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viernes, 11 de marzo de 2016

11 de marzo otra vez.... en Madrid



Siempre que llega el 11 de marzo no puedo evitar acordarme de aquel otro 11 de marzo, el del 2004 en Madrid. 

Íbamos todos en el metro y en el tren a trabajar. Era la hora. Y en Madrid somos muchos, sí, y anónimos, pero cada uno es ÚNICO y ESPECIAL.

Cada año llega el 11 de marzo y te acuerdas de dónde estabas en ese momento. Porque nos podía haber pasado a cualquiera de nosotros. Y te acuerdas de los ruidos de las megafonías, de las ambulancias, de todo. Qué tristeza.

En aquella ocasión escribí un texto. Solo eran sensaciones. Una compañera después me lo pidió y se llevó mi escrito para colgarlo con tantos otros en una de las estaciones de RENFE más afectadas, la de Santa Eugenia. No sé que fue de aquel escrito mío, dónde iría a parar.


Pero no lo he retocado, es como fue, un desahogo hecho palabras.

Va por aquellos que no se pueden acordar.



Cuando matar no es por supervivencia



Próximo tren procedente de Guadalajara con destino Atocha.
Hace paradas en todas las estaciones de su recorrido.

Porque te lo debemos.
Porque quizás hasta corriste para coger ese tren.
Porque fuiste una de las caras que alguien miró, mientras disimuladamente firmaba con tu nombre bajo el asiento.
Porque aún así, aún así, lo hizo.
Porque tu corazón estalló en millones de lágrimas que mojaron Madrid de impotencia. De rabia. De pena.


Suspendido el servicio en línea 1, entre Atocha y Pacífico
Suspendido el servicio en línea 1, entre Atocha y Pacífico


Porque alguien te está buscando de hospital en hospital.
Porque no te va a encontrar. No.


¿Quién irá a buscar a tu hijo a la guardería?
¿Quién recordará a tu madre que tiene que tomarse las pastillas?
¿Quién ahogará un “buenas noches” en tu lado de la almohada?


Porque solo tienen derecho a matar los animales. Y lo hacen cuerpo a cuerpo. Y lo hacen por supervivencia.
Porque todos lloramos por dentro. Todos. Lloramos.
Porque te lo debemos.
Porque vamos a tu lado, de pie y cogidos a la barra. A tu lado, apretados y aún con sueño.
Porque te lo debemos. Te lo debemos.


Atención viajeros: El servicio Cercanías RENFE está suspendido
Atención viajeros: El servicio Cercanías RENFE está suspendido

©Rocío Díaz Gómez
Marzo 2004

6 comentarios:

  1. Terrible y muy doloroso. Qué triste tu relato. Un beso Ro.

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  2. Un beso, Rocío. Hay cosas que nunca se olvidan.

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  3. Imposible de olvidar un dia como hoy.
    Triste, muy triste. Un beso Ro

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  4. Se puede llorar, yo trabajo en Atocha y pasar por la estación era doloroso, aún hoy,te sacudían muchas sensaciones, las velas, las flores, los mensajes... Tenías mil preguntas pero sobre todo una ¿por qué? Hoy quizás sepamos más del terrorismo que ha sacudido últimamente todo el mundo, que sigue presente en guerras sin sentido, no, no tiene sentido la muerte así. Las lágrimas se te agolpan en la salida y no quieres verlas rodar, pero leyéndote las dejas fluir. Precioso lo que escribiste, duro, pero ahí quedan los sentimientos y los recuerdos y por qué no recordar a todas esas personas con una sonrisa también, es la forma de salir adelante.
    Besos

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  5. Gracias Rocio. Otra vez las lágrimas, otra vez la empatia.El recuerdo.Que nunca se olvide.
    Feli
    Feli

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  6. Muchísimas gracias a todos por vuestros comentarios. Esta entrada era dificil, pero vosotros la habéis hecho mucho mejor. Un beso a cada uno, Rocío

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