Son muchas las ciudades donde vivo aunque parezcan una sola.
Cambian las caras y los edificios, las tiendas y los monumentos.
Cambian las prisas y los atascos, cambia incluso la humedad y el viento.
Hay un Madrid donde vivo, y otros donde trabajo.
Uno al que me llevó volando la casualidad y a otros los afectos.
El Madrid que me gusta pasear, el que detesto y el que descubro ¡que me riza el pelo!
¿Será verdad?
El río de Madrid, su suelo y su maravilloso cielo.
Mis Madriles no terminan nunca, nunca, nunca.
Son muchas mis ciudades aunque parezcan una,
todas me ven pasar de perfil, caminando, en silencio.
Todas las vivo,
y en todas siento.
Hay un Madrid, donde las amistades perduran en el tiempo y en el alma para siempre jamás ! Un abrazo Rocío.
ResponderEliminarAy. Un abrazo fuerte Iberia, mi querida catalana.
Eliminar