Un blog de literatura y de Madrid, de exposiciones y lugares especiales, de librerias, libros y let

domingo, 7 de enero de 2018

Mi pequeño botín




Este es mi pequeño (o gran) botín de estas navidades.

Desde que tengo uso de razón los Reyes me traían algún cuento o algún libro. Siempre me han hecho especial ilusión, sé que van a regalarme tantos buenos momentos... Y ya no quiero quedarme sin alguno nuevo cada vez que llegan estos días.

Este año tengo estos tres libros nuevos. No me digáis que no son apetecibles... 

¿Y a vosotros qué libro os han traído los Reyes? ¿O era Papá Noel, el amigo invisible o visible?

Reto Lector 2018



Envía mi amiga Piluca esta imagen y me ha gustado mucho.


Me ha parecido que una forma estupenda de comenzar el año es hacerlo con estos retos de lectura.


Así que la comparto con vosotros y así empezamos con muchas ganas este recién estrenado 2018.


¡Feliz año a todos!



1  Enero. Un libro que tienes y no has leído.
2 Febrero. El libro favorito de un amigo.
3. Marzo. Un clásico literario
4. Abril. Un libro prestado.
5. Mayo. Uno que debiste leer en la escuela y no lo hiciste.
6  Junio. Un libro de un género que nunca has leído.
7. Julio. Un libro que escojas por su portada.
8. Agosto. Un libro de más de 100 años.
9. Septiembre. Una obra de un autor clásico.
10. Octubre. Un autor famoso de tu país.
11. Noviembre. Un best seller.
12. Diciembre. Un libro con ilustraciones.

sábado, 6 de enero de 2018

"Las Tres Reinas Magas" de Gloria Fuertes




Las Tres Reinas Magas
 
Segundo Acto

LAS TRES REINAS MAGAS ante el portal de Belén, tan sólo alumbrado por
la luz del NIÑO. Junto al NIÑO están MARÍA y JOSÉ.

GASPARA Es un Niño!
MELCHORA Ya lo sé
me lo dijo San José.
MELCHORA Y ella es Virgen
y Divina.
BALTASARA Lo adivina.
MELCHORA él da calor y está hierto.
BALTASARA Pues no acierto,
está helado y tiene fiebre.
GASPARA Está muy frío el pesebre.
BALTASARA Del cielo a la tierra vino
sin ropaje.
GASPARA ¡Vaya viaje!
MELCHORA Es una mina de amor.
GASPARA Sí, señor.
MELCHORA Señora, que soy Melchora.
(Se hace un breve silencio.)
BALTASARA ¡Pues no estoy llorando!
GASPARA (A BALTASARA.) Trae el puchero y no
hagas pucheros.
(Se va BALTASARA y vuelve con una vasija de barro llena
de leche.)
Eso, eso, dejemos al Niño,
por lo menos,
sopitas de leche,
con pan y escabeche,
que el Niño que nace
verás lo que hace.
MELCHORA El que murió en tablas
verás lo que habla.
NIÑO Si usted es mi amigo,
no tenga enemigo.
BALTASARA ¿Y quien le obedece?
La pena me crece.
NIÑO Si usted es mi amigo,
no tenga enemigo.
BALTASARA ¿Nos trata de usted?
MELCHORA ¿Estará enfadado
cuando a hablar empieza?
GASPARA Claro, es que las guerras
le traen de cabeza...
...

Gloria Fuertes.
Fragmento de Las Tres Reinas Magas

domingo, 31 de diciembre de 2017

Deseos para el nuevo año de Eduardo Galeano






Ojalá seamos dignos de la desesperada esperanza.

Ojalá podamos tener el coraje de estar solos y la valentía de arriesgarnos a estar juntos, porque de nada sirve un diente fuera de la boca, ni un dedo fuera de la mano.

Ojalá podamos ser desobedientes, cada vez que recibimos órdenes que humillan nuestra conciencia o violan nuestro sentido común.

Ojalá podamos ser tan porfiados para seguir creyendo, contra toda evidencia, que la condición humana vale la pena, porque hemos sido mal hechos, pero no estamos terminados.

Ojalá podamos ser capaces de seguir caminando los caminos del viento, a pesar de las caídas y las traiciones y las derrotas, porque la historia continúa, más allá de nosotros, y cuando ella dice adiós, está diciendo: hasta luego.

Ojalá podamos mantener viva la certeza de que es posible ser compatriota y contemporáneo de todo aquel que viva animado por la voluntad de justicia y la voluntad de belleza, nazca donde nazca y viva cuando viva, porque no tienen fronteras los mapas del alma ni del tiempo.

Eduardo Galeano



viernes, 29 de diciembre de 2017

Trampantojos y murales en Oropesa


Visitar Oropesa en Toledo y hacer un descubrimiento.

Descubrir sus calles adornadas de murales coloreados.

Coloreados también sus trampantojos embelleciendo las tapias.

Tapias vestidas de cultura con poemas.

Poemas y poemas y poemas.

Visitar Oropesa en Toledo y disfrutar. 



























martes, 26 de diciembre de 2017

De la palabra Polvorón y demás exquisiteces...




"Tienes que apretarlo fuerte primero y luego ya lo desenvuelves, ya verás cómo no se te rompe".
¿A quién no se lo enseñó su madre?

Llegan las navidades y llegan los polvorones. Y lo mismo que un día te enseñaron a atarte los cordones, desde pequeños nos enseñan cómo comerlos.

Todos sabemos lo ricos que están, pero ¿Qué más sabemos de los polvorones?

La Rae nos los definen así:


Polvorón.

De pólvora 'partículas a que se reduce una cosa sólida'.

1. m. Torta, comúnmente pequeña, de harina, manteca y azúcar, cocida en horno fuerte y que se deshace en polvo al comerla.

Real Academia Española © Todos los derechos reservados


Ya lo veis, parece que no hay ninguna duda de que la palabra polvorón viene de la palabra "pólvora", partículas a que se reduce una cosa sólida. Hace mucho tiempo que aprendimos que no hay nada más fácil que reducir un polvorón a partículas...

"Pólvora" procede de la palabra latina "Pulvis" que significa polvo. De su genitivo vendría "pulveris" y de ahí "pólvora". A pólvora le unimos el sufijo aumentativo "ón" y se nos forma la palabra "Polvorón".


Por más que consulto en varias fuentes indagando como fué el que acabará con ese nombre, no hay unanimidad. Unos lo achacan al polvo del azúcar que llevan por encima, otros al polvo de la harina que tiene de más con respecto al mantecado, otros por el polvo en que se deshace fácilmente, en fin que hay diversas explicaciones.

Pero en lo que, en cambio, sí que parece que coinciden las fuentes es en la fecha en la que comenzamos a comer mantecados. Desde el siglo XVI hay señales de ellos, porque entonces se utilizaba mucho en la repostería la manteca de cerdo, debido a un excedente de encinas. Al haber más encinas también había mucha más comida para los cerdos, y consecuentemente éstos se multiplicaban. Y ya sabemos que del cerdo se aprovecha casi todo. Por aquel entonces debido precisamente a este excedente de encinas y cerdos se hacía mucha más repostería con manteca de cerdo, y de ahí nacieron los mantecados en Andalucía, aunque hay dudas de si fue en Estepa o en Antequera.

Y del mantecado llegamos al polvorón.



Aunque se sabe que existen desde el siglo XVI los típicos mantecados se empezaron a comercializar en el año 1870 gracias a una señora de Estepa que se llamaba Filomena Micaela Ruiz Téllez, alias "La Colchona", que tuvo la idea de que su marido, que era transportista de Estepa a Córdoba, los fuera vendiendo por el camino. Para que duraran más tuvo la idea de resecarlos más al final del proceso de creación del mantecado, así resistía mejor el transporte y el embalaje, y conservaba mejor sus cualidades. Leo entonces que al resecarlos más llegaron a ser los polvorones. Unos dulces con más harina y almendra que los mantecados. Ésto últimos se consumen todo el año, llevan menos harina pero llevan clara de huevo que los aglutina más y mantiene menos harinosos.


Otro día contamos de dónde viene las palabras turrón y mazapán..


Pero ahora me vais a permitir que...
Si gustáis...

domingo, 24 de diciembre de 2017

Nochebuena de Eduardo Galeano





Nochebuena

Fernando Silva dirige el hospital de niños, en Managua.
En vísperas de Navidad, se quedó trabajando hasta muy tarde. Ya estaban sonando los cohetes, y empezaban los fuegos artificiales a iluminar el cielo, cuando Fernando decidió marcharse. En su casa lo esperaban para festejar.

Hizo una última recorrida por las salas, viendo si todo quedaba en orden, y en eso estaba cuando sintió que unos pasos lo seguían. Unos pasos de algodón: se volvió y descubrió que uno de los enfermitos le andaba atrás. En la penumbra, lo reconoció. Era un niño que estaba solo. Fernando reconoció su cara ya marcada por la muerte y esos ojos que pedían disculpas o quizá pedían permiso.

Fernando se acercó y el niño lo rozó con la mano:
-Decile a… -susurró el niño-. Decile a alguien, que yo estoy aquí.

Eduardo Galeano
El libro de los abrazos – Ed Siglo XXI – 2009