Hace ya unos cuántos años, sería muy a principios del año 2000, en una ocasión Lorenzo Silva vino al taller de creación literaria de un Centro Cultural de Villaverde Alto, al que entonces yo asistía, a hablarnos de la creación de novelas.
Yo creo que a los que estuvimos allí no se nos olvidará nunca. No solo porque, sin un papel delante, pero todo el rato doblando y desdoblando uno entre sus dedos, fue haciéndonos de cabeza un guion pormenorizado de los pasos a seguir a la hora de escribir una historia, con una cantidad de detalles imposible de reproducir y una claridad apabullante, sino también por su talante didáctico y amable para con nosotros.
En aquel entonces yo creo que solo habría sacado dos novelas de la serie de Bevilaqua y Chamorro, más alguna que otra como La flaqueza del bolchevique y alguna más.
Desde ese día yo me declaré incondicional de este escritor.
Este noviembre pasado, como veintitantos años después de aquello, asistí a una conferencia del autor que se titulaba "25 años del inicio de la serie de Bevilacqua y Chamorro" en la Mutua Madrileña. El salón de actos está hasta arriba de público. Llegamos bastante bien de hora y conseguimos sitio en la segunda fila, y fuimos viendo como gradualmente aquello se fue llenando y llenando hasta ocupar todas las butacas y empezar a subir buscando sitio al gallinero. ¡Anda que no hay lectores de esta famosa serie de guardia civiles!
Durante una hora bastante larga allí estuvimos asistiendo al diálogo entre dos Lorenzos: Lorenzo Silva y Lorenzo Cooklin, director general de la Fundación Mutua Madrileña, dentro del ciclo de "Creadores de historias".
Estuvo muy bien, la verdad. Muy entretenido. No solo se habló de estos personajes, sino de su carrera literaria, de otras obras suyas, de la inspiración y de no sé cuántas cosas más que han afectado a sus novelas.
Si no habéis leído la saga de Lorenzo Silva de Bevilacqua y Chamorro, la pareja de guardia civiles que la protagonizan, y os gusta la novela negra, yo os las recomiendo. Ya hay trece, pero creo que todos los que la seguimos estamos siempre esperando la siguiente.