

El "telefón" y "El caballo no come ensalada de pepino" en la exposición: "La Historia de las Telecomunicaciones"


Se me van acumulando los temas y de pronto doy con alguna carpeta de fotos que se me había ido quedando atrasada y de la que tenía pendiente hablaros.

Eso me ha ocurrido con esta exposición que vi hace semanas y que me pareció interesante. Está en el edificio de la Telefónica que hay dedicado a exposiciones en la Gran Vía de Madrid, el llamado Espacio Fundación Telefónica. En la segunda planta hay una exposición titulada "Historia de las telecomunicaciones".

Es bastante curiosa. Pretende mostrarnos la evolución de la comunicación a distancia, subrayando la importancia de la telefonía. 

La exposición tiene varios bloques, uno de ellos dedicado a la historia. En ella nos dice que la palabra teléfono viene de un término alemán "Telefón", término con el que Johann Philipp Reis, un profesor autodidacta al que le interesaba mucho la transmisión de sonidos, bautizó a su nueva máquina: una especie de oreja de madera que hablaba y que hoy todos conocemos de sobra como teléfono. Con ella quiso transmitir la frase "El caballo no come ensalada de pepino". Curioso ¿verdad? Una frase que en alemán es dificil de entender acústicamente pero que serviría para probar que su voz podía ser entendida al otro lado... El experimento fue un poco desastroso porque no se entendió la frase, aunque llegó el sonido... Y no tuvo la repercusión que debía haber tenido.

Luego llegaron Antonio Meoucci y el archiconocido Bell, cuya autoría del teléfono ya es un poco dudosa pero que en cambio se llevó toda la fama...

Bueno pues con detalle de todo ésto y de mucho más nos habla esta exposición.

Y además nos deja una selección de 50 piezas -desde los telégrafos de finales del siglo XIX a los móviles de última generación-, distribuidas cronológicamente en siete bloques. 

Os dejo con varias fotos de los teléfonos que allí se pueden ver.




 En el año 1956 se empezado a hacer estos teléfonos de arriba. De baquelita. Al principio solo podían ser negros, luego ya con el tiempo también blancos.


 En el año 1966 se comenzaron a poner cabinas telefónicas en las calles. Antes solo los había en lugares públicos como restaurantes, hoteles, locutorios. Al principios se utilizaban con fichas que previamente había que adquirir. Luego ya se empezaron a utilizar con pesetas.


¿Os acordais de éste teléfono de aquí abajo?




Bueno, pues ya sabéis, si pasais por allí y os apetece no dejéis de visitarla.

http://espacio.fundaciontelefonica.com/exposiciones-2/historia-de-las-telecomunicaciones-2/

Espacio Fundación Teléfonica

Fuencarral 3
28004, Madrid

Horario

De Martes a Domingo de 10:00 a 20:00 h.



lunes, 17 de junio de 2013

La crisis y sus palabras


Hoy quería hablar del lenguaje. Ya sabéis que en este blog abordamos muchas veces las distintas clases de lenguaje que existe. La riqueza que guarda.

Tenía pendiente con vosotros hablar de nuestro lenguaje actual. Más exactamente de la cantidad de palabras que utilizamos ahora que no usábamos hace cinco, ni diez años. Vamos, ni dos. Eran términos completamente desconocidos para nosotros, pero que nos dejado esta crisis.

Porque sí, la crisis, la maldita crisis, nos ha quitado muchas cosas pero resulta que nos dado muchas palabras nuevas.

En mayo, hace un mes, tuvo lugar un seminario que ha tratado sobre este tema. Me estoy refiriendo al Seminario Internacional de Lengua y Periodismo, que organizó la Fundación del Español Urgente (Fundéu BBVA) y la Fundación San Millán los días 16 y 17 de mayo.

Fue un seminario inaugurado por la princesa de Asturias y cuya lección inaugural corrió a cargo del catedrático de Metafísica y exministro de Educación Ángel Gabilondo.

En él se habló de todas estas palabras que quería yo dejaros aquí. Pero para no alargar demasiado esta entrada, solo me gustaría compartir con vosotros una muestra de ellas:

Términos directamente llegado desde la economía:

Prima de riesgo, deuda soberana, rating, recesión…

Otros creados en la actualidad como:

Mileurista, precariado, austericidio...

"Austericidio": Normalmente mal empleado porque se emplea para hacer referencia a la ‘muerte por austeridad’, cuando en realidad significa ‘muerte de la austeridad’.

Otros han ampliado su significado como:

- Deshaucio. Antes solo se aplicaba a los inquilinos y ahora también a los propietarios.
- Indignados: Como nombre de un colectivo
- Marea: Como un tipo de protesta.
- Acampada : Otro tipo de protesta

Y luego están los eufemismos, que se han hecho los Reyes del lenguaje de los políticos:

- Reformas o ajustes en lugar de recortes;
- Crecimiento negativo  en lugar de recesión.
- Devaluación competitiva de los salarios en lugar de bajadas salariales.
- Novedad tributaria o cambios en la ponderación fiscal en lugar de subida de impuestos.

Hay muchas más, ya lo sé. Pero son demasiadas para una entrada en el blog. Solo se trataba de recoger una muestra de ellas para tomar de nuevo conciencia de cómo cambia constantemente el lenguaje. De lo permeable que es. Es un tema interesante ¿verdad?


sábado, 15 de junio de 2013

"Mi hermana vive sobre la repisa de la chimenea" de Annabel Pitcher





"Mi hermana Rose vive sobre la repisa de la chimenea. bueno, al menos parte de ella- Tres de sus dedos, su codo derecho y su rótula están enterrados en una tumba de Londres. Mamá y papá tuvieron una discusión de las gordas cuando la policía encontró diez pedazos de su cuerpo. Mamá quería una tumba que pudiera visitar. Papá quería incinerarlos y esparcir las cenizas en el mar. en todo caso, es lo que me ha contado Jasmine. Ella se acuerda más que yo. Yo sólo tenía cinco años cuando ocurrió aquello. Jasmine tenía diez. Era la gemela de Rose. Y para mamá y papá, lo sigue siendo."


¿Cómo no leer un libro que comienza con éste párrafo?

Pues sí. El último libro que me he leído ha sido "Mi hermana vive sobre la repisa de la chimenea" de Annabel Pitcher.

Lo descubrí hace dos años en la Feria del Libro de Madrid. Sin embargo en esa ocasión no me lo compré. Ya llevaba yo preparadita mi lista de libros que quería, y no me dejé seducir por el título tan sugerente que tenía, por esa portada llamativa ni por la recomendación de una librera que le hacía mucha publicidad.

Sin embargo pasado un año en una ocasión en que iba a comprar unos libros para uno de mis hermanos le ví y me dije: ¡Anda si es éste libro! y entonces sí, entonces me quise hacer un regalo. Porque la verdad es que me ha gustado tanto, que ha sido un regalo.

Y eso que tuve que hacer dos intentos para leerlo. Está claro que hay un momento para cada libro. Y la primera vez que comencé a leerlo, no acabó de engancharme lo suficiente porque de pronto apareció otro en apariencia más entretenido y le abandoné para otra ocasión. Peeeero la segunda vez que lo cogí y seguí leyendo por dónde lo había dejado, recuerdo que era el capítulo 4, ya me robó totalmente la voluntad y no pude parar de leerlo hasta que lo devoré.

Cuánto me ha gustado, la verdad. Me ha gustado mucho. Qué agradables me han resultado los trayectos del metro en su compañía. Incluso había veces que hasta me molestaba haber llegado a mi estación porque tenía que dejar de leerlo y no podía seguir sabiendo de la vida de Jamie...

Pero bueno que me lío y ni os cuento de qué va. El argumento es el siguiente: Poco antes de cumplir diez años, el pequeño Jamie se va a vivir al norte de Londres con su padre separado, su hermana adolescente Jasmine y su gato Roger, para empezar desde cero. Han pasado cinco años desde la muerte de Rose, la gemela de Jasmine, en un atentado terrorista islámico en Londres. Sus padres no han conseguido superar el dolor y parece que Jasmine tampoco: se ha teñido el pelo de rosa, se ha hecho piercings y ha optado por no comer. La familia se ha venido abajo. Pero en todo ese tiempo Jamie no ha derramado una sola lágrima. Para él Rose, cuyas cenizas reposan en la repisa de la chimenea, no es más que un recuerdo lejano. Le interesan mucho más su gato Roger, la camiseta de Spiderman que le han regalado por su cumpleaños o que su padre no se entere de que se ha hecho amigo de una niña musulmana paquistaní.

El tema es la pérdida, ya veis. O mejor dicho, cómo se enfrenta una familia a esa pérdida de alguien querido por un atentado.

Los personas están muy bien perfilados. Los padres, la hermana Jasmine, Jamie, Sunya... Todos los personajes son absolutamente creíbles. Tanto los adultos como los niños están muy bien caracterizados.

La historia está ambientada en la actualidad, y en el norte de Londres.

Y está contada por el niño Jaime. Contada en primera persona desde su punto de vista infantil que está muy bien reflejado. La autora ha sabido ponerse muy bien en la piel de ese niño que te cuenta su vida con humor y pena. Sí, como la vida misma. Qué bien, creo, ha sabido reflejar la autora los sentimientos de ese niño.

Hay diálogos, pero todos escritos en estilo indirecto, desde su voz infantil.

¿Que más os puedo decir? Que es una novela que yo he leído con una sonrisa en los labios casi todo el tiempo. Una historia que te conmueve. Una historia emotiva y triste. Porque es el resultado en todos los miembros de una familia de un atentado brutal. Pero la autora consigue que te encariñes con su personaje principial, que quieras ir con él de la mano viviendo en su persona cómo va discurriendo su vida. Cómo ya os he dicho es una historia muy creíble, porque están muy bien perfilados todos los personajes: el niño, la adolescente y ambos padres que reaccionan de forma muy diferente.

Es una historia, desde mi opinión, muy bien llevada por la autora. No es un tema fácil el que propone, ni tampoco un narrador fácil, y sin embargo creo que sale de lo más airosa del doble reto. Es una historia original y emotiva. Y el final está muy bien, imaginado con mucha coherencia con respecto al resto del argumento y muy logrado.

Vamos, que desde luego yo os la recomiendo. Y si en el primer intento no os llena, dejadla, pero por favor, haced como yo, volver a ella, porque merece mucho la pena.