Hoy es el Día de la Biblioteca: 24 de octubre de 2013.
Desde el año 1997 la Asociación Española de Amigos del Libro
Infantil y Juvenil, con apoyo del Ministerio de Cultura, promueve esta
celebración en recuerdo del incendio de la Biblioteca de Sarajevo durante el
conflicto de los Balcanes en 1992. El médico e historiador croata Mirko D.
Grmek acuñó el término memoricidio para definir la destrucción de la
memoria y el tesoro cultural del “otro”, del adversario, del enemigo.
Destruir las bibliotecas es un memoricidio. Porque se trata de una
institución cultural básica e imprescindible donde se fomenta el conocimiento y
el intercambio de ideas de forma gratuita y libre.
Este año el cartel ha sido diseñado por Andrés Rábago “El Roto” y el texto
que lo acompaña es de la escritora Laura Gallego:
Pregón.
Relato de Laura Gallego:
Érase una vez un viajero que llegó desde un lugar lejano a un pueblo en el
que no había libros. Se sentó a descansar en la plaza mayor y sacó de su morral
un viejo volumen de cuentos. Cuando empezó a leer en voz alta, los niños, que
nunca habían visto nada semejante, se sentaron a su alrededor para escucharlo.
El visitante relató historias que fascinaron a sus oyentes y les hicieron
soñar con fantásticas aventuras en reinos maravillosos. Cuando terminó, cerró
el libro para volver a guardarlo en su morral. Nadie se percató de que, al
hacerlo, escapaban de entre sus páginas algunas palabras sueltas que cayeron al
suelo.
El viajero se marchó por donde había venido; tiempo después, los habitantes
del pueblo descubrieron el pequeño brote que elevaba sus temblorosas hojitas
hacia el sol, en el lugar en el que habían caído las palabras perdidas.
Todos asistieron asombrados al crecimiento de un árbol como no se había
visto otro. Cuando llegó la primavera, el árbol exhibió con orgullo unas
hermosas flores de pétalos de papel. Y, con los primeros compases del verano,
dio fruto por primera vez.
Y sus ramas se cuajaron de libros de todas clases. Libros de aventuras, de
misterio, de terror, de historias de tiempos pasados, presentes y futuros.
Algunos se atrevieron a coger esos frutos, y había un sabio en el lugar que les
enseñó a leer para poder disfrutarlos.
A veces, la brisa soplaba y sacudía las ramas del árbol. Las hojas de los
libros se agitaban y dejaban caer nuevas palabras. Y pronto hubo más brotes por
todo el pueblo; y en apenas un par de años, los árboles-libro estaban por todas
partes.
Se corrió la voz; muchos investigadores, curiosos y turistas pasaron por
allí para conocer el lugar donde los libros crecían en los árboles. Los
habitantes del pueblo leían sus páginas con fruición, y cuidaban cada brote con
gran mimo. Y así iban recogiendo más y más historias con cada nueva cosecha de
libros.
Un día, los más sabios del lugar se reunieron y acordaron compartir su
tesoro con el resto del mundo. Eligieron a un grupo de jóvenes y los animaron a
escoger un libro del primer árbol que había crecido en el pueblo. Después, los
enviaron a recorrer los caminos.
Ellos se repartieron por el mundo, buscando un hogar para su preciada
carga, y así, con el tiempo, cada uno dejó su libro en una biblioteca
diferente.
Y cuenta la historia que allí siguen todavía. Que hay algunas bibliotecas
que guardan entre sus estantes un libro especial que deja caer
palabras-semilla. Y que, si aterrizan en el lugar adecuado, cada una de esas
palabras crecerá hasta convertirse en un árbol que dará como fruto nuevos
libros.
Nadie sabe en qué bibliotecas se encuentran estos libros maravillosos. Se
desconoce también cuáles, de entre todos sus volúmenes, son los que proceden
del pueblo donde los libros crecen en los árboles. Podría ser cualquiera, y
podría estar escondido en cualquier rincón de cualquier biblioteca del planeta.
Animaos a entrar en ellas y a explorar sus estanterías, viajeros; porque
quizá deis por casualidad con un libro cuyas palabras echen raíces en vuestro
corazón y hagan crecer un magnífico árbol de historias cuyas semillas puedan llegar
a cambiar el mundo.
¡Feliz día de la biblioteca!
Laura Gallego
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tus comentarios me enriquecen, anímate y déjame uno