Volveremos a Annecy ¿Verdad?
Prométeme que volveremos.
Un día también de mercadillo, aunque mejor si no es tan caluroso. Perderemos el tiempo otra vez entre sus bellos canales, paseando por su lago, o curioseando en aquella vetusta librería donde cada libro llevaba manuscrita una reseña. Perderemos el tiempo para ganarlo.
¿Cuántos más pueblecitos bonitos tiene Francia que desconocíamos?
Volveremos a Annecy, volveremos a tomar un café rico en aquella tranquila placita rodeada de murales, volveremos a probar los quesos y salchichones que una sonrisa nos ofrezca al vuelo.
Volveremos ¿verdad?