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miércoles, 31 de enero de 2024

"Maddi y las fronteras" de Edurne Portela. Reseña Literaria

 


"Yo te ofrezco mi amor y hablarte con verdad. Amén"

Con esta frase terminaba de hablar Maddi, para sus adentros, con Dios. Maddi era muy católica, pero la tenían castigada a no comulgar por haberse divorciado. Sin embargo, Maddi se empeñaba en recibir la comunión y daba lugar a situaciones muy tensas en la Iglesia por esta razón. Así era el personaje principal de esta novela que terminé hace un par de libros (porque llevo atraso de reseñas...): "Maddi y las fronteras". 

"Yo te ofrezco mi amor y hablarte con verdad. Amén". Me encanta esa frase con la que he encabezado esta novela y con la que terminaba Maddi de hablar con Dios.

Tenía muchas ganas de leer a Edurne Portela y desde luego no me ha decepcionado, me ha gustado mucho su forma de escribir. Aunque también es cierto que para leer su prosa he elegido su cuarta novela, justo una novela que no es enteramente de su imaginación sino que parte de alguien real. 

Parece ser que a la autora le ofrecieron escribir sobre una mujer que vivió en la primera mitad del siglo XX en el sur de Francia. Le ofrecieron una documentación donde se hablaba de ella y sobre estos papeles ella reescribió su vida según ella la imaginó o visualizó recorriendo algunos de los paisajes donde debió vivir. 

Esta señora se llamaba María Josefa Sansberro, pero era conocida por Maddi, y nació en Oiartzun en 1895. Regentaba un hotel en el año 1929 en Sara, en la frontera entre España y Francia. Y era especial, una personalidad con muchas contradicciones, muy católica pero divorciada, madre de un niño por puro azar, pero aunque vive con un amigo nunca tuvo hijos, y empieza ayudando a los exiliados republicanos y termina siendo miembro de la Resistencia rodeada por nazis. No era una persona nada convencional para la época en la que vivió. Y menos una mujer convencional.

Es la historia de una mujer valiente que arriesgo su vida por lo que pensaba que era justo. 

En el epílogo de la obra la autora cuenta exactamente como llegó a saber de la existencia de esta mujer. En un principio pensó en escribir un ensayo y terminó haciendo una novela. 

Una novela escrita en primera persona, con un estilo sencillo, con lo que ya consigue que te acerques mucho a esa Maddi, es una forma de narrar íntima que te vuelve muy cercano ese personaje, que no sabemos si es el real, solo sabemos que es el que Edurne Portela ha creído ver. Está en primera persona, pero está salpicada de monólogos interiores tanto como de diálogos. La lectura es ágil. Y se va haciendo cada vez más intensa a medida que vas leyendo más y más páginas y sabes del destino de la protagonista. 

Es una lectura que va de menos a más. Como si la forma de contarlo fuera un zoom que te va acercando cada vez más al peligro que estaba corriendo Maddi con sus acciones. Muy bien dosificada la tensión según el argumento. Confieso que no me ha gustado el final, no porque esté mal escrito, todo lo contrario, sino porque me hubiera gustado otro para esta protagonista. Pero claro, existió, y ya venía con su destino conocido. Aún así me ha parecido muy bien contado desde esa primera persona. 


Preludio 

"Sachsenhausen,  13 de noviembre de 1944

Intentas entenderme, completar mi biografía, imaginar este final. Rellenar todos los vacíos, esclarecer las incógnitas que te suscita mi vida y que hoy por fin acabará. Te han regalado las palabras registradas en los archivos de mi paso por esta vida y esta muerte: partida de nacimiento, matrimonios, divorcio, deportación, Dachau, Ravensbrück, Sachsenhausen, condecoraciones, reconocimientos, pesquisas archivadas que hará ese hijo que no es mío. Palabras que me resumen pero que no te cuentan todo lo que he amado y sufrido, lo que he deseado y odiado, el bien y el mal que he hecho, todo lo que me han querido y admirado, temido y despreciado. No escucharás mi voz y apenas entenderás mi rostro porque no me has visto sonreír ni llorar. Solo tienes una fotografía con mi querida Marie Jeanne y ese perro al que darás un nombre inventado. ¿Cómo vas a contar mi historia? ¿Cuánto vas a fantasear para darle un sentido? ¿Vas a entender mis motivos? ¿Vas a convertirme en heroína? ¿En víctima? De ti depende cómo me recuerden quienes te lean. Serás responsable de la memoria que quede de mí en aquellos que abran estas páginas. No inventes demasiado. No imagines demasiado. 

 Demasiado nunca será suficiente."


 

2 comentarios:

  1. Qué interesante, Rocío, cómo todo lo que escribes. Como curiosidad, Madrid, que es un nombre vasco, se pronuncia Mayyi. Besos

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