Un blog de literatura y de Madrid, de exposiciones y lugares especiales, de librerias, libros y let

lunes, 11 de abril de 2016

"Cielo Líquido" de Lola Andrés



Tengo pendientes varias entradas, y no veo el momento de sentarme tranquila a contároslas. A ver si voy poniendo remedio y la fila va menguando. Aquí en Madrid estamos acostumbrados a ponernos a hacer fila a la primera de cambio (a veces ya hasta sin preguntar si la tienes que hacer o no), es lo que tiene ser tantos, pero no me gusta mucho cuando el blog se me contagia de esta fiebre del lugar. Así que, como aquí depende de mí, voy a poner remedio. Ya.

Tenía que contaros que el pasado 30 de marzo, miércoles, se presentó en Madrid el poemario "Cielo Líquido" de Lola Andrés. 


 
El último poemario de esta poeta valenciana podríamos decir que es una búsqueda. Búsqueda del verso más depurado, búsqueda de la luz, de la certeza, del fragmento, para finalmente llevar a cabo una búsqueda de la identidad. Para ello hay diferentes tipos de poemas en este libro, poemas más intimistas, poemas de compromiso como los tres sobre Nómadas, o también hay poemas con reminiscencias familiares (más adelante os copiaré uno que a mí me gustó mucho) entre otros.

Este poemario de Lola Andrés, que vino desde su tierra a Madrid a presentárnoslo está estructurado en dos partes, a las que anteceden un poema. Y se cierra con otro poema epílogo.

La presentación del día 30 de marzo corrió a cargo del poeta Javier Díaz Gil, también coordinador de nuestra tertulia Rascaman. En su blog podéis leer la presentación que hizo:




La portada del libro es de la artista Eva Hiernaux:

Y la presentación se llevó a cabo en la Champanería Pandora, una champanería librería, un lugar mágico para los que gustamos de los libros, en pleno centro de Madrid, en Las Vistillas. En éste vídeo la autora habla del sitio de la presentación, que tampoco conocía ella porque como no es de Madrid... Nos había confesado antes de comenzar la lectura que le asustaba un poco el público que vendría porque, según ella, en Madrid tenemos tanta oferta cultural... Y es cierto que la hay, como también es verdad que yo estuve en una presentación anterior suya en Madrid, y hubo poco público. Pero en esta ocasión, el pasado día 30 de marzo, sí que acompañamos a la poeta un grupito considerable de personas. Y eso que hacía una tarde primaveral preciosa en Madrid, que invitaba a estar en la calle. Pero no, allí estuvimos acompañándola y desde luego que no nos defraudó.



Vivimos una tarde muy agradable en este lugar que podéis admirar en las fotos, escuchando a Lola recitar sus poemas. La autora leyó durante treinta minutos que se pasaron volando. Como se nos hizo poco el presentador Javier Díaz Gil le pidió que leyera un par de poemas más. También desde el público le indicaron que nos leyera uno sobre una enfermedad reciente. La autora no quería leer mucho más, porque piensa que mejor en poesía leer de menos, que de más. Sabia consideración, en poesía y en narrativa.

Lola lee sus poemas despacio, cada verso libre, cada palabra parece caer goteando desde el grifo de la poesía, dándote tiempo a que lo asimiles. Los poemas de Lola, muchos en primera persona, parecen tener textura. Están salpicados de sensaciones y de materiales, de elementos de la naturaleza, de árboles, de frutas, de insectos, de colores, también de luz y de sombra. Son instantes que te dejan meditando. 

También entre poema y poema la autora nos introducía en la atmósfera que le había llevado a ella a escribir esos poemas. Por ejemplo nos habló de Melilla y sus vallas a propósito de uno de ellos.

Pero mejor que tratar yo de contároslo, es dejaros con algunos momentos de esta presentación, para que también vosotros podías escuchar de la mano de sus protagonistas un poco de aquella velada poética. 




 Este poema del vídeo anterior a este párrafo me gustó mucho. 

Poema de Lola Andrés

Gestos que me enseñara
mi abuela en los frutales:

los labios pronunciados
abiertos a la pulpa del melocotón

el paso perforando
la tierra no desoigas la hondura de la vida

el puño hacia las nubes
como la rama viva del cerezo de sangre

allí desayunaba,
sentada
en el ribazo
de su halda blanca,
el libre corazón de lo nacido.
                                          








Digo afecto, no amor.
El afecto de un perro que se anuda a la siesta.

Y así deambular.

Llegar a cualquier índice perdido. La sed
fractura el cuerpo pero ordena la búsqueda.

Sueño la lejanía.

En mí palpo la fragua de los años.
Con el ansia, sueño, de limpiarme
los ecos de la intranquilidad.

Esta aspereza inmunda que siempre me avergüenza.

El afecto de un perro llagado a la intemperie.

Digo voces de mí.

Digo ya basta.


Lola Andrés, "Cielo líquido" (Amargord, 2015)

viernes, 8 de abril de 2016

Nombres de zapaterias



Os dejo hoy con una nueva entrada dedicada a los nombres de las tiendas. 

¡Sí ! hoy la cosa va de pies...






¡Viernes! Qué palabra tan buena...




Hoy es viernes, qué alegría. 

Promesa de descanso, de libertad, de ocio.

¿Y alguna vez nos hemos parado a pensar de dónde viene la palabra Viernes?

Viernes viene del latín. De la palabra "Véneris die", que era el genitivo latino, o lo que es lo mismo "día de Venus". ¡¿Cómo no nos va a gustar la palabra?!

La palabra "Véneris die", en castellano fue perdiendo el "die", supongo que por aquello de la economía de lenguaje hablado, y terminó siendo "veneris".

En otras lenguas, también románicas como el castellano, en cambio no lo perdió. Por eso en italiano se dice "venerdi" o en francés "vendredi".

En Véneris, la primera sílaba, acabó convirtiéndose en "ie" como ha ocurrido en algunos verbos irregulares como "temblar", que se dice "tiemblo". 

Y perdió la sílaba del medio que era más débil que la primera sílaba.

Finalmente terminó por convertirse en "viernes".

jueves, 7 de abril de 2016

Curiosidades de Madrid: "Accidente aéreo" y "Todo es felicidá"


Aunque vivo en Madrid desde que tenía diez años, me gusta mucho ser turista por mi ciudad, me gusta mucho pasearla e ir fijándome en sus detalles.

Ya sabéis que en este blog tenemos muchas entradas dedicadas a las ciudades por las que paso, casi siempre en relación con la cultura. Por supuesto con Madrid, lo hago con mayor razón.

Una ciudad tan grande como la mía, tan poblada, y tan viva no deja de sorprender. Ya, ya sé que tenemos horas punta con atascos, tenemos manifestaciones y filas para entrar a cualquier sitio. Pero no hay que quedarse en eso, porque también, entre otras cosas buenas, tenemos una oferta cultural amplia y variada que no termina nunca, por decir lo más inmediato.

Hoy vamos a traer al blog dos curiosidades de Madrid, que a veces no son tan evidentes.

Encabezando la entrada tenemos la foto de Otro ángel caído, que se nos ha quedado en las alturas. Por eso muchas veces pasa inadvertido. Está situado en todo el centro de Madrid, a la altura del Mercado de San Miguel, cruzas la calle Mayor y enfrente, en la calle Milaneses, 3 miras hacia lo alto y ahí está.

He leído que los propietarios de ese edificio le pidieron al escultor Miguel Ángel Ruiz Beato que les hiciera alguna escultura que adornara el edificio. Y desde enero de 2005 tenemos esta escultura que se titula "Accidente aéreo".

Pesa 300 kilos y es de bronce. Tiene un tamaño como un 20 por ciento más del tamaño natural. He leído en múltiples sitios de la web que el autor ha representado a un ser mitológico y alado (su identidad no es precisa) que ha salido a dar un viaje y cuando vuelve al lugar de siempre a aterrizar, se encuentra que ha crecido una ciudad, y se estrella.






Y también os traigo estas dos fotos de un palacete decimonónico muy curioso de Madrid, que llama la atención por su decorada fachada. Un gran fresco titulado: "Todo es felicidá" de Jack Babiloni, cuyo nombre está en la misma fachada, que es del año 2008.

Está situado por la zona de Alonso Martínez, en la calle Campoamor 16 esquina con Orellana, en un edificio de 1886. 
La fachada tiene 900 metros cuadrados y 68 pinturas. Las pinturas con técnica de silicio sobre fondo de cal, representan a personajes de la mitología griega como Poseidón o Atenea, más algunos textos breves como "Verdad" u "Honradez" por poner un ejemplo. Las pinturas están hechas solo con cuatro colores:Negro, amarillo, azul y ocre. Y se supone que el fresco debe durar en perfecto estado hasta 300 o 500 años ( he encontrado ambas fechas cuando he investigado sobre ello), pues al utilizar esa técnica de silicio, se pintaba antes de que se secara el mortero, de este modo se consigue hacerlo más persistente.

Ha sido fruto de muchas polémicas. Para empezar el resultado no es del gusto de todos. Y por otro lado, en el año 2015 el Ayuntamiento de Madrid quería demoler este edificio porque no tenía las licencias necesarias para las obras que había hecho de rehabilitación, con la inclusión de un ascensor y todo, sin permiso. Hubo una petición de firmas para detener la demolición en la plataforma change.org. abogando por su valor artístico. Tras el revuelo que se organizó, el Ayuntamiento afirmó que estudiaría formulas para la conservación del fresco.


miércoles, 6 de abril de 2016

Un poema en la calle de Lisboa de la poeta Florbela Espanca




De pronto vas paseando por Lisboa, muy cerca del mirador de Nossa Senhora do Monte y te cruzas con un poema en portugués que se quiere venir contigo. 

Florbela Espanca, es la poetisa portuguesa. Y yo no la conocía. Pero ahora sé que la poeta portuguesa Florbela Espanca (1894-1930) nació un 8 de diciembre, se casó otro 8 de diciembre y murió aún otro 8 de diciembre, porque se suicidó. La llaman la Dama del Alentejo, y el pueblo portugués convirtió muchos de sus poemas en la letras de sus fados. Fue valiente para su época, decidida, liberal, se casó varias veces y buscó incansable la felicidad entre sus desdichas amorosas.

"Florbela Espanca publicó en vida solo dos libros de poemas: Livro de Magoas y Livro de Soror Saudade, que en breve se agotaron, pero no fueron reeditados; y uno de cuentos, dedicado a su hermano aviador, Máscaras do Destino. Dejó preparada la edición de otro, su mejor libro, Charneca en Flor, que salió a la luz póstumamente, junto con Reliquiae: una colección de poemas manuscritos que por revelar sus intimidades amorosas, nunca habían sido editados. Solo muchos años más tarde, y gracias a la labor infatigable de Rui Guedes, el público pudo leer otro libro de cuentos, Dominó Preto, y muchos poemas más... Más importante aún, editó las cartas que pudo compilar, verdaderas joyas de sinceridad y poesía, y las pocas páginas de su Diario. Hace pocos años fueron recuperadas las cartas de amor a su segundo marido, Antonio Guimarães, fundamentales para entender el alma de nuestra poetisa..."

http://www.revistaesfinge.com/arte/literatura/item/785-84florbela-espanca-la-poetisa-del-amor


¡Ser poeta es ser más alto, es ser mayor
De lo que son los hombres! ¡Morder como quien besa!
¡Es ser mendigo y dar como quien es
Rey del Reino de Más Acá y Más allá del Dolor!

¡Es tener de mil deseos el esplendor
Y no saber siquiera qué se desea!
¡Es tener aquí dentro un astro que flamea,
Y tener garras y alas de cóndor!

¡Es tener hambre, es tener sed de Infinito!
Por yelmo, las mañanas de oro y de satén...
¡Es condensar el mundo en un solo grito!

Y es amarte, así, perdidamente...
Es que seas alma y sangre y vida en mí
¡Y decirlo cantando a todo el mundo!

lunes, 4 de abril de 2016

De Tararear y Quique Gonzalez. Auditorio de Leganés 3 Abril




Yo hoy tarareo, no dejo de tararear las canciones que ayer tocó Quique González.

Qué bueno es Quique González. http://www.quiquegonzalez.com/


Acaba de sacar su décimo disco, con su banda Los Detectives, y titulado: Me mata si me necesitas. 


A mí me gustan mucho sus canciones más lentas, más intimistas. 




Ayer estuvo tocando en el Auditorio de la Universidad Carlos III en Leganés. Estuvo fenomenal. Primero las entradas agotadas. Después el público incapaz de estar sentado levantado en pie, bailando con los pies, tocando las palmas, tarareando. 



Y por eso hoy tarareo todo el rato sus canciones. 

¿Y por qué tarareo? Porque tararear viene de la palabra "Tarara", y he buscado el origen de la palabra en varios sitios y parece haber coincidencia en afirmar que etimológicamente tiene dos posibles explicaciones. O que venga de tararí, tal y cómo dice en su primera acepción el significado de la palabra tarara, que significa toque de trompeta, o puede ser que venga de su segunda acepción porque "tarara" también es ser un loco, es tener poco juicio.

Así que así estoy yo hoy, medio loca en este lunes lluvioso, canturreando entre dientes todo el santo día, como una "tarara", las canciones que más me gustan de Quique Gonzalez.


tararear
De tarara y -ear.
1. tr. Cantar entre dientes y sin articular palabras.




tarara
De or. onomat.
1. f. tararí (‖ toque de trompeta).
2. adj. coloq. Loco, de poco juicio. U. t. c. s.







De la palabra "lluvia" y todos sus sinónimos


 
Hoy llueve, llueve sobre Madrid, y creo que sobre España entera.

Y lo hace, al menos en Madrid, de esa forma lentita y minúscula, cierta y tranquila, que te va empapando poco a poco, poco a poco, sin remedio y sin descanso.

Es abril, tiene que llover.

Y es bonita la palabra lluvia. ¿No créeis? ¡Y cuántas formas de decir lluvia que existen y todas bien bonitas!

Ya que es abril me gustaba dedicar esta entrada a esa palabra y sus múltiples variantes según la forma de llover o la geografía.

En primer lugar deciros que la palabra "lluvia" viene del latín pluvia.

A la llovizna o chubasco de poca intensidad lo llaman en algunos lugares aguanina, un término similar a cernidillo y a bernizo. De ahí que "Llover a bernizo" es lloviznar. En Mallorca, la lluvia fina recibe el nombre de albaina y en algunos lugares de Canarias se denomina Chiriso. En el norte, ¿Quién no conoce el sirimiri? O también el orvallo.

Que lo que ocurre es que cae un chaparrón, en León lo llaman bastiao, y en Asturias bastarao. Bastio lo llaman en otros lugares a la mezcla entre lluvia y viento. Generalmente cuando caen chaparrones lo llaman en según qué lugares: chucear, chubascar, chaparrear. Y de ahí la frase coloquial "Caen chuzos de punta".En Extremadura al chaparrón lo llaman chiringa y en Canarias palo de agua; en Aragón andalocio o rujiada y en el País Vasco zaparrada o chaparrada.

Sinónimos de chaparrón son un chapetazo, un chapetón, un zarpazo, un charpazo, una aguazada, una batida, un batilazo, vamos lo que es que te caiga "una chupa de agua".

Jarrear o diluviar llamamos muchas veces coloquialmente a esas lluvias intensas. También decimos "llover a mares", "llover guijarros" o la tan frecuente "llover a cántaros", incluso escascar dicen en Cantabria, o cantalear que es llover copiosamente. 

Cuando la lluvia es escasa y esquiva, se le llama matapolvo, rugete (Teruel), o babinas (en León). Hay una expresión curiosa "está el día de culadas" cuando tenemos esos días que llueve a ratos un poco, y luego nada. 

Y cuando al fín deja de llover, decimos escampar o albanciar, abellugar (Asturias), espazar (Aragón) o escarpiar. Si además de dejar de llover ya clarea el cielo se le llama en Asturias: abocanar.

El lenguaje, ya lo hemos dicho muchas veces, está vivo. Por eso es muy rico. El lenguaje no solo tiene una raíz etimológica que lo define, sino que en él influyen también la geografía de los hablantes, no se designará igual a la lluvia en un lugar que apenas llueve, que en el norte que llueve tan a menudo. E incluso influye decisivamente el mundo afectivo que actúa como un filtro de nuestras palabras, no es igual que estés deseando que llueva por las cosechas, por las alergías y demás, que ya estés cansado de tanta y tanta lluvia. 

Geográficamente podemos decir por ello, al igual que los esquimales tienen muchos nombres para la nieve, en el norte tienen muchísimas formas de llamar a la lluvia... He leído que tienen más de cien formas. Y cómo hemos dicho se debe tanto a la raíz etimológica como al lugar:

 Hay términos con los que se denomina a la lluvia que puede proceder del viento, como por ejemplo del griego "Boreas". Por eso he leído que orballo, orballeira, orballada; chuvisco, chuviscada, chuviña, procederían del latín "pluvia", pero del término griego "Boreas" con el que se denominaba al viento del norte que trae agua procederían otras lluvias como babuxa, babuxada, barruxeira, barruxada, barruceira. Incluso hay otras formas que procederían de otra palabra del latín "turbo" –indicaba cualquier tipo de objeto impulsado con un movimiento circular–. De aquí nos llegarían palabras como trebón, torbón, treboada, torboada...


En fin... que podríamos hablar de este tema largo y tendido porque hay mucha riqueza en el lenguaje. Desde siempre hemos mirado al cielo y hemos dependido de él. Cómo para que no lo reflejen nuestras palabras...





Fuentes:
Aemet - Agenda meteorológica
http://www.farodevigo.es/sociedad-cultura/2012/03/05/lluvia-galicia-cien-caras/629602.html