Un blog de literatura y de Madrid, de exposiciones y lugares especiales, de librerias, libros y let

viernes, 9 de noviembre de 2012

Letreros de la calle en ¡Granada!



Hoy os quería traer otra selección de letreros de la calle, nombres de locales, anuncios y demás para nuestra colección. Pero ésta la fui recogiendo en mi viaje a Granada, cuando mi lectura. Quería ofreceros una muestra variada de ellos, porque la verdad es que me traje en la cámara un montón, de todo tipo, pero tampoco es cuestión de bombardearos. 

Elijo unos pocos, a ver qué os parecen. 

El que encabeza esta entrada estaba en pleno centro de Granada en una zapatería. Y me gustó el juego de letras ¡desinIVAse! Qué bueno... Cómo me gustan estos malabarismos con las letras. Que se note que se lo han pensado... Muy bien.

El de debajo también os lo quería enseñar por curioso. ¡Fijaos bien! Actual, actual, ¡Ay la prima...! el juego que da. Y nunca mejor dicho, porque este cartel estaba en una administración de lotería. También por el centro de Granada, por la zona comercial de cerca de la Catedral.



Este de abajo ¿Cómo no traérmelo? Apartamentos ¡el que te dije!. ¡Claro! ¿Cuales van a ser si no? ¡El que te dije...!
Este estaba por la zona de el Bañuelo.


Estas fotos que quedan las tomé en la zona del Albaycin. Este Restaurante de debajo...¿Cómo no fotografiarlo? "El aljibe del Poeta". Aljibe, qué palabra tan bonita...


O ésta: "Sueños de Agua" un nombre muy, muy sugerente, muy poético para una tienda de artesanía.


Y por último quería también mostraros este anuncio que estaba en varios sitios del Albaycin. Dos personas que buscan a un "compi" para su piso ¿Pero no me digais que no se han trabajado su anuncio? Me gustó mucho. Y espero que a Marina y a Felipe no les importe que os lo haya traído, a ver si con un poco de suerte hasta les ayudamos en su búsqueda de compañero...




¿Que tal? ¿Os ha parecido una muestra variada?

jueves, 8 de noviembre de 2012

Cibercondría, una nueva palabra



Me llamo Rocío Díaz Gómez y soy cibercondríaca.

Pero poco ¿eh?

Lo suficiente para ponerme mala con lo que leo y dar corriendo a "escape"... y procurar olvidarme.

Bueno yo ya me he confesado, que no me habéis visto pero me he puesto mi mano tapándome los ojos y todo... ¿Alguien más quiere confesarse conmigo? Mirad que ésto de confesarse "a pachas" une mucho...

Bueno bromas aparte, hoy quería hablar de la palabra "Cibercondría". 

Una palabrota compuesta, efectivamente, de ciber e hipercondría. Un neologismo, una nueva palabra que no está aún en el diccionario de la Real Academia, pero que ya se utiliza muy a menudo.

Buscamos en la Rae hipocondría y encontramos:

hipocondría.
(De hipocondrio).
1. f. Med. Afección caracterizada por una gran sensibilidad del sistema nervioso con tristeza habitual y preocupación constante y angustiosa por la salud.

Entonces unimos esa preocupación constante y angustiosa por la salud, al mundo virtual ( o al prefijo "ciber") con el que estamos tan familiarizados y nos sale: Cibercondría. Es decir, la costumbre de diagnosticarse en la red.

¿Cuántos no vamos en cuánto nos notamos algo diferente en el cuerpo corriendo al Santo Google a ver qué nos dice...? Es bastante habitual y parece ser que eso ha aumentado la automedicación. 

¿Ordenador mío, tú que todo lo sabes, qué me pasa?

Bueno, pues a un mundo moderno, una palabra moderna: Cibercondría.

El lenguaje es algo vivo, muy vivo, que no para de cambiar. Está claro.


Os pego de nuevo el vínculo de otras palabras que hemos visto en este blog, por si os apetece volver a recordarlas:

Tanga, vesania, ahogadillas, intríngulis, mamotreto, en un periquete, tripisí, telele, arrechucho, deriva, derrota... muchas, incluso ¡infoxicada! otra muy parecida a la de hoy.

En fín, que ya hemos visto unas cuántas, aquí debajo las tenéis:

http://www.rociodiazgomez.blogspot.com.es/search/label/Mis%20palabras


martes, 6 de noviembre de 2012

Mitografías: Mitos en la Intimidad. Exposición de fotografía



"A los seis años pretendía ser cocinero, a los siete quería ser Napoleón. Desde entonces mis ambiciones no han hecho más que acrecentarse."
Dalí


¿Me dejáis que os recomiende una exposición?

Anda.. Venga...

Es de fotografías. De muuuchas fotografías. Y es de 10 mitos del siglo XX.

¿Ya habéis ido? Imagino que sí, que muchos de vosotros sí.



Mitografías: Mitos en la intimidad.

Pues estuve el sábado pasado y me gustó mucho. Me pareció muy entretenida. Y os la recomiendo a los que aún no la hayais visto.

240 fotografías íntimas, muchas de ellas inéditas, entre veinte o veinticinco de cada uno de los protagonistas de la exposición: 
Gestos, escenas de amistad, de familia, vida cotidiana. 

10 personas, diez personajes, que influyeron mucho en el siglo XX, que fueron contemporáneos y estuvieron unidos por el arte (Dalí, Picasso, Cela, Hemingway, María Callas, Chaplin), por la ciencia (Marie Curie y Einstein) o por la política (Gandhi, Churchill).


"A los doce años yo dibujaba como Rafael, el resto de mi vida he intentado aprender a pintar como un niño."
Atribuido a Picasso.


Se lleva un ratito verla, porque claro son bastantes fotografías, pero está curiosa, la verdad. Merece la pena. Me resultaba muy interesante.



Me gustan a mí las exposiciones que suele hacer la Fundación Canal (de Isabel II), tanto en la calle Mateo Inurria, como en Santa Engracia, suelen ser bastante interesantes. Ahora la Fundación ha cumplido ya su décimo aniversario. En este blog en la pestaña de "Sala de Exposiciones Canal Isabel II" he dejado ya reseña de unas cuántas.

En este caso, os adjunto el vínculo de la página de la Fundación Canal, porque hay muchas fotografías de la exposición que podéis ver, y también hay un vídeo que no está mal donde el Comisario de la Exposición José María Díaz-Maroto cuenta de qué va.

http://www.fundacioncanal.com/6368/ficha-mitografias/?par=exposiciones





Fundación Canal
C/ Mateo Inurria, 2

Entrada libre

A partir del 25 de octubre de 2012 y hasta el 5 de enero
Laborables y festivos: 11:00 h. a 20:00 h.
Miércoles: hasta las 15 h.

domingo, 4 de noviembre de 2012

"Se que me quieren porque me cuentan cuentos" Un relato de Rocío Díaz




Llueve, llueve sobre Madrid sin prisa, sin pausa, sin remedio.

Hay tantas cosas que a uno le apetece hacer cuando llueve: mirar por la ventana solo por ver deslizarse el agua, dejarse hipnotizar por las frágiles gotas que se tambalean bajo la barandilla. Leer en zapatillas. Escribir. Tejer. Ordenar papeles. Quedar con algún buen amigo ante un café humeante. Conversar. Arroparse...

Os dejo con uno de mis relatos por si os apetece arroparos con él. Es de lluvia, de cuentos, de un día como hoy. Me lo publicaron en el Diario de León, como finalista de un premio de relatos, en junio de 2008.

Tal vez ya lo haya colgado del blog, pero ni tan siquiera voy a comprobarlo. Qué importa, hoy, 4 de noviembre de 2012, lo he vuelto a releer y quería compartirlo con vosotros...





“Sé que me quieren
         porque me cuentan cuentos”



Mi Sole y yo hoy nos hemos sentado a inventar un cuento.

Estábamos las dos solas en casa. Silenciosas, aburridas, las dos mirando por la ventana. Llovía, llovía como si todas las nubes del mundo se hubieran puesto de acuerdo para deshacerse a la vez en una lluvia tormentosa y enfadada que se desplomaba en chaparrón sobre nuestro ánimo, empapuchándole como a papel mojado. Por eso le sugerí a mi Sole lo del cuento. Ella, al escucharme, me miró con los ojos brillantes pero enseguida ofreció una excusa para ni intentarlo: “Pero si yo no sé inventar cuentos...” dijo acabando fulminantemente  con mi sugerencia.

Pero yo conozco a mi Sole, y sé que no es fácil sorprenderla, ni entretenerla, ni convencerla para que abandone su actitud taciturna y su talante solitario. Por eso necesito disfrazarme con un entusiasmo que yo misma siento muy lejano, pero que sé que para sobrevivir a aquella tarde las dos necesitábamos como al agua que no dejaba de caer y caer y caer...

“Venga, le dije, algo se nos ocurrirá...” “No, mejor nos quedamos aquí viendo llover...” A mi Sole no le gusta esforzarse, ni colaborar, ni implicarse en nada que no sea la mera contemplación y sus perifrásticas circunstancias. “Yo no sé inventar cuentos...” decía una y otra vez excusándose sin dejar de mirar la lluvia. Así que tuve que tirar de ella para separarla de la ventana, tuve que arrastrarla hasta la salita y desplegar ante ella tantas alternativas como una cola de pavo real.

“Ya, ya lo sé..., dije con paciencia mientras la empujaba a sentarse a mi lado, por eso... Podríamos hacer una guija e invitar a los hermanos Grinn... ¿Qué te parece?” “No, no -dijo mi Sole- que sus personajes eran malos, muy malos ¿O no te acuerdas de Barba azul o la madre de Blancanieves...?” “Bueno –contesté armándome de paciencia- pues hacemos una guija e invitamos a Andersen... En sus cuentos había buenos y menos buenos, nunca malos...” “No, no -dijo entonces mi Sole- Andersen era poco original, solo se inspiraba en relatos populares...” “Bueno -contraataqué yo- pues entonces invitaremos a Perrault...” “No, no -dijo también mi Sole- Perrault era demasiado moralin, como los Grinn...” y sin esperar respuesta se levantó y otra vez se fue a mirar como llovía. Porque seguía lloviendo, lloviendo con una lluvia cabezona, indiferente a mis esfuerzos, una lluvia ingrata que casi parecía reírse de mis frustrados intentos por arrastrar a mi Sole lejos de ella...

“Vale... –me rendí yo- nada de guijas. Pero entonces nosotras mismas nos inventaremos a nuestros personajes...” “Que cosas tienes... ¿Pero es que no ves que ya están todos inventados?” Me contestó ella sin mirarme justo antes de que sonara un trueno que puso el mejor punto final a su interrogación retórica y amenazó con aplastar por completo mi fingido entusiasmo. ¿Ya están todos inventados? Y sin hablar me acerqué otra vez a su lado y muy cerquita de ella yo también me quedé contemplando la lluvia... ¿Todos inventados? Parecía que la tormenta se iba alejando, aún sonaban truenos, aún algún que otro rayo parecía iluminar el cielo gris, pero lo hacían cada vez de forma más tenue, cada vez los truenos parecían escucharse más en la lejanía... Pero la lluvia, como si quisiera demostrar que estaba allí, no dejaba de caer, constante, copiosa, infatigable, aplastante, odiosa.

“Pues... si ya están todos inventados, inventaremos otros... o mejor los reinventaremos...” dije yo con terquedad ante esa lluvia odiosa, fingiendo renovados ánimos, plantándole cara a esa enemiga húmeda que se estaba llevando a mi Sole a su terreno pantanoso y melancólico. “Pero ¿Qué dices?...” contestó ella. “Lo que oyes  -atajé yo-”. Y tirando de nuevo de ella me la volví a llevar conmigo hasta la salita, la volví a obligarse a que se sentara a mi lado y obligué a su atención a que se solidarizara con mi disfrazado buen humor.

Y decidí seguir marcándome faroles, al fin y al cabo, me dije, eso es inventar cuentos. Y aprovechándome de que mi Sole estaba desprevenida empecé a atacar: “Que te parecería..: ¿Un hada madrina sacándose un sobresueldo como majorette? ¿Una bella durmiente con insomnio...?¿Una maquina de la verdad llamada Pinocho? ¿Una princesa embarazada...? Mi Sole, no sé si apabullada o sorprendida por el bombardeo, apenas tenía tiempo de protestar... ¿Una blancanieves angoleña? ¿Una sirenita reivindicando un plus por humedad? ¿Un príncipe rosa...?...

De vez en cuando mi Sole amenazaba con levantarse para ir a mirar otra vez la lluvia que se empeña en seguir cayendo, insistente, pertinaz, incansable, tranquila y constante. Pero desde mi sillón yo seguía diciéndole: “Un soldado de plomo haciendo la prestación social, un patito feo con gripe aviar, el lobo de los cerditos aquejado de poca capacidad pulmonar, una cenicienta con el síndrome de Diógenes...

Y al final, hasta parecía que mi Sole me prestaba atención, parecía que por momentos olvidaba la lluvia. Jugamos al escondite con los personajes de siempre, al rescate con los que nos inventamos, al balón prisionero con los argumentos... Hasta que perdí de vista a mi Sole. “¿Sole? Sole que al escondite ya hemos jugado...”

Al principio me inquieté, pensé que de nuevo estaría mirando a esa lluvia ladina y sigilosa que espiaba nuestros cuentos. Pero cuando llegué a la ventana, allí no estaba. No estaban ni mi soledad ni la lluvia. Había dejado de llover y no me había dado ni cuenta. Solo quedaban titiritando algunas gotas colgando de las barandillas, balanceándose temblonas, a punto de caer, derrotadas ante un sol que comenzaba a reflejarse, a sacar brillos, a hacer muecas a un pavimento empapado.

Mi Sole, mi soledad se había ido... Y yo, quizás, y a pesar de ella y de la lluvia, hasta fui capaz de inventar un cuento, uno que no empezó nunca pero que puse a tender en estos folios.
 
©Rocío Díaz Gómez


sábado, 3 de noviembre de 2012

La casa de la Familia Rosales en Granada




"En este momento no hay en casa de los Rosales ningún hombre. Luis y José están en el frente; Antonio, Gerardo y su padre se encuentran en diferentes puntos de la ciudad, y Miguel está de servicio en el cuartel de Falange. Así que la señora Rosales tiene que enfrentarse sola con Ruiz Alonso. Se opone rotundamente a que se lleve al poeta. ¿Con qué derecho se presenta en una casa falangista una persona para ella desconocida? ¿Y qué quieren con García Lorca? Según Esperanza Rosales, que escucha aterrada la conversación, Ruiz Alonso declara categóricamente que al poeta le achacan el contenido de sus escritos. Supone que las autoridades querrán interrogarlo por ese motivo. (...)
Al despedirse Federico de Esperanza, susurró, según ella: "No te doy la mano porque no quiero que pienses que no nos vamos a ver otra vez". 
Luego salió a la calle acompañado de MIguel Rosales y de Ramón Ruiz Alonso..."

Pág. 242 y 243
Cuatro poetas en guerra
Ian Gibson


Ya sabéis que he estado en Granada el fin de semana pasado. El motivo fue la lectura que hice allí para EncuentrosLiterarios, pero ya que estaba aproveché para visitar de nuevo la ciudad. No es la primera vez que paseo Granada, pero siempre queda algo por ver.

Recordareis que el año pasado fui con algunos compañeros de mi tertulia literaria a pasar un fin de semana que dedicamos a Lorca. 


 Esta vez volví a visitar la primera de las anteriores, pero además me acerqué a dónde vivió sus últimas horas, en la casa de la familia Rosales. Encabeza esta entrada una foto del hotel que hay ahora allí, El Hotel Reina Cristina.

La chica que estaba en recepción, muy amablemente, nos contó de nuevo un poco la historia que ya todos conoceréis, que no estaba ninguno de los hijos en el momento en que vinieron a buscarle, y que la madre se enfrentó a ellos (arriba os he copiado también un fragmento del libro de Ian Gibson donde se cuenta).

Quería dejaros también con una foto del interior del hotel, que parece ser que es lo único que se conserva de la primitiva casa, el patio interior. 

Y también una foto de la puerta por la que sacaron a García Lorca (según esta misma chica de recepción), que está en un lateral.

Patio interior de la casa de Los Rosales en Granada. Ahora recepción del Hotel Reina Cristina




Puerta lateral del Hotel Reina Cristina, o puerta por la que se llevaron a Lorca
Granada, 26 de octubre de 2012

Si queréis volver a echar un vistazo a todas las casas de escritores que ya llevamos vistas en el blog, son ya unas cuántas, podéis hacerlo pinchando en el vínculo de debajo:

viernes, 2 de noviembre de 2012

José María Herranz, poeta, tiene un nuevo blog y disco de poemas




Me gusta contaros de algunos blogs que comienzan a existir. 

Hace poco tiempo os hablé del nuevo blog de Piluca Martinez de Velasco, cuya temática es el viajar con animales de compañía (http://happypilunana.blogspot.com.es/), anteriormente os hablé del blog de otro amigo:  Xosé Cuns "No me pidan calma", un blog social sobre cooperación: http://blogs.lavozdegalicia.es/nomepidancalma/ 

Pues bien, hoy os quería hablar del nuevo blog de José María Herranz

En otras ocasiones ya os he presentado su trabajo a raíz de algunas lecturas poéticas suyas a las que he asistido en diversos lugares de Madrid como El Ateneo, Libertad 8, o la Asociación de Escritores y Artistas Españoles:

Poeta y compañero de tertulia literaria, Jose María ya tenía un blog también como editor, su otra faceta: http://poetacabra2.blogspot.com


Pero además Jose María Herranz es miembro del Círculo de Bellas Artes de Madrid, del Ateneo de Madrid y de la Asociación de Escritores y Artistas Españoles. Es autor de numerosos libros de poesía y relato. 

A menudo han adjetivado su poesía, como social, metafísica, mística, y dionisíaca. En cualquier caso os puedo asegurar que es una poesía profundamente comprometida y muy elaborada. Este otoño ha sacado un disco con una selección de poemas de tres libros suyos que se titula "Amargo despertar". Un disco de poesía sinfónica, donde el compositor catalán Andreu Jacob ha musicado esos poemas. Además el disco cuenta con la colaboración de los poetas Luis Antonio de Villena y María Esperanza Párraga Granados, que también recitan en el mismo.

Pero de su disco y muchas más actividades literarias en las que está implicado, os cuenta él mismo en su nuevo blog, un espacio que ha decidido abrir para dar a conocer su obra literaria:

Os recomiendo que lo visiteis. Os gustará más o menos su poesía, pero es indiscutible que Jose María Herraz ha encontrado su voz poética y no deja de profundizar en ella. No os dejará indiferentes.

http://josemariaherranzcontreras.blogspot.com


jueves, 1 de noviembre de 2012

El Cementerio de la Sacramental de San Justo y los escritores


Como hoy es el día de Todos los Santos, 1 de noviembre de 2012, y la tradición es visitar los cementerios, limpiar las lápidas, poner flores a nuestros fallecidos, hoy vamos a hablar un poquito de éste tema.

En concreto os quería traer la foto de arriba. Me la envió uno de mis hermanos por si la quería poner en el blog. Es del Cementerio de la Sacramental de San Justo (aunque en realidad se llama Cementerio de la Sacramental de San Justo, San Millán y Santa Cruz) está en Madrid, pegado al Cementerio de San Isidro, en el Paseo de la Ermita del Santo.

Si os interesa este cementerio, Juan Antonio Pino, actual gerente que lleva alrededor de treinta años trabajando en este lugar, ha escrito un libro que recoge la historia de los últimos ciento cincuenta años de la Sacramental , bajo el título “Cementerio de la Sacramental de San Justo de Madrid”, cuya fundación data  del siglo XVI. Por Real Orden de 4 de noviembre de 1845 se autoriza a construir un Cementerio, cuya obra se llevó a cabo con fondos de la misma, en el terreno de su propiedad, conocido con el nombre de Cerro de las Animas.

Pero yo os lo quería traer porque en él, están enterrados importantes personajes literarios del siglo XIX como Larra, José de Espronceda, Bretón de los Herreros, Ramón de Campoamor, los hermanos Alvarez Quinterio, Tamayo y Baus... aparte de otros importantes artistas.
 
Según la Wikipedia  en 1902, la Asociación de Escritores y Artistas construyó el panteón donde resguardar e ir agrupando las cenizas de los personajes más ilustres en las letras y las artes. Este panteón fue diseñado por Enrique María Repullés y Vargas. Los primeros en ocupar este panteón fueron José de Espronceda, Mariano José de Larra y Eduardo Rosales. Posteriormente, se han inhumado en este lugar los restos de Leandro Fernández de Moratín, Ramón Gómez de la Serna, Maruchi Fresno, Carmen Conde, Luis Escobar y Rafaela Aparicio, entre otros.

Me ha parecido que qué mejor día, el de hoy, para recordar que en este cementerio están los restos de muchos e importantes escritores.