Un blog de literatura y de Madrid, de exposiciones y lugares especiales, de librerias, libros y let

miércoles, 10 de agosto de 2011

"Tocar los libros" de Jesús Marchamalo




 "...como en los estratos geológicos de un yacimiento arqueológico, los libros permiten ir desenterrando los restos de todos nuestros particulares naufragios". Jesús Marchamalo

El libro del que os quería hablar hoy es uno muy pequeño, apenas 80 páginas si incluímos el prólogo de Luis Mateo Díez, pero no tiene desperdicio alguno.

Si os gustan los libros, los libros como objeto, si os gusta acariciarlos de vez en cuando tomándolos de nuevo en vuestras manos, si tenéis problemas para almacenarlos, si os duele desprenderos de ellos, si os da pena escribirlos o no, dejais vuestra huella en ellos, en fin, si además de leer os gustan los libros, os gustará este libro.

Porque habla de todo eso: De contar los libros que uno tiene, de la forma de ordenarlos, de ponerle anotaciones, de los ex-libris, de las dedicatorias, de reubicarlos, de dónde nos gusta leer... Porque al ir leyéndolo te das cuenta de que tal y como uno mismo tiene sus manías para con ellos, así las tienen los demás, incluídos importantes escritores.

Faulkner, Cortázar, Lampedusa, Borges, Octavio Paz, Auster, Salinas... muchos autores desfilan por estas pocas páginas, cada uno con sus manías y sus debilidades para con los libros. Si tienen algunos de dudosa clasificación, si tienen otros que a pesar de haberlos leído ya no se acuerdan de qué iban, de la cantidad de libros tan enorme que se acumula, de si deciden terminar o no de leer un libro aunque ya lo esté sufriendo... ¿No nos pasa eso a todos los que leemos?

"Si alguna vez se han deshecho de una caja de libros, sabrán de lo que estoy hablando. Uno puede sacar de casa prácticamente cualquier cosa sin que su estima social se vea mínimamente mermada: se pueden cambiar los muebles de la cocina, las butacas estilo Imperio del salón, el tresillo, la cómoda isabelina de la abuela Maximina, cualquier cosa, menos los libros."

El libro tiene cuatro partes: El orden y el concierto, Cómo deshacerse de quinientos libros, Un libro cada treinta segundos y Libros esguardamillados.

Un libro muy ameno y entretenido que se lee en un suspiro no tanto porque es pequeño de páginas sino porque está lleno de anécdotas relacionadas con los libros, los escritores y los lectores.

Un libro que comenzó siendo una conferencia y que luego ha tenido su particular y diferente historia que también se cuenta en él.


En fin... que a mí me ha encantado porque habla de lo que nos suele pasar a todos a quiénes nos gusta leer, y nos gustan los libros, nos gusta cuidarlos, guardarlos, atesorarlos, acariciarlos... verlos ahí, donde sabemos qué están.

"Hay libros indispensables que nos obligan a poseerlos, a conservarlos para hojearlos de vez en cuando, tocarlos, apretarlos bajo el brazo. Libros de los que es imposible desprenderse porque contienen fragmentos del mapa del tesoro."


martes, 9 de agosto de 2011

De adivinanzas y calambur



A estas alturas de la vida todos habréis oído o incluso repetido algunas de éstas adivinanzas:

Blanca por dentro, verde por fuera, si quiere que te lo diga, espera (La pera)
Dicen que son de dos, pero sólo son de una (Los dedos)
No pienses en otras cosas que las tienes en el mar, o las ves llegar furiosa, o las  ves mansas llegar (las olas)


Sí ¿verdad? Son de toda la vida...




¿Pero sabéis que es un CALAMBUR?

Muchos diréis ¡¡el nombre de un editorial!! Porque sí, efectivamente lo es.

Pero no, además del nombre de una editorial es otra cosa... Venga que sí... Que sí lo sabéis... Tiene algo que ver con esas adivinanzas que os he dicho...

¡Claro!

Dice el diccionario de la Rae:

calambur.

(Del fr. calembour).
1. m. Ret. Agrupación de las sílabas de una o más palabras de tal manera que se altera totalmente el significado de estas; p. ej., plátano es/plata no es.



Efectivamente el "calambur" es la figura literaria, el juego de palabras que se utiliza mucho en las adivinanzas: las mismas letras, el mismo orden y dos significados radicalmente distintos.


EL DULCE LAMENTAR DE DOS PASTORES
EL DULCE LAMEN TARDE DOS PASTORES


Esta figura que consiste en unir las sílabas de dos palabras contiguas, formando palabras de sentido distinto también sale en el libro que estoy leyendo: "La tienda de las palabras" de Marchamalo. Un libro en el que se tratan muchos de estos juegos. Os copio donde habla de ello:

El segundo juego de la página 52 ( el que os he copiado un poco más arriba) está sacado del libro de Monterroso "La letra e" donde hay otro también bastante gracioso:

EL HACEDOR MIRA UN AVE SIN ALAS TIMADA
EL HACE DORMIR A UNA VECINA LASTIMADA

La literatura está llenita de calambur más o menos famosos.

Dicen que el uno de los más famosos de la historia se atribuye a Quevedo que llamó "coja" a la Reina Mariana de Austria, segunda esposa de Felipe IV, sin que se ofendiera. Se presentó ante ella con una flor en la mano y el calambur en la boca:
"Entre el clavel blanco y la rosa roja, su majestad escoja"
(Entre el clavel blanco y la rosa roja, su majestad es coja".


...salí sin ser notada, (...) / a oscuras y en celada.
...salí sin ser notada, (...) / a oscuras y encelada.
San Juan de la Cruz (Fragmento de "La noche oscura")


"Con dados ganan condados" (Góngora)

"¿Con que dice que es conde? Querrá decir que esconde algo"
Benito Pérez Galdos, El caballero encantado


Curioso ¿Verdad?

Pero a veces pueden ocurrir estas situaciones como la que he encontrado en la red y que os copio aquí:

Calambur inintencionado


Sin embargo, este doble sentido de los calambur no siempre es intencionado y a veces ha traído más de un problema. Por ejemplo, en Abril del 2007 Telemadrid lanzó una campaña de publicidad con el lema:
Telemadrid, espejo de lo que somos.

utilizando este eslogan tanto en los anuncios en la propia televisión como en vayas publicitarias, periódicos, etc. Sin embargo, pronto se difundió el segundo sentido de esta frase:
Telemadrid, Espe jode lo que somos.

Dando la casualidad que Esperanza Aguirre (Espe) era en esos momento presidente de la Comunidad de Madrid, y había sido acusada por los propios empleados de Telemadrid de "influir" en los espacios de información de la cadena. Claro está, tras popularizarse este segundo sentido se retiró la campaña publicitaria.

 

lunes, 8 de agosto de 2011

"Esta es mi habitación..." José Cereijo




Esta es mi habitación...


Ésta es mi habitación, ésta es mi casa. Mira

los árboles, ya viejos, pero que todavía

saludan tiernamente la nueva primavera.

Mira el lugar en el que vivo. Nunca

has estado tú aquí,

pero yo lo he vivido mil veces con tus ojos.


Y todas estas cosas que ignoras, te conocen.


José Cereijo






jueves, 4 de agosto de 2011

"La mina soy yo..." Ray Bradbury "Zen el arte de escribir"




Todas las mañanas salto de la cama y piso una mina. La mina soy yo.

Después de la explosión, me paso el resto del día juntando los pedazos.



Zen en el arte de escribir
Ray Bradbury

miércoles, 3 de agosto de 2011

"Póquer de ases" de Manuel Vicent



"Lo imaginaba adolescente en los topes del tranvía bajando hacia las playas de Argel, dispuesto a pegarse un baño junto con otros muchachos ára­bes, todos hermanados por la misma luz, por la misma pobreza. Pegarse un baño, en el argot del francés de Argelia, es una expresión que incluye lo que ese acto tiene de combate al abrazarse al agua, dejando que sea el mar el que te azote. Aprendió la libertad de la miseria. Todos eran pobres en aquella arena deslumbrada de Argel, entre barcas con pantoques color naranja, el adolescente Albert Camus y sus amigos árabes en cuyos cuerpos desnudos res­balaba el mismo sol mojado. La dicha aún tenía sentido: empezaba y terminaba en la piel..."




¿A qué apetece seguir leyendo? Pues es el comienzo del libro del que os quería hablar hoy.

Tengo otra vez atasco con las reseñas de libros que he leído. Os debo algunas. Así que vamos a por otra.

Os quería hablar del libro "Póquer de ases" de Manuel Vicent.

Cómo podéis imaginar por el comienzo que os he copiado, es un libro en el que el autor hace un retrato tanto literario como psicológico de 31 personajes de la literatura de siglo XX: Camus, Miller, Becket, Cortazar, Greene, Casares, Joyce, Faulkner, Lampedusa, Céline, Parker, Conrad, Woolf, Scott Fizgerald, Thomas, Capote, Pessoa, Pla, Williams, Rilke, Proust, Gide, Kafka, Stein, Hesse, Baroja, Hemingway, Benet, Borges, Azcona, y Mann.

Provienen de pequeños artículos o "daguerrotipos", nombre de la sección del suplemento Babelia en la que han ido apareciendo la mayoría de los textos. Son apenas tres hojas para cada personaje pero escritas con esa prosa poética de Vicent, esa forma de contar las historias que te las hace tan agradables casi entrañables y querrías que no acabaran.

A mí me ha gustado mucho. Me encanta como escribe Manuel Vicent, como cuenta las historias salpicándolas de anécdotas, diciendo las cosas claras pero al mismo tiempo de forma tan amena, cercana, afectiva. Os dejo con un ejemplo donde habla de Rafael Azcona:

"Nunca contó un chiste, pero no decía nada que no fuera sorprendente y divertido. Nadie veía lo que él veía. Azcona tenía el don de convertir lo cotidiano en surrealista y por muy extraña que fuera su salida, al final llegabas a la conclusión de que tenía razón y que te acababa de mostrar el revés del espejo. Antes de volver a casa a pie o en autobús, en la sobremesa con los amigos, había desmitificado el amor, la patria, Dios, la iglesia, la política, el dinero, el ejército, los banqueros, los obispos, todo con ejemplos y datos concretos, inapelables, sin retórica alguna, sólo con la ayuda de un par de orujos".

Y en otros de forma tan poética, como en éste sobre Rilke:
"Lo suyo era rozarse con las amantes como con las alas de los ángeles. Buscaba una mujer que fuera guardiana de su soledad. Por lo demás el poeta solo necesitaba silencio. Clara le dió el silencio y la lejanía..."



Las páginas que hablan de Benet me gustaron especialmente, donde alude claro a su relación con su amigo Martín Santos:
"Sabían que un día romperían a escribir y en este sentido se vigilaban mutuamente como corredores antes de sonar el disparo de salida".

Hay muchas notas autobiográficas en el libro porque ha conocido a algunos de los autores de los que habla y con otros al menos ha coincidido alguna vez. Y desde luego por todos siente admiración.

Es un libro que se lee muy rápido, no solo porque sea corto, sino por lo ameno y entretenido que es.

Está salpicado de caricaturas de los escritores que preceden a su texto. Estas ilustraciones están a cargo del ilustrador Fernando Vicente. Os he puesto algunas. Están bien ¿verdad?

Y lo mejor de este libro es que puedes aprender. Me gustan los libros en los que además del placer de la lectura está el de enseñarte, sobre todo si es literatura.

Está editado por Alfaguara, pero ya lo tenéis en bolsillo, mucho más económico.

Yo desde luego lo pienso releer, a la menor oportunidad.




martes, 2 de agosto de 2011

Más nombres originales de tiendas... a lo largo y ancho de este mundo.




Hoy os traigo unos pocos ejemplos más de nombres de tiendas que han llamado mi atención a lo largo y ancho de este mundo. Ya sabéis que tengo debilidad por este tipo de cosas. Ya he hecho algunas entradas más en este blog sobre ello:
http://rociodiazgomez.blogspot.com/search/label/Los%20nombres%20de%20las%20tiendas

En este enlace están todas las entradas que he escrito sobre este tema, una detrás de otra.


Es dificil elegir una frase o una palabra para nombrar lo que sea. Y tiene su importancia. Uno busca precisamente eso, que a alguien que pase por allí, aunque solo haya echado un ligero vistazo, le llame la atención por lo que sea, gire la cabeza para fijarse mejor y así quizás se le quede en la memoria y cuando lo necesite vuelva...

Me divierte encontrar esas frases en mi camino, esa forma de nombrar. No dejan de tener su mérito: alguien ha buscado algún recurso del lenguaje para hacer único a ese título.



Aquí tenemos, por ejemplo, algunos con nombre propio. Por definición los nombres propios (María, Manuela...) distinguen a un ejemplar de su especie. En estos dos casos vemos cómo han utilizado a los nombres propios para darles esa entidad de diferente, para subrayar que es único, distinto a los demás.

El rincón de María es una tienda de objetos para el hogar que está en Torrevieja.

En otros caso además de utilizar un nombre propio se utiliza un diminutivo, con lo cual se ha reforzado la diferencia. Manuela solo tiene una tienda, pero además no es una tienda cualquiera, es que es una tiendecita, pequeña... El uso del diminutivo la distingue de otras tiendas, y suaviza el significado, te lo aproxima, casi con cariño...
La tiendecita de Manuela está en Rota en Cádiz.

En otras ocasiones uno se tiene que quitar el sombrero ante el ingenio. Descubres por casualidad estos nombres y te sonríes... Qué mejor nombre para una tienda de arreglos de costura ¿no?


La aguja veloz, creo que hay varias sucursales, en este caso estaba en el barrio de La Viña en Cádiz.

O este caso, cómo nombre de bar no está mal ¿eh? "Hasta aquí llegué" y se da por supuesto que se quedó... claro.

El bar "Hásta aquí llegué" estaba en Vejer de la Frontera en Cádiz, en lo alto de una de sus cuestas...


¡Y qué mejor nombre para un establecimiento de depilación! Ya había visto otro parecido, está en otra entrada de este blog, que se llamaba "Bye, bye pelos". Pero oye éste es más nuestro...

"Adiós pelos" estaba en una callecita de Orihuela en Alicante.


"Continuará..."

lunes, 1 de agosto de 2011

Estoy leyendo este libro... Me gusta... La tienda de palabras de Marchamalo


¿USTED NO NADA NADA?

ES QUE NO TRAJE TRAJE


-Suena a juego infantil...
-Lo es, una broma inocente. Son palabras con doble personalidad, unas veces significan una cosa, y otras veces otra. Hay centenares: CURA, por ejemplo, es una manera de recuperar la salud, pero también es un sacerdote; CASTA significa linaje, y mujer que se abstiene de la sexualidad; PURO es un tipo de cigarro, y algo sin mezclar; GUÍA puede ser un libro, pero también un líder; por CAPITAL se entiende patrimonio, pero al tiempo es la cabeza administrativa de una región; CABO es un grado militar, y un accidente geográfico; hay FUENTES ornamentales y FUENTES de problemas. Algunas palabras tienen tantos sentidos, escribió un poeta, que vale la pena haber vivido solo para conocerlos -hizo una pausa, valorativa, y prosiguió- Imagine un cuchillo: sobre la mesa es un mero instrumento de cocina; en una panoplia, una pieza de museo, pero clavado en el cuerpo del delito se convierte en el arma homicida... Ocurre lo mismo con las palabras, cambian de significado en virtud de dónde estén colocadas, de su contexto. De alguna manera contienen en sí mismas el germen del juego. Utilizadas con ingenio sirven para construir frases realmente vistosas. Y muy económicas, claro, la misma palabra sirve para todo. Se amortiza enseguida.


EL CABO PRENDIÓ UN CABO EN EL CABO


...

Págs. 50 y 51 de La tienda de Palabras
Jesús Marchamalo